Miles de personas se manifiestan en Barcelona en contra de la reforma educativa de Wert
- Más de 4.500 personas se han concentrado en la plaza Sant Jaume
- El lema de la marcha ha sido: "Para un país de todos, la escuela en catalán"
- El líder de ERC, Oriol Junqueras, cree que es una "agresión" a la sociedad
- La reforma de Wert prevé que el catalán deje de ser una asignatura troncal
Más de 4.500 personas, según la Guardia Urbana, se han concentrado la tarde de este lunes en la plaza Sant Jaume de Barcelona a favor de la escuela catalana y la inmersión lingüística que "tumba" el anteproyecto de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce), propuesto por el ministro de Educación, José Ignacio Wert.
Hacia las 18.30 horas, cuando estaba convocada la concentración, la plaza ha empezado a gritar "independencia" y, alzando 'estelades' y bajo el lema del manifiesto: "Para un país de todos, la escuela en catalán", los portavoces de la plataforma organizadora de la protesta, Somescola.cat, que aglutina a 34 entidades, ha llamado a la insumisión.
La reforma de Wert prevé que el catalán deje de ser una asignatura troncal y pase a ser de especialidad, además de establecer que la Generalitat pague la formación en centros privados en caso de no haber públicos que aseguren la enseñanza en castellano.
En la lectura del manifiesto, Somescola.cat ha lamentado que el borrador de la Lomce "separe por lengua de origen" y que los catalanes se hayan tenido que volver a concentrar dos años después de la sentencia del Tribunal Constitucional (TC).
Uno de los precursores de la inmersión Rodolfo del Hoyo ha relatado desde el escenario que se ha instalado ante la Generalitat que en 1970 formó parte de un grupo de maestros que iniciaron cursos en catalán en una escuela de Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) con el ayuntamiento franquista en contra, pero con el apoyo de familias y profesores.
Del Hoyo ha criticado que la reforma de Wert despliega todo el "veneno" contra la voluntad de emancipación del pueblo catalán, por lo que la respuesta debe ser no aplicar la Lomce, ha animado con gritos de 'insumisión' que le envolvían.
Tras su intervención, ha sido el turno del cantautor valenciano Feliu Ventura, quien ha tachado la reforma de "retrógrada, recentralizadora e inútil", mientras que la cantante catalana Marina Rossell ha manifestado el rechazo frontal de la sociedad catalana a la norma de Wert que ataca el modelo de escuela catalana, que consideran experiencia de éxito.
"Un acto de afrimación"
Antes de empezar los parlamentos, el secretario general de CDC, Oriol Pujol, ha declarado a los medios que la jornada reivindicativa es un "acto de afirmación" de los catalanes frente a un patrimonio -la lengua- que no es de ningún partido político sino del conjunto de la sociedad, y que ha sido una herramienta real de cohesión y prosperidad.
Así, ha incidido en el "rechazo a la rotunda voluntad de destruir un modelo de éxito" y, tras ser preguntado por ello, lo ha relacionado con el resultado de las elecciones del 25 de noviembre, puesto que cree que fueron los comicios de una nueva Cataluña mayoritariamente a favor de la soberanía y del derecho a decidir.
Entre los concentrados también había representantes de otros partidos políticos como ERC, ICV-EUiA, PSC y SI, además de sindicatos; al terminar, miembros de Somescola.cat han acudido a la Generalitat para entregar el manifiesto y reunirse con el presidente del Govern en funciones, Artur Mas, la consejera de Enseñanza, Irene Rigau, y el consejero de Cultura, Ferran Mascarell.
Concentración en varias ciudades
La concentración se ha vivido en numerosas ciudades, como Girona, donde un millar de personas han reivindicado una escuela en catalán, y en ella se han visto pancartas como: 'Si él es un toro -en referencia al ministro Wert- tendremos que torearlo'.
Unas mil personas, según la Policía Local, han participado en Lleida en la concentración ante la Subdelegación del Gobierno Civil que ha finalizado con Els Segadors y gritos de independencia.
Han asistido representantes de todos los partidos políticos a excepción del PP, entre ellos el alcalde, Angel Ros (PSC), y el presidente de la Diputación, el convergente Joan Reñé, para quien el decreto del ministro Wert "es ir en contra del sentido común".
En Tarragona, han participado unas 500 personas, según la organización, y la presidenta de mnium del Tarragons, Rosa Maria Codines, ha resaltado en declaraciones a Europa Press la necesidad de "la unidad de acción" para hacer frente a las intenciones de Wert.