Reino Unido niega la extradición a EE.UU. de un hacker por el riesgo de suicidio

• Gary McKinnon sufre una forma de autismo
• Accedió a 97 ordenadores militares entre 2001 y 2002

Fotografía de archivo del hacker británico Gary McKinnon junto a los juzgados de Londres.

Un hacker británico acusado de haberse introducido en las redes militares de EE.UU. no será finalmente extraditado a este país debido al riesgo de que cometa suicidio, según ha declarado la ministra de Interior Theresa May.

Gary McKinnon, que llevaba siete años apelando contra su extradición, se enfrenta a una petición de pena de hasta 60 años de cárcel en EE.UU. si es encontrado culpable de lo que la Fiscalía considera "la mayor intromisión de todos los tiempos en un ordenador militar".

McKinnon, arrestado en 2005, sufre del Síndrome de Asperger, una forma de autismo.

"Concluyo que la extradición del señor McKinnon elevaría tanto el riesgo de que terminara con su vida que es incompatible con sus derechos humanos", ha declarado May en el Parlamento. "Por lo tanto, he retirado la orden de extradición", ha añadido.

Accedió a 97 ordenadores

McKinnon, de 46 años, ha admitido haberse introducido en ordenadores de la NASA y el Pentágono bajo el pseudónimo "Solo", pero asegura que buscaba únicamente evidencias de OVNIS.

Funcionarios de EE.UU. aseguran que el exadministrador de sistemas informáticos accedió a 97 ordenadores entre 2001 y 2002, inhabilitando sistemas navales clave y causando daños por valor de 700.000 dólares (más de 536.000 euros).

May asegura haber tomado la decisión tras estudiar informes médicos y recabar asesoramiento legal. "Mr McKinnon está acusado de crímenes graves, pero tampoco hay duda de que está gravemente enfermo", ha explicado.

Ahora serán los jueces británicos quienes decidan si puede ser juzgado en Reino Unido.