¿Qué pretenden los palestinos al pedir su reconocimiento como estado ante la ONU?

• La Autoridad Nacional Palestina busca legitimidad internacional
• Si es reconocida podría recurrir a los tribunales internacionales
• España, Francia y casi toda Latinoamérica lo apoyan
• Reino Unido y Alemania se abstendrán

Un bandera palestina de la campaña para apoyar su reconocimiento como estado, frente a la sede de la UE en Bruselas.

La Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha anunciado un segundo asalto  diplomático en la ONU. Tras el fracaso de la solicitud de reconocimiento  de Palestina como Estado miembro de pleno derecho en el Consejo de Seguridad -por el bloqueo de EE.UU- en septiembre de 2011, Mahmud Abás presentará esta vez la petición ante la Asamblea General, donde espera obtener un abrumador apoyo.

La  ofensiva de la delegación palestina llega apenas una semana después de  que Hamás e Israel acordaran un alto el fuego para poner fin a la mayor  escalada de violencia en Gaza de los últimos cuatro años: la Operación  Pilar Defensivo. La crisis, que ha dejado casi 170 palestinos y seis  israelíes muertos, ha unido a las facciones palestinas en una apuesta  pacífica para resolver el conflicto árabe israelí.

• ¿Cuál es el estatus actual de los palestinos en la ONU?

La ANP está considerada una "entidad" y aceptada  como observador por la ONU, pero sin ningún derecho de voto. La UE  también es un observador, mientras que el Vaticano es lo que se conoce  como un "estado observador no miembro". Ni la UE ni el Vaticano pueden  votar.

• ¿Qué quieren las distintas partes implicadas? 

La iniciativa diplomática partió de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que gobierna en Cisjordania, y de su presidente, Mahmud Abás. La intención de Abás es garantizarse el apoyo y la legitimidad interrnacional en un momento en el que Israel no se aviene a negociaciones y continúa con su política de hechos consumados y de control del territorio con la expansión de las colonias ilegales. Un reconocimiento internacional reforzaría su posición en caso de volver a la mesa de negociaciones.

Hamás se manifestó desde el inicio contrario a esta vía, ya que la considera inútil. La resistencia armada es, en su opinión, la única manera de recuperar el territorio ocupado después de 1967. Sin embargo, la reciente operación militar sobre Gaza, donde gobiernan los islamistas, ha contribuido a acercar posiciones con Fatah, el partido de Abás, y la semana pasada, por primera vez, Hamás se manifestó a favor de la iniciativa.

Israel, por su parte, la considera una "decisión unilateral" incompatible con las negociaciones de paz y con los Acuerdos de Oslo. Tel Aviv ha amenazado con tomar represalias si Abás lleva hasta el final su pulso en Naciones Unidas. El principal temor israelí es que, una vez reconocido como estado, Palestina pueda firmar acuerdos internacionales y recurrir a la Corte Penal Internacional (CPI).

• ¿Qué países han anunciado su apoyo?

Los palestinos cuentan con el apoyo de la gran mayoría de países árabes y musulmanes. Además, esperan el voto afirmativo de casi toda América Latina. Según la OLP, Brasil, Argentina, Chile, Perú, Venezuela, Cuba o Nicaragua ya han confirmado que copatrocinan la iniciativa palestina.

España ha anunciado ya, por boca del ministro de Exteriores, José Manuel Margallo, que votará afirmativamente por "coherencia con nuestra historia".

Francia, Austria, Irlanda, Dinamarca, Noruega, Suiza, Finlandia, Portugal, Malta, Luxemburgo y Bélgica son otros de los países han expresado su apoyo a la candidatura palestina.

• ¿Qué países no apoyarán la iniciativa palestina?

La Unión Europea, sin embargo, no ha sido capaz de fijar una postura común. República Checa, Italia u Holanda se decantan por el no. Alemania ya ha anunciado que tampoco respaldará a los palestinos, y que se abstendrá. 

Estados Unidos, el principal aliado de Israel, también votará en contra. EE.UU. ya usó su poder de veto en el Consejo de Seguridad para evitar que los palestinos accedieran a un reconocimiento pleno. El presidente estadounidense, Barack Obama, ha reiterado que esta no es la vía para volver a la mesa de negociaciones, aunque insiste en que sigue apostando por la solución de los dos estados.

No obstante, tras ser reelegido los palestinos le felicitaron y le emplazaron a que apoyara la solicitud en la ONU como señal de que apoya la reapertura de negociaciones.

• ¿Quiénes son los indecisos?

La postura de Reino Unido ha causado especial malestar entre los palestinos. En una declaración en la Cámara de los Comunes, el titular del 'Foreign Office' ha dicho que su país se abstendrá ante la falta de avances en las negociaciones de paz, pero dejó abierta la posibilidad de un respaldo si hay un compromiso palestino de volver a las negociaciones con Israel sin condiciones previas.

Otros tres países latinoamericanos, Panamá, Colombia y Guatemala no   está claro si votarán en  contra o se abstendrán.

• ¿Qué implica la solicitud de reconocimiento como estado observador no miembro? 

En este caso, es la Asamblea General la que decide por mayoría simple   de sus 193 miembros, y como unos 120 países ya han reconocido a   Palestina de manera unilateral, la petición tiene muchas posibilidades de ser aprobada. Estados Unidos, Israel y otros países importantes se opondrían, pero no existe derecho de veto en la Asamblea.

Esta denominación puede interpretarse como un reconocimiento implícito de la ONU, porque supone que los palestinos controlan un estado real.

Además, y algo mucho más importante, si la ANP fuera considerada un estado no-miembro podría firmar algunos tratados internacionales, como el Tratado de Roma que dio lugar a la Corte Penal Internacional (CPI).

La posibilidad de que los palestinos se adhieran a la CPI y acepten su jurisdicción preocupa a EE.UU. e Israel. En  2009, los  palestinos pidieron al fiscal jefe de la Corte que  investigara supuestos  crímenes de guerra cometidos por el Ejército  hebreo durante la  Operación Plomo Fundido sobre Gaza en 2008-2009. Hasta ahora, la CPI no ha hecho nada, pero  si la ANP firma el tratado, el fiscal podría verse obligado a actuar.