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Botella pide disculpas por haber confiado en Diviertt para organizar la fiesta del Madrid Arena

  • Afirma que el contrato con la empresa "se ha rescindido sin más"
  • Reitera que el Ayuntamiento no cederá más espacios para macroeventos
  • La cámara del pasillo de la tragedia era una "carcasa" vacía

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Televisión Española ha tenido acceso al último tomo del sumario del caso Madrid Arena

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha pedido este miércoles "disculpas a los madrileños porque nunca Madrid Espacios y Congresos debía haber confiando en Diviertt" para organizar un "macroevento" de las características de la fiesta que la madrugada del pasado 1 de noviembre causóla muerte de cinco jóvenes.

En rueda de prensa tras la reunión semanal de su gobierno, la alcaldesa ha informado además de que el contrato de "fidelización" de Madrid Espacios y Congresos con Diviertt que permitió a esta empresa organizar numerosos eventos en el Madrid Arena desde 2008 "se ha rescindido sin más" y "no va a haber contratación nunca más" con la empresa de Miguel Ángel Flores.

Además, ha reiterado que nunca más el Ayuntamiento cederá un espacio municipal para celebrar un "macroevento" como el del Madrid Arena y que se va a replantear el objeto para el que fue creada la sociedad municipal Madrid Espacios y Congresos, que gestiona, entre otros, este pabellón.

Preguntada de nuevo si habrá más ceses en su Gobierno en caso de que hubiera alguna imputación judicial, y en concreto en relación con su delegado de medio Ambiente, Seguridad y Movilidad, Antonio de Guindos, Botella ha asegurado que tiene "plena confianza" en las actuaciones de su concejal, que "está haciendo un gran trabajo", y que, por tanto, no se puede poner en esa "hipótesis".

Ana Botella ha recordado que hace una semana ya dijo que nunca iba a rehuir las responsabilidades que correspondan al ayuntamiento por confiar en el dueño de Diviertt, Miguel Ángel Flores, "que utilizó de manera ilícita el Madrid Arena" porque "sobrepasó el aforo".

Celebración de macroeventos

Ha señalado que, "independientemente de que los procedimientos fueran legales" y de que este tipo de actividades fueran "algo habitual", considera que los espacios públicos "no deberían haberse utilizado para macroeventos" y en consecuencia "nunca se volverá a realizar un macroevento de estas características en ningún espacio municipal".

Botella ha anunciado que entre las conclusiones que el Grupo Municipal Popular presentará el próximo martes en la Comisión de Investigación de los sucesos del Madrid Arena -que serán vistas al día siguiente, cuando espera poder llegar a algún acuerdo con la oposición- figura este replanteamiento en la organización de eventos.

En el mismo sentido ha revelado que, "a la luz de la tragedia ocurrida en el Madrid Arena, en el que han perdido la vida cinco niñas", ha dado "instrucciones para replantear el objeto de Madrid Espacios y Congresos", que entre sus actividades no tendrá que "realizar este tipo de macroeventos".

La cámara era una "carcasa vacía"

La cámara del pasillo del pabellón Madrid Arena donde se produjo la avalancha que costó la vida a cinco jóvenes era una "carcasa" vacía y, por tanto, no podía grabar imagen alguna de lo ocurrido, según han confirmado fuentes de Madrid Espacios y Congresos (Madritec).

Estas fuentes han apuntado que así figura en los planos del edificio que se han puesto a disposición de la policía judicial en el marco de la investigación abierta.

Hoy, en rueda de prensa tras la reunión semanal del Gobierno de Ana Botella, el vicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva, preguntado al respecto, ha dicho que, según la información que traslada Madrid Espacios y Congresos,  "se han entregado a la policía las imágenes, los videograbadores y el software necesario para visualizarlas, así como el plano que existe de instalación de cámaras".

"Por la información que nos traslada Madrid Espacios y Congresos", ha repetido, y "de acuerdo con el contrato de seguridad", "la gestión del circuito cerrado de televisión le corresponde a Seguriber", ha añadido Villanueva.

Estas "carcasas" existen como cámaras disuasorias en numerosos inmuebles y locales puesto que su precio y coste de mantenimiento son bajos y cumplen igual que las reales, siempre que estén bien hechas, la misión de ahuyentar a posibles intrusos, según informan en Internet empresas especializadas en su venta e instalación.