El Gobierno dice que "escucha la calle" pero que las urnas le exigieron tomar medidas
- La vicepresidenta afirma que toman las medidas que creen "más adecuadas"
- Margallo dice que entiende la huelga pero que se "va por el buen camino"
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado este jueves, un día después de la huelga general del 14N y las multitudinarias manifestaciones contra los recortes, que el Ejecutivo "escucha la calle" pero que también tiene que "tomar decisiones con la responsabilidad que le dieron las urnas" hace un año.
"Nosotros tenemos que tomar las medidas que consideramos que son las más adecuadas en momentos de crisis" como las que ya se están tomando, en su opinión, para frenar el déficit público.
Sáenz de Santamaría ha eludido pronunciarse sobre si la huelga general, la segunda convocada contra las políticas del Gobierno de Rajoy en menos de un año, fue un "éxito" o un "fracaso", ya que al Gobierno no le corresponde hacer "valoraciones objetivas".
La vicepresidenta del Gobierno ha insistido en que el Ejecutivo seguirá trabajando para poner en marcha las "reformas necesarias" para que la economía española vuelva a crecer y poder así crear empleo y "dar un mejor futuro a los españoles todos juntos".
Sáenz de Santamaría ha lamentado los actos vandálicos que se produjeron durante la huelga general, que se saldó con 155 detenidos, y ha subrayado que unos cosa es el derecho a hacer huelga o no y a manistarse, que el Gobierno tiene que garantizar, y otra es el "derecho de todos los españoles de vivir y no tener que ver y padecer" en sus personas, bienes o calles "destrozos que no tienen sentido".
En este sentido, ha hecho un llamamiento para que "todos" condenen los actos vandálicos que se produjeron durante la huelga general y que "nadie puede amparar".
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha asegurado en Los Desayunos de TVE que entiende que los ciudadanos vayan a la huelga pero que la convocatoria del 14N "no ha sido oportuna porque deteriora la imagen de España".
Preguntado por los periodistas, García-Margallo ha explicado que el Gobierno no va a cambiar su política porque "estamos haciendo lo que tenemos que hacer", ha añadido.
Para el titular de Exteriores, España experimenta un cambio de modelo radical que antes se sustentaba en el "ladrillo" pero ahora tiende "a salir al exterior y a ser más competitivo".
A su juicio, las políticas del Gobierno "están dando sus frutos porque hemos mejorado la productividad y se han incrementado las exportaciones". "Estamos en mitad de un proceso doloroso pero estamos en el buen camino por eso la huelga no nos va a hacer cambiar", ha aseverado.