Los fetos bostezan en el útero, un proceso de desarrollo que puede servir como índice de salud

• Otros inventigadores afirman que es simplemente la apertura bucal
• Los científicos analizaron las secuencias de vídeo 4D de 15  fetos sanos
• No hubo diferencias significativas entre niños y  niñas en el bostezo frecuencia

Un equipo de investigadores de las universidades de Durham y  Lancaster (Reino Unido) sugiere que los fetos bostezan dentro del útero, un proceso de desarrollo que podría dar a los médicos otro  índice de salud.

Mientras algunos expertos han sugerido que los fetos  bostezan y otros afirman que es simplemente la apertura bucal, este  estudio distingue claramente el bostezo, del no bostezo o la boca  abierta, centrándose an la duración de la apertura de la boca.

Los investigadores analizaron las secuencias de vídeo 4D de 15  fetos sanos (ocho femeninos y siete masculinos) de entre 24 a 36  semanas de gestación para examinar de cerca todos los acontecimientos  en un tramo de aftosa en el feto y hallaron que más de la mitad de  las aberturas de la boca observadas fueron bostezos, según publica  este miércoles la revista 'Plos One'.

El bostezo se redujo desde las  28 semanas y que no hubo diferencias significativas entre niños y  niñas en el bostezo frecuencia.

Relacionado con el desarrollo del feto

Aunque la función y la importancia del bostezo aún se desconoce,  los hallazgos del estudio, financiado por el Consejo Económico y  Social Research Council (ESRC), sugieren que el bostezo podría estar  relacionada con el desarrollo del feto y como tal podría ser una  indicación más para médico sobre la salud del bebé.   "Nuestro estudio longitudinal muestra que el bostezo disminuye al  aumentar la edad fetal.

A diferencia de nosotros, los fetos no  bostezan por contagio ni por sueño, sino que la frecuencia de los  bostezos en el útero puede estar relacionado con la maduración  temprana del cerebro en la gestación", Nadja Reissland, del  Departamento de la Universidad de Durham de Psicología.

Así, Reissland concretó que teniendo en cuenta que la frecuencia de  bostezos en la muestra de fetos sanos se redujo desde las 28 semanas  a 36 semanas de gestación, parece que el bostezo y la apertura bucal  tener están relacionados con la maduración de la gestación, por  ejemplo del sistema nervioso central.