La Asamblea Constituyente de Egipto aprueba el proyecto para una nueva constitución
- Ahora tendrá que ser ratificado por Morsi y sometido a referéndum
- La sharia sigue siendo la fuente legislativa fundamental
- Morsi niega querer convertirse en un "dictador"
- Continúan las protestas contra el decreto las decisiones del presidente
La Comisión Constitucional de Egipto ha adoptado un proyecto de Constitución, que ratificará el presidente de Egipto, Mohamed Morsi, y será sometido a referéndum para reemplazar la Carta Magna derogada tras la caída del dictador Hosni Mubarak a principios de 2011, según ha anunciado el presidente de esta comisión, Hossam El-Ghiriani.
Los miembros de esta comisión, mayoritariamente islamista, han votado 234 artículos presentados durante una sesión maratoniana que comenzó la tarde de este jueves y ha durado toda la noche, según France Presse.
"Hemos terminado de trabajar en la Constitución de Egipto. Vamos a llamar al presidente a una hora razonable para informarle de que la asamblea ha terminado su tarea y el proyecto de la Constitución se ha completado", ha afirmado Hossam al Gariani, jefe de la Asamblea Constituyente durante la retransmisión de la reunión, que ha durado cerca de 19 horas, informa Reuters.
En una de las primeras votaciones se ha acordado mantener "los principios de la sharia" (ley islámica) como la principal fuente de legislación, utilizando la misma expresión de la Carta Magna vigente, y que proviene del régimen de Mubarak. Se garantiza así mismo la libertad religiosa y de penamiento.
El documento considera también que la universidad islámica de Al Azhar es un órgano independiente que se encarga en exclusiva de todos sus asuntos como la divulgación del islam, las ciencias islámicas y la lengua árabe en Egipto y el mundo, y se toma en cuenta la opinión de sus ulemas en asuntos referidos a la sharia.
La nueva ley, de aprobarse, no permitirá juzgar a un civil ante la Justicia militar, salvo en delitos que dañen a las Fuerzas Armadas y que estarán determinados por ley.
Ausencia de diputados laicos
La consulta se celebró con un quórum de 85 integrantes de los cien que componen el órgano, después de que el presidente de la asamblea, Hosam al Gariani, convocara a once miembros de reserva para sustituir a parte de los 26 que han boicoteado este comité al considerar que está dominado por los islamistas.
Tras la aprobación, Al Gariani ha pedido a los integrantes de su organismo que le deleguen la redacción del preámbulo de la Constitución, en el que intentará aunar todas las propuestas que ha recibido. El texto será impreso y distribuido entre los ciudadanos antes de la celebración del referéndum.
La validez de la composición de la asamblea está siendo examinada por el Tribunal Constitucional, que el próximo domingo tiene que pronunciarse, aunque, según el decreto emitido por Morsi hace una semana, es indisoluble.
Continúan las protestas
Dicho decreto blinda los poderes del presidente y la Cámara alta del Parlamento y la Asamblea Constituyente, lo que ha provocado las protestas de los partidos laicos y de muchas de las organizaciones sociales que protagonizaron la revuelta contra Mubarak.
Como parte de las protestas, en la plaza cairota de Tahrir continúa por séptimo día consecutivo la acampada de los opositores. Miles de personas han vuelto además a manifestarse por las calles de la capital este viernes.
Además, el Alto Comisionado de la ONU para Derechos Humanos ha pedido a Morsi que reconsidere su decreto, que califica de "incompatible" con las convenciones internacionales sobre derechos humanos.
Para responder a estas críticas, Morsi ha concedido una entrevista en la televisión egipcia, en la que ha negado querer ejercer su cargo de manera dictatorial. "Yo he sufrido mucho una dictadura y estoy entre los ciudadanos que no pueden aceptar una", ha declarado.
Morsi ha insistido en que el decreto es temporal y tiene como objetivo "cumplir las aspiraciones de la revolución y es expresión del pueblo egipcio que quiere ver que los criminales son castigados".
Asimismo, ha señalado las propias protestas como muestra de "las excelentes condiciones de libertad de expresión y de opinión" que hay actualmente en el país.
El sábado, los Hermanos Musulmanes, grupo islamista en el que militó Morsi hasta que juró el cargo, han organizado una manifestación para expresar su apoyo al jefe de Estado.