Las familias y amigos de las víctimas del Madrid Arena piden 'juicio y castigo' a los responsables
- Familiares y amigos se han concentrado en la Puerta del Sol de Madrid
- Han pedido que "caiga todo el peso de la ley" sobre los repsonsables
- Se ha leído un manifiesto y se ha guardado cuatro minutos de silencio
Los padres y familiares de las cuatro jóvenes fallecidas el pasado 31 de octubre en una fiesta celebrada en el recinto de Madrid Arena han exigido que "recaiga todo el peso de la ley" sobre los responsables de la fiesta en la que se vivió un aplastamiento cuyo resultado fue el de cuatro jóvenes muertas y una quinta que se encuentra en estado crítico.
Mediante un escrito leído por un amigo del padre de una de las jóvenes fallecidas que ha ejercido como portavoz, Enrique, las familias han exigido la "depuración de responsabilidades de cualquier orden jurisdiccional" para que "recaiga todo el peso de la ley" sobre los responsables.
En el marco de la concentración convocada por el Sindicato de Estudiantes en la Puerta del Sol en apoyo a los familiares y en recuerdo de las víctimas, el amigo del padre de Katia ha indicado que los familiares confían "absoluta y plenamente" en los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado que participan en las investigaciones para que consigan "el adecuado esclarecimiento de los hechos".
En esta línea, ha deseado que "se haga cumplir las leyes existentes y se tomen cuantas medidas legislativas y administrativas sean precisas para que esto no vuelva a suceder jamás".
Por último, Enrique también ha querido agradecer el apoyo de "la sociedad española" y "particularmente el trato recibido por parte de los medios de comunicación", que resulta "reconfortante" en estos momentos de dolor.
En el acto, en el que se ha leído un manifiesto y se ha rendido un sentido homenaje a las jóvenes fallecidas, los responsables del sindicato han exigido la "dimisión de Ana Botella y su vicealcalde Miguel Angel Villanueva" así como que se esclarezcan las responsabilidades de la empresa organizadora del evento.
Tras la lectura del manifiesto, han guardado cuatro minutos de silencio y han encendido velas y colocado flores sobre una pancarta que rezaba el nombre de las cuatro jóvenes muertas.
Ana Botella dice que no dimitirá
Cuando se cumple una semana de la avalancha que en la fiesta de Halloween acabó con la vida de cuatro chicas y mantiene en estado de máxima gravedad a otra, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha dejado claro que no dimitirá por este suceso y ha decidido cerrar de manera preventiva y temporal dos emblemáticos recintos.
Se trata del Palacio Municipal de Congresos del Campo de las Naciones, del año 1993, y el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo, anterior a los ochenta, para subsanar los problemas de seguridad que se han detectado en sus instalaciones porque, ha dicho Botella, "las personas y su vida es lo más importante".
Precisamente la regidora de la capital ha descartado que vaya a dimitir y ha expresado su "plena confianza" en su equipo de Gobierno, después de que la oposición haya pedido el cese de algunos de sus concejales y de la delegada de Urbanismo, Paz González.
Botella ha salido al paso de las críticas a su viaje a Lisboa en el fin de semana posterior al suceso y ha enfatizado: "En todo momento cumplí con mis obligaciones de alcaldesa; desde el minuto uno, desde la madrugada del jueves cuando me avisaron hasta hoy mismo, no he dejado ni de trabajar ni de ocuparme de los sucesos ocurridos en Madrid".
Siete días después de la tragedia no hay detenidos ni imputados por la muerte de las cuatro jóvenes, en espera de que el juez encargado del caso lleve a cabo la próxima semana la inspección ocular del recinto.
Divertt comunicó entre 4.000 y 6.000 asistentes
La propietaria del mismo, la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos, recibió antes de firmar el contrato con Diviertt, promotora del evento, que a éste acudirían entre 4.000 y 6.000 personas.
El cálculo de Diviertt se produjo nueve días antes de la fiesta y dos antes de la firma del contrato, suscrito el pasado 24 de octubre por el administrador único de la promotora, José María Flores Gómez, y el gerente de la empresa municipal, Jorge Rodrigo Domínguez.
Con su estimación, ambas partes firmaron el contrato por un valor de 12.000 euros, toda vez que está estipulada esa cifra cuando el aforo no sobrepase las 5.000 personas, aunque el importe a pagar por la promotora sería de 20.000 euros si se superaba esa asistencia.
La previsión del aforo máximo que podría albergar el pabellón era, según firmó el Servicio municipal de Arquitectura el 29 de octubre, de 9.620 personas. Aunque todavía no se sabe el aforo real que había en ese momento, la Policía estima que se sobrepasó "sobradamente". La empresa cifró en su día en 9.650 las entradas vendidas de las 10.600 disponibles.
Polémica por el botellón
Otra de las polémicas suscitadas hoy ha girado en torno a la actuación de la Policía Municipal en el exterior del recinto, donde cientos de jóvenes realizaron botellón que no controlaron los agentes pese a que el protocolo de seguridad para este tipo de eventos así lo establece.
No obstante, Ana Botella ha explicado que el dispositivo de la Policía Municipal tenía como "prioridad" la seguridad del entorno exterior y no del botellón, que sí se controló en un perímetro de 50 a 60 metros.
Fuentes sindicales han denunciado a Efe la escasez de efectivos de ese cuerpo para ese evento -12 agentes, según los sindicatos y 17 según el Ayuntamiento- y han subrayado que hubiera sido un "suicidio" actuar contra los jóvenes que celebraban botellón porque los propios policías hubieran salido malparados.