El municipio barcelonés de Gallifa se declara 'insumiso' y deja de pagar impuestos al Estado
- Está gobernado por Solidaritat Catalana per la Independencia (SI)
- La cantidad que ha dejado de pagar a Hacienda asciende a 1.662 euros
El Ayuntamiento de Gallifa, en Barcelona, se ha declarado "insumiso fiscal" y ha anunciado que ha dejado de pagar el IRPF de sus trabajadores al Estado central para ingresárselo a la Agencia Tributaria Catalana, dependiente de la Generalitat. El dinero correspondiente al último trimestre asciende a 1.662 euros.
El alcalde de Gallifa, Jordi Fornas, del partido Solidaritat Catalana per la Independència (SI) ha explicado que la decisión es un "acto de soberanía" para desmarcarse de España y que sea Cataluña quien gestione sus propios recursos.
Ha precisado que la insumisión es una "consecuencia" de que el municipio aprobara días atrás una moción en el que se declaraba territorio libre y soberano, un texto que han impulsado decenas de municipios de Cataluña. El Ayuntamiento de Girona aprobó ya en marzo de este año una moción para dejar de pagar impuestos a la Hacienda española.
El alcalde de Gallifa ha admitido que desconoce si el gesto del municipio le acarreará consecuencias: "No sabemos demasiado bien lo que puede pasar ahora porque no hay jurisprudencia sobre este tema. Es entrar en terreno desconocido".
En su exposición, Fornes ha estado flanqueado por el diputado de SI en el Parlament Uriel Bertran, que ha recalcado que es "la primera institución catalana que se declara insumisa fiscal", ya que hasta ahora solo lo han hecho algunos ciudadanos a título individual y algunos empresarios.
Bertran ha exigido al Govern que no transfiera los recursos de Gallifa al Estado y que impulse que el ejemplo de este Ayuntamiento sea seguido por el resto de municipios de Cataluña, las diputaciones y la propia Generalitat.
"Expolio de 16.000 millones de euros anuales"
Los independentistas exigen que estos recursos se inviertan en las "carencias" que tiene ahora Cataluña y en sectores como la educación, la sanidad, las farmacias o las entidades del sector concertado que no están cobrando a tiempo.
Bertran ha argumentado que la insumisión es una salida ante el "expolio de 16.000 millones de euros anuales" que Cataluña padece a manos de España, y ante los pagos que el Estado adeuda a la Generalitat.