La niña activista tiroteada en Pakistán por los talibanes está estable tras ser operada con éxito

• Los cirujanos le han extraído una bala del cuerpo
• Malala Yousufzai, de 14 años, es una activista por los derechos de los niños
• Los talibanes han reivindicado el ataque contra ella

Pakistán podría trasladar a un hospital del extranjero a Malala Yusufzai, la niña de 14 años tiroteada por los talibanes

Malala Yousufzai, la joven activista pakistaní de 14 años de edad que  fue tiroteada por los talibanes junto a otras dos compañeras de escuela en su región natal, el norteño valle paquistaní de Swat, se encuentra estable después de una "exitosa" operación en la que los cirujanos le han extraído una bala de su cuerpo. El caso ha conmocionado al país y a buena parte de la comunidad internacional, ya que Yousufzai era una referencia en Pakistán por su lucha por los derechos de los niños durante el mandato de los talibanes en su región natal.

Los médicos han asegurado que se vieron obligados a iniciar la operación en torno a las 2 am de este martes (20.00 horas en horario peninsular español) después de que Yousufzai desarrollara una inflamación en la parte izquierda de su cerebro.

Según Reuters, la operación duró unas tres horas y en ella le extrajeron un proyectil situado cerca de la médula espinal. "Ella aún está inconsciente y se mantiene en la unidad de cuidados intensivos", ha manifestado a Reuters Mumtaz Khan, jefe del grupo de médicos que se ocupan de Yousufzai en un hospital militar en la ciudad noroccidental de Peshawar.

Malala Yousufzai estaba en estado crítico después de que unos pistoleros le dispararan en la cabeza y el cuello este martes al salir de la escuela. En el tiroteo, otras dos niñas también resultaron heridas.

Una referencia dentro y fuera del país

Malala es conocida por su defensa del derecho a la educación de las niñas paquistaníes y por su denuncia de la represión talibán en el valle del Swat. Como parte de su campaña, en 2009 empezó a escribir un diario sobre la vida en la zona para la cadena BBC en su versión en Urdu, bajo el pseudónimo de Gul Makai.

La joven activista se ganó la admiración y el respeto de muchos en Pakistán por su valentía a la hora de hablar acerca de la vida bajo el gobierno de los talibanes en esa región.

En 2011, la joven activista recibió el Premio Nacional de la Paz por su defensa de los derechos humanos frente a los ataques de los integristas talibanes que dominaron esa región desde 2007 hasta la ofensiva militar del Ejército pakistaní en 2009.

Amplia condena en Pakistán y la comunidad internacional

Los talibanes se han adjudicado la autoría del ataque tras señalar que Yousufzai era "pro-occidental", había estado promoviendo la cultura occidental y había hablado en contra de ellos. "Cualquier mujer que, por cualquier medio, desempeña un papel en la guerra contra los muyahidines debería ser asesinado", ha manifestado el portavoz talibán Ihsanullah Ihsan.

El presidente de Pakistán, Asif Ali Zardari, así como el primer ministro y los jefes de los partidos de la oposición se han unido a varios grupos de derechos humanos como Amnistía Internacional y a las Naciones Unidas para condenar enérgicamente el ataque.

"El futuro de Pakistán pertenece a Malala y valientes jovencitas como ella. La Historia no recordará a  los cobardes que intentaron matarla en la escuela", ha dicho Susan Rice, embajadora de EE.UU. ante las Naciones Unidas, en su cuenta de Twitter.

La Unión Europea (UE) ha pedido protección para la niña activista, una "agresión vil" que supone un ataque contra los derechos humanos, según un comunicado del portavoz de la jefa de la Diplomacia europea, Catherine Ashton.

La alta representante se ha mostado "espantada" tras conocer que el ataque a Malala Yusufzai. "El coraje de la joven Malala y el principio que defiende la han convertido en una fuente de admiración para todos nosotros", señala la nota, en la que Ashton transmite a la niña pakistaní su deseo de que tenga una pronta recuperación.