La tregua en Gaza otorga al Egipto islamista el liderazgo en Oriente Próximo
- El Egipto de los Hermanos Musulmanes se reivindica ante EE.UU.
- Hamás es la rama gazatí del movimiento islamista egipcio
- Obama apuesta por acercarse a los Gobiernos islamistas moderados
Ver también: Especial mapa del conflicto en Gaza
Minutos después de que entrara en vigor la tregua entre Hamás e Israel, decenas de personas celebraban en la calles de Gaza lo que los militantes de la organización islamista consideraban una victoria. Horas antes, desde El Cairo, la jefa de la diplomacia estadounidense, Hillary Clinton, anunciaba junto al ministro de Exteriores egipcio, Mohamed Kamel Amr, el acuerdo para poner fin a ocho días de bombardeos que se han cobrado la vida de 164 palestinos y cinco israelíes.
Esa rueda de prensa era la imagen del triunfo de la diplomacia islamista de los Hermanos Musulmanes. Su mediación ha sido fundamental para alcanzar el acuerdo, y así lo reconoció la propia Clinton ante la atenta mirada de medio mundo: “El nuevo Gobierno egipcio está asumiendo la responsabilidad y el liderazgo que han convertido durante mucho tiempo a este país en una piedra angular de la estabilidad y la paz", señaló.
Incluso el propio Barack Obama y agradeció los esfuerzos y el "liderazgo personal" del presidente islamista egipcio, Mohamed Mursi, una personalidad hasta hace poco desconocida en Oriente Próximo y que tras el conflicto de Gaza ha cobrado un gran peso en la región.
La nueva influencia de Egipto sobre Hamás
Desde el primer momento de esta nueva crisis, Egipto ha asumido un papel protagonista. Mursi envió a su primer ministro a Gaza cuando Israel ya había movilizado a 75.000 reservistas.
El presidente egipcio se ha movido con destreza en una crisis que le resultaba muy incómoda. Hamás se considera la rama palestina de los Hermanos Musulmanes, y el apoyo diplomático a la organización palestina le ha causado algunas tensiones con EE.UU.
De hecho, esta conflicto también ha sido un termómetro para medir el estado de las relaciones entre Washington y El Cairo, más aún después de los recientes ataques contra la embajada estadounidense en la capital egipcia y reprobación de la estrategia diplomática de Obama en la primavera árabe. Y la imagen de Clinton y Amr lo dice todo.
Parte de la fuerza de Mursi se encuentra, en una gran parte, en la ascendencia que tiene sobre la organización islamista palestina. Difícilmente el Egipto de Hosni Mubarak podría haber conseguido este acercamiento. Hamás confía en el Gobierno de sus hermanos mayores egipcios como garante. El acuerdo alcanzado, que según informa La Vanguardia ha sido inicialmente verbal porque ninguna de las partes enfrentadas quiere legitimar al contrario, necesitaba de una vigilancia externa. Y Egipto ha dado un paso adelante.
EE.UU. apuesta por el bloque suní de islamistas moderados
Ahora, Hamás se ve ante una disyuntiva. Tiene dos caminos para elegir, en un momento clave para la región: por un lado, el del frente chií Irán-Siria-Hizbuláh, que le presta apoyo táctico, económico y armamentístico, pero del que se ha separado recientemente por sus discrepancia en la guerra civil de Siria.
Por el otro, el camino que le acaba de mostrar Egipto, el del bloque suní, y que resulta más natural para la organización islamista palestina. El Cairo ofrece a Hamás cierto reconocimiento y soberanía y en ese bloque también cuenta con países como Catar.
El contexto en la región también ha jugado a favor del Egipto de los Hermanos Musulmanes. El apoyo de Washington a la mediación de El Cairo parece demostrar que el Gobierno de Obama apuesta por los gobiernos islamistas algo más moderados para tratar de desactivar la influencia de Al Qaeda y otros grupos salafistas en la región.
Además, la inestabilidad en el Líbano y, sobre todo, la guerra civil en Siria, donde también se juega una guerra regional entre el frente chií representado por Irán y el suní por Catar, Arabia Saudí, Egipto y Turquía (en diferentes posiciones), pueden cambiar el tablero geoestratégico de Oriente Próximo.
Las revueltas árabes han posicionado a varias organizaciones parecidas a los Hermanos Musulmanes en varios países del mundo musulmán. Como la principal y más antigua, la Hermandad egipcia conoce su influencia sobre todas ellas, y el gobierno de Mursi mueve sus fichas. Y quizá una de las más importantes sea la del conflicto palestino-israelí.