Portugal espera subir las pensiones mínimas un 1,1% en 2013 y Holanda recortará 16.000 millones
- El 20% de los portugueses es pensionista, 3,4 millones
- La Haya se ajustará en cuatro años para tener el 3% de déficit
Portugal espera subir en 2013 las pensiones mínimas un 1,1% pese a las severas medidas de austeridad de ese año, que incluyen la congelación de las prestaciones más elevadas.
Según fuentes oficiales, la actualización superará la inflación prevista (el 0,9%), y afectará a las pensiones por cotizaciones a la Seguridad Social (de 254 euros a 379 euros mensuales), la pensión social mínima (195 euros) y la prestación del régimen especial agrícola (234 euros).
El ministro de la Solidaridad y la Seguridad Social, Pedro Mota Soares, explicó la semana pasada en una comparecencia parlamentaria que una subida de las pensiones mínimas permitirá reforzar el poder de compra de cerca de un millón de personas.
3,4 millones de pensionistas
En Portugal, la población mayor de 65 años (la edad de jubilación obligatoria) representa el 20% de sus 10,5 millones de habitantes. Según datos del ejercicio 2011, en el país hay cerca de 3,4 millones de pensionistas frente a 4,8 millones de trabajadores activos.
Debido a las condiciones impuestas por el rescate financiero concedido a Portugal el año pasado por la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el resto de las pensiones están congeladas e incluso las más altas sufrirán diversos recortes.
El país vive una grave crisis económica que ha elevado el desempleo a cerca del 16% y hará que al final de este año la economía se contraiga un 3%.
Los compromisos de su rescate financiero, de 78.000 millones de euros, le obligarán a aplicar en 2013 los presupuestos del Estado más duros de su historia reciente con el objetivo de no sobrepasar un déficit público del 4,5%.
Holanda recortará 16.000 millones en cuatro años
El nuevo Gobierno holandés, fruto del pacto entre el Partido Liberal (VVD) del primer ministro en funciones, Mark Rutte, y los laboristas del PvdA, aplicará un ajuste presupuestario extra de 16.000 millones de euros durante los próximos cuatro años.
Ambos políticos han indicado que los recortes, que se suman a otro paquete de 18.000 millones aprobados por el anterior Gobierno, son necesarios para mantener el déficit público en el límite del 3% del producto interior bruto (PIB) que exige Bruselas.
Las cuotas a la seguridad social se aplicarán de modo más proporcional a los ingresos, a la vez que se suprimen los beneficios fiscales sobre gastos sanitarios. Además, se aplicará un recorte de 1.000 millones a la cooperación para el desarrollo, se rebaja el tiempo de la prestación de desempleo y las becas a estudiantes universitarios se sustituyen por préstamos de bajo interés.
También invertirá en la formación de profesores y en investigación para el desarrollo, pero se endurecerán los requisitos para recibir ayudas sociales. A pesar sus diferencias, los liberales y los laboristas han consensuado sus puntos de vista en menos de 50 días, un tiempo récord teniendo en cuenta que en Holanda las negociaciones para formar coaliciones de gobierno suelen prolongarse durante meses.