Rusia denuncia que los rebeldes sirios tienen lanzamisiles de fabricación americana

• Asegura que disponen de lanzamisiles modelo Stinger
• "Quién se los ha facilitado está aún por determinar", dice un general

Los rebeldes sirios habrían adquirido lanzamisiles tierra-aire, incluyendo misiles Stinger de fabricación estadounidense, según un alto mando militar ruso citado por la agencia Interfax.

Como hiciera el presidente Bachar al Asad, Rusia ha culpado de la violencia a los grupos violentos que operan en Siria, ayudados y armados desde el exterior.

Los militares rusos tienen conocimiento de que los rebeldes que combaten al Ejército sirio "tienen lanzamisiles portátiles, incluyendo Stingers de fabricación estadounidense", según el jefe de los generales rusos, Nikolai Makarov. "Quién se los ha facilitado está aún por determinar", ha añadido.

Durante la invasión de Afganistán por parte de la antigua URSS, EE.UU. proporcionó Stinger a los muyahidines afganos para derribar helicópteros soviéticos.

La cadena estadounidense NBC informó en julio de que el Ejército Libre Sirio (ELS) había obtenido dos docenas de misiles tierra-aire conocidos como MANPAD, que pueden ser lanzados por un solo individuo. El ELS lo negó.

Al contrario de lo ocurrido en Libia, Occidente ha mostrado poco interés por armar a los rebeldes sirios, preocupado por que las armas puedan acabar en manos de islamistas.

El año pasado, Rusia vendió al gobierno sirio armas por valor de mil millones de dólares (casi 800 millones de euros) y ha dejado claro que se opone a un embargo de armas impuesto por el Consejo de Seguridad de la ONU. De todas formas, los rebeldes podrían seguir obteniendo armas de manera ilegal, alega Moscú.

Rusia y China se han opuesto repetidamente a una resolución del Consejo que abra la puerta a la intervención extranjera en el conflicto sirio.