La CE no exigirá por ahora medidas adicionales a España para reducir su déficit en 2012 y 2013
- Olli Rehn alerta de que las previsiones para 2013 son demasiado optimistas
- Abre la puerta a que en 2014 sí haya que hacer esfuerzos adicionales
- Insinúa que España ya cumple las condiciones si solicita un nuevo rescate
En plena huelga general, el Gobierno español ha recibido un balón de oxígeno de la Comisión Europea. El vicepresidente económico Olli Rehn ha anunciado que no exigirá esfuerzos adicionales a España, al considerar que el Ejecutivo ha tomado "medidas efectivas" para reducir el déficit público durante 2012 y 2013. No obstante, ha alertado en contra de "proyecciones optimistas" y ha subrayado que en febrero hará una nueva valoración cuando disponga de información actualizada de la situación de las finanzas públicas y nuevas previsiones de crecimiento.
"Sabemos que el Gobierno y el pueblo español están haciendo esfuezos significativos para garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas. Esto implica decisiones difíciles y sacrificios para muchas partes de la población. Se esta progresando aunque la situación a la que se enfrentan muchos españoles está siendo muy difícil", ha valorado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios.
En una rueda de prensa de apenas diez minutos convocada por sorpresa para evaluar el procedimiendo de déficit excesivo contra España y coincidiendo con la paro general en nuestro país, Rehn ha valorado positivamente los medidas adoptadas por el Gobierno de Mariano Rajoy por estar "en línea" con las recomendaciones específicas de la Comisión. Aún así ha destacado que hay "riesgos para conseguir los objetivos nominales en 2013".
Estos riesgos "provienen en parte de un escenario macroeconómico optimista, tal y como aparece en el presupuesto de 2013, y también de las proyecciones optimistas de la Seguridad Social, más las dificultades presupuestarias en las Comunidades Autónomas", ha observado. Por ello, ha pedido al Gobierno español que proceda al establecimiento del Consejo Fiscal y que garantice su "plena independencia institucional y financiera".
Bruselas no relaja los objetivos de déficit
Y en este sentido, ha puntualizado, que espera que España presente en breve detalles concretos porque "las medidas anunciadas hasta ahora para 2014 se quedan cortas" respecto a lo exigido en las "recomendaciones revisadas del Consejo".
El Ministerio de Economía, que ha valorado de manera "muy positiva" el respaldo de la CE, ha respondido a las advertencias de Bruselas reafirmándose en el "mismo compromiso" de reducción de déficit "para ejercicios futuros", según una declaración escrita.
Pese al espaldarazo a la política del Ejecutivo español, el vicepresidente de la Comisión no ha aclarado si dará más tiempo a España para llegar al umbral del 3% que prevé el Pacto de Estabilidad y si propondrá relajar los objetivos nominales pactados con la UE (6,3% para este año, 4,5% para 2013 y 2,8% para 2014), y se ha remitido a una próxima comparecencia en febrero.
“España cumple con las condiciones que se le exigirían a cambio de un nuevo rescate“
Preguntado sobre la solicitud de un nuevo rescate, el comisario ha insistido en que "es una decisión que solo el Gobierno español puede adoptar", pero ha insinuado que España no debería cumplir nuevas condiciones si lo hace.
Condiciones del rescate
A juicio de Bruselas, España está haciendo esfuerzos para reducir su déficit público y también está respetando las "recomendaciones" de la Comisión y el Consejo Europeo por lo que cumpliría con la condiciones básicas de un hipótetico programa de de compra de deuda pública española.
Rehn ha señalado que España va "por el buen camino" en los tres grandes ámbitos establecidos como condiciones en el marco de un programa de ayuda precautorio : la recapitalización del sistema financiero, la reducción del déficit público y las reformas estructurales.
"En general, España está cumpliendo" con esas políticas, ha insistido Rehn, que ha asegurado que la CE "está lista para actuar" si finalmente Madrid decide activar el mecanismo de ayuda.
Hasta ahora, el Ejecutivo español ha mantenido que tiene las necesidades de financiación cubiertas para este 2012 y que no tiene decidido solicitar ayuda a la eurozona. Esa petición al fondo de rescate europeo (MEDE) permitiría activar el programa de compra de bonos españoles por parte del BCE y aliviar así la presión de los mercados sobre la deuda española.