Una niña de 14 años muere en Pakistán tras ser atacada con ácido por sus padres

• Los progenitores sospechaban que la menor tenía relaciones con un joven de su aldea
• Los vecinos denunciaron los hechos y los padres están detenidos
• En lo que va de año, hay constancia de más de 80 ataques de este tipo

Una niña paquistaní muere después de que sus padres le arrojen ácido en la cara

Una niña de 14 años ha muerto en una aldea del norte de Pakistán, Saidpur Bela, después de ser atacada con ácido por sus padres a causa de las sospechas de que su hija tenía relaciones con otro joven del lugar, según ha informado este viernes una fuente policial.

La menor, identificada por la policía como Anusha, fue golpeada y agredida con ácido el pasado martes en su casa, y ha muerto en el hospital debido a las quemaduras en la cabeza y el torso, ha señalado a EFE un responsable de la policía local, Javed Abbasi.

"Al día siguiente de los hechos, algunos vecinos alertaron a las fuerzas de seguridad y procedimos a detener a los padres, que siguen en custodia policial", ha explicado Abbasi, quien rehusó dar más detalles mientras siguen las investigaciones sobre el caso.

Los llamados crímenes de honor son habituales en Pakistán y, según datos de la Comisión de Derechos Humanos del país asiático, 943 mujeres fallecieron el año pasado en agresiones de este tipo.

Esos crímenes se cometen cuando una familia, normalmente en las áreas rurales, cree que su honor ha sido mancillado por la actitud de una mujer, ya sea porque rechaza un matrimonio o porque se relaciona con alguien sin la aprobación familiar. Muchas de las agresiones se realizan lanzando ácido a la cara de las mujeres.

El caso de Anusha se produjo en la región de Cachemira bajo jurisdicción paquistaní, donde los crímenes con ácido no son tan habituales como en las provincias del Punyab (este) y el Sindh (sur), que concentran la mayoría de este tipo de crímenes.

Según datos de una asociación de supervivientes de ataques con ácido citados hace unas semanas por el rotativo The News, en 2012 se han registrado ya más de 80 ataques de esta índole, a pesar de que la ley fue endurecida a finales del año pasado.

Con ese cambio legislativo, los agresores se exponen a una pena mínima de 14 años que puede llegar hasta la cadena perpetua, aunque muchos casos quedan sin resolver y los culpables escapan de la acción de la justicia.