El Gobierno de Mali y los tuareg inician un proceso de diálogo para resolver la crisis
- Los protagonistas del conflicto llegan a un acuerdo en la capital de Burkina Faso
- Las delegaciones aceptan respetar "la unidad" e "integridad territorial" del país
- El Estado africano vivió un golpe militar en marzo que tumbó al presidente, Turé
El Gobierno de Mali y los movimientos tuareg que ocupan el norte del país acordaron este martes poner en marcha un proceso de diálogo para buscar una salida a la crisis, según un comunicado dado a conocer hoy en Uagadugú.
Los protagonistas de la crisis maliense llegaron al acuerdo durante un encuentro en la capital de Burkina Faso con el presidente, Blaise Compaoré, que ejerce de mediador de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO). Según el comunicado leído por el ministro voltense de Asuntos Exteriores, Djibril Bassolet, los dos grupos armados malienses han mostrado su disponibilidad al diálogo y reiteraron a la delegación gubernamental maliense sus reivindicaciones que no han sido publicadas.
La delegación de Ansar Al Din ha sido encabezada por su vicepresidente, Al Gabass Ag Intallah, y la del MNLA por su vicepresidente Mahamadou Djeri Maiga. Las tres delegaciones han admitido la necesidad de crear un proceso de diálogo inter maliense "implicando a los representantes de las diferentes comunidades que viven en el norte de Mali", indicó el comunicado. El ministro de Asuntos Exteriores de Costa de Marfil, Ali Coulibaly, cuyo país ejerce la presidencia de la CEDEAO, asistió al encuentro, así como el representante especial del secretario general de las Naciones Unidas en África occidental, Saïd Djinnit.
En el marco de ese diálogo, las delegaciones aceptan respetar "los principios de respeto de la unidad nacional y de la integridad territorial del país", añadió el comunicado. Los diferentes grupos acordaron también para rechazar cualquier forma de extremismo y de terrorismo, el respeto de las comunidades malienses y el cese de las hostilidades. "Hemos renunciado a la independencia, a la autodeterminación", declaró a los periodistas Mahamadou Djeri Maiga, vicepresidente del MNLA.
Grupos yihadistas, fuertes en la región
Según el ministro maliense de Asuntos Exteriores, Tieman Coulibaly, se han dado pasos hacia adelante en las discusiones. "Ninguna negociación era posible entorno a la integridad territorial, el carácter laico y republicano del Estado. Pienso que los movimientos rebeldes han entendido que el Gobierno maliense nunca discutirá con cualquiera sobre límites insuperables. Creo que nos hemos entendido", dijo Coulibaly, tras una hora y media de discusiones. Una delegación de la Organización de la Cooperación Islámica (OCI) asistió al encuentro.
Mali se encuentra sumido en una profunda crisis desde el pasado 22 de marzo, cuando un golpe de Estado perpetrado por miembros del Ejército de Mali derrocó al presidente elegido democráticamente, Amado Tumani Turé. Con esa acción, los militares protestaban por la escasa atención que prestaba el Gobierno de Mali a la rebelión de los tuareg en el norte del país, pero el golpe de Estado no hizo más que empeorar la situación en esa zona.
Aprovechando el vacío de poder en Bamako tras el derrocamiento de Turé, los rebeldes tuareg del Movimiento Nacional de Liberación de Azawad (MNLA) proclamaron el pasado abril unilateralmente la independencia de la región septentrional de Mali, que abarca una superficie de 850.000 kilómetros cuadrados. Sin embargo, diversos grupos yihadistas como Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), Monoteísmo y Yihad en África Occidental (MYAO) o Ansar Al Din se han hecho fuertes en la región, cuyo control han arrebatado a los tuareg y en la que han establecido una versión rigorista de la ley islámica.
La Comunidad Económica de los Estados del África Occidental (CEDEAO) se ha comprometido a enviar 3.300 soldados al norte de Mali, aunque ha pedido el apoyo de otros países para ampliar el contingente hasta 5.500 militares. La CEDEAO desplegará esa fuerza una vez que la ONU la apruebe, según aseguró el jefe del Estado de Costa de Marfil y presidente de turno del bloque regional, Alassane Ouattara, en una entrevista publicada hoy por el periódico francés Les Échos.