Artur Mas, el viaje del 'Ulises' catalán hacia la Ítaca de la independencia
- El presidente de la Generalitat se presenta a la reelección el 25N
- Entre 1995 y 2003 fue conseller en los gobiernos de Jordi Pujol
- Artur Mas ganó en 2003 y 2006 pero el tripartito le impidió gobernar
Artur Mas, candidato por CiU a la Generalitat
El candidato de CiU, Artur Mas, nació en Barcelona el 31 de enero de 1956 y es licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Barcelona. Es presidente de CiU desde 2004 y de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) desde marzo de 2012. Antes, desde 2000, había ocupado el cargo de secretario general de este partido.
Se convirtió en presidente de la Generalitat tras las elecciones de noviembre de 2010. Había ganado también las elecciones de 2003 y 2006 pero no consiguió gobernar al ser desbancado por el tripartido del PSC, ERC e ICV-EUiA. Artur Mas había sido conseller con Jordi Pujol entre 1995 y 2003.
Entre 1987 y 1995 fue concejal por CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, cuando este esta gobernado por el PSC de Pascual Maragall. En 1995 consiguió un escaño como diputado en el Parlament.
"Las grandes cosas las sueñan los poetas y las llevan a cabo los políticos". La expresión es del candidato de CiU a las elecciones catalanas, Artur Mas, que se presenta a la reelección como presidente de la Generalitat con el compromiso de convocar un referéndum y convertir Cataluña en un estado propio dentro de la Unión Europea en 2020.
La frase sobre los políticos y los poetas la recogió la periodista Pilar Rahola en La máscara del rey Arturo. El enigma de Artur Mas cuando el actual presidente de CiU, de 56 años, daba sus últimos pasos por la travesía del desierto de la oposición meses antes de las elecciones de noviembre de 2010, que ganó con 62 diputados.
CiU no logró la mayoría absoluta pero sí los escaños suficientes para que el PSC, ERC e ICV-EUiA no pudieran reeditar el tripartido que le impidió gobernar en 2003 y 2006 a pesar de ser la fuerza más votada. Entonces se definía a sí mismo como el que ganaba elecciones pero no gobernaba.
Artur Mas, nacido el 31 de enero de 1956 en la capital catalana en el seno de una familia de la burguesía industrial y licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad de Barcelona, fue el delfín designado por el expresidente Jordi Pujol para sucederle tras 23 años en el poder.
Mas formó parte de la Generalitat desde 1995 hasta 2003 como conseller de Política Territorial y Obras (1995-1997), de Economía y Finanzas (1997-1999), de Economía, Finanzas y Planificación (1999-2001), como portavoz y como conseller en cap (una especie de 'primer ministro' catalán) durante los dos últimos años de Pujol como presidente. Fue en esta última época cuando el candidato de CiU catalanizó su nombre y pasó a llamarse Artur en lugar de Arturo.
Seis meses después de haber sido nombrado por primera vez conseller, en las elecciones catalanas de 1995, logró un escaño en el Parlament que ha mantenido desde entonces. Antes había pasado por la Consellería de Comercio, Consumo y Turismo como jefe de servicio y director general (1984-1988) y había sido concejal en el Ayuntamiento de Barcelona (1987-1995). En su etapa municipal compaginó incluso la política con la empresa privada.
Es presidente de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) desde marzo de 2012, cuando dejó el cargo de secretario general que ostentaba desde noviembre de 2000 en manos de Oriol Pujol, hijo de Jordi Pujol. Artur Mas es también desde 2004 presidente de CiU, la federación que integra a CDC y Unió.
Artur Mas, que estudió en el Liceo francés y en la escuela Aula, la conocida como la Eton catalana, entró de casualidad en la política cuando un amigo "saliendo de un partido de baloncesto" le dijo si "quería ir a una reunión de Convergencia", formación a la que se afilió en 1982. Ese mismo año se casó con su esposa, Helena Rakosnik, que conoció en la boda de un amigo y con la que ha tenido tres hijos.
El desafío independentista
El candidato de CiU a las elecciones catalanas busca ahora mejorar los resultados de hace dos años para llevar adelante su programa para Cataluña tras no haber conseguido que el Gobierno de Mariano Rajoy accediera a dotar a esta comunidad de un pacto fiscal como el que tiene el País Vasco.
Artur Mas se la juega al todo o nada ante las advertencias del Ejecutivo central que insiste en que la ley no permite una consulta popular como la que plantea CiU, que a pesar de su desafío evita usar la palabra independencia, incluso, en su programa electoral.
Acaba así una brevísima legislatura de apenas dos años que arrancó con los primeros recortes en sanidad aplicados en el Estado y que han acabado con la petición de un rescate autonómico de más de 5.000 millones de euros y con la deuda degradada hasta el bono basura.
El viaje de 'Ulises' hacia la independencia
En el libro La máscara del rey Arturo se recogía una frase que Artur Mas pronunció hace más de dos años: "La idea de la independencia no es una tarea para impacientes, sino para perseverantes". Mas ha iniciado el camino con intención de culminarlo dentro de ocho años.
"Mantén siempre a Ítaca en tu mente./ Llegar allí es tu destino./ Pero no tengas la menos prisa en tu viaje. / Es mejor que dure muchos años/ y que de viejo al fin arribes a la isla, / rico por todas las ganancias de tu viaje, / sin esperar que Ítaca te va a ofrecer riquezas". Artur Mas aseguró a Pilar Rahola, que le acompañó durante meses para escribir el libro, que él era lo que había visto y "este poema", Ítaca de Kavafis.
La periodista apuntó en aquella biografía que cuando Artur Mas hablaba de Ítaca no solo pensaba en ganar elecciones o gobernar, sino en cambiar Cataluña. El candidato de CiU comenzó una nueva etapa de ese viaje con el adelanto electoral tras la multitudinaria manifestación de la Diada, en la que miles de catalanes pidieron la independencia.
Al día siguiente, Artur Mas aseguró que había llegado el momento de dotar a Cataluña de "estructuras de Estado". "El camino no da más de sí. España ya hizo su transición y ahora nos toca a nosotros", sentenció. Poco después convocó elecciones anticipadas. La respuesta está ahora en manos de los catalanes.