El cadáver de Yaser Arafat será exhumado el próximo martes
- Tomarán pruebas que ayuden a esclarecer las razones de su muerte
- La delegación rusa actuará como observadora de todo el proceso
El cadáver del histórico dirigente palestino Yaser Arafat será exhumado el próximo martes por un equipo de expertos franceses y suizos, bajo la supervisión de una delegación rusa, con el fin de tomar pruebas que ayuden a esclarecer las razones de su muerte.
"El próximo día 27 la tumba será abierta sin ninguna presencia de los medios de comunicación", ha dicho en rueda de prensa Taufik Tirawi, presidente de la comisión creada por la Autoridad Nacional Palestina (ANP) para esclarecer las razones de su muerte en 2004.
Tirawi, que ha comparecido este sábado ante los medios para explicar los procedimientos para la exhumación del cadáver y las investigaciones in situ, ha afirmado que todo se hará de acuerdo a la "soberanía palestina".
"Hay un acuerdo entre los palestinos y las diferentes partes", ha dicho el destacado funcionario y ha explicado que el equipo judicial francés a cargo del caso se ocupará de la investigación en el terreno pero "solo la fiscalía palestina tomará testimonio a la gente" que le rodeó en sus últimos días en Ramala.
Restos de polonio en sus ropas
La muerte de Arafat fue denunciada el pasado verano a un tribunal galo por su viuda Suha, después de que, con la ayuda de la cadena de televisión Al Jazira, un instituto científico suizo descubriera restos de polonio en algunas de sus ropas y pertenencias más privadas.
Según Tirawi, en la toma y análisis de pruebas biológicas del cadáver participarán dos equipos científicos, uno francés y otro suizo, y "los resultados de estas serán entregados inmediatamente a los palestinos". "En un principio los franceses rechazaron hacerlo pero el acuerdo final así lo exige", ha asegurado.
La delegación rusa actuará como observadora de todo el proceso, por petición expresa del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás.
Arafat murió en un hospital militar cerca de París el 11 de noviembre de 2004 después de varias semanas de agonía en Ramala, donde llevaba tres años cercado por Israel.
El rápido deterioro de su salud alentó todo tipo de conspiraciones sobre un posible envenenamiento, teoría que se vio reforzada por el descubrimiento del polonio.
A principios de noviembre el equipo de investigadores suizos efectuó una revisión preliminar de la tumba en Ramala, y a continuación comenzaron los trabajos para la apertura de la tumba, situada a escasos metros del lugar donde estuvo confinado antes de ser trasladado a Francia, la mukata.