Mueren al menos 34 personas en una serie de explosiones en un suburbio de Damasco
- Ha ocurrido en un barrio de mayoría drusa y cristiana
- La agencia estatal siria califica el atentado de "terrorista"
- Ban Ki-moon reitera la urgencia de frenar la "espiral de violencia" en Siria
Al menos 34 personas han muerto este miércoles en una serie de explosiones en , según el Ministerio de interior. Más de ochenta han resultado heridas y la cifra final de muertos puede ascender, ya que aún hay restos humanos sin identificar.
Dos coches bombas han estallado de forma consecutiva en la plaza principal de Yarmana, mientras que otros dos artefactos han explotado en zonas residenciales. Según la agencia Efe, que se remite a fuentes oficiales, el segundo vehículo ha sido detonado minutos después de que el primero estallara cuando en la plaza se encontraban los equipos de rescate para atender a las víctimas.
La televisión oficial siria ha mostrado imágenes del lugar de los estallidos, donde yacían varios cadáveres ensangrentados y el suelo estaba cubierto de cristales.
El máximo responsable de la ONU ha reiterado que este tipo de ataques son "inaceptables" y ponen de manifiesto la "urgencia" de frenar la "espiral de violencia" y la necesidad de avanzar hacia una solución política que respete las aspiraciones legítimas del pueblo sirio.
Yarmana, situado a seis kilómetros de Damasco y con una población de mayoría drusa y cristiana, ha sido escenario frecuente de atentados desde el inicio de la rebelión en Siria en marzo de 2011 contra el régimen autoritario del presidente Bachar al Asad.
En los últimos meses, se han registrado al menos diez explosiones en este suburbio. Uno de los ataques más recientes fue el del pasado día 19 cuando ocho personas perecieron por el impacto de proyectil de mortero en un autobús.
Más violencia ante la parálisis de las negociaciones
Las autoridades sirias responsabilizan a "grupos terroristas armados" de la violencia en el país, mientras que la oposición niega cualquier vínculo con ellos.
En los últimos meses, una organización extremista, el Frente al Nusra, contraria al régimen sirio, se ha atribuido la responsabilidad de varios atentados.
La violencia se ha recrudecido en Siria en medio de la parálisis de los esfuerzos mediadores, que no han logrado poner fin a un conflicto que deja ya, según fuentes opositores, más de 40.000 muertos.