El Parlamento europeo entrega el premio Sajárov 2012 a dos opositores iraníes encarcelados
- Se trata de Nasrin Sotoudeh y Jafar Panahi
- El Parlamento pide la liberación de ambos
El Parlamento Europeo (PE) ha entregado este miércoles el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia 2012 a los opositores iraníes Nasrin Sotoudeh y Jafar Panahi, aunque no han podido recogerlo ya que están encarcelados en Irán.
"Estos dos asientos vacíos simbolizan la represión del régimen iraní con sus ciudadanos", ha dicho la Premio Nobel de la Paz en 2003 Shirin Ebadi, al recibir el galardón en nombre de los dos activistas iraníes.
Junto a ella han recogido el galardón el cineasta franco-griego Costa Gavras, así como el activista y abogado por los Derechos Humanos Karim Lahidji; la hija de Panahi, Solmaz, y el crítico de cine y director de la Filmoteca francesa, Serge Toubiana.
Cartas de agradecimiento
La premio Nobel ha leido una carta de agradecimiento escrita por Sotoudeh, que ha terminado una huelga de hambre por la prohibición de movimiento aplicada recientemente a su hija de 12 años.
La ganadora ausente del Sájarov asegura en su misiva que dedica el premio "a todos los presos políticos de Irán y del mundo" y lamenta que "no son suficientes los mecanismos de la sociedad internacional para los activistas por los derechos humanos en Irán".
"La lucha por los derechos humanos no se acabará aunque nos lleven a la cárcel. La antorcha de libertad nunca se apagará", ha leido Ebadi del escrito de la activista.
El cineasta Costa Gavras ha pronunciado por su parte el texto de agradecimiento enviado por el cineasta Panahi, quien ha dedicado el galardón a "todos los luchadores anónimos por la libertad, a todos los que luchan por la paz en el mundo entero".
El Parlamento europeo pide su libertad
El presidente del PE, Martin Schulz, ha señalado que la Eurocámara ha concedido el premio a los dos opositores "porque no es indiferente a la realidad en Irán".
Schulz ha pedido al régimen iraní "que libere a Sotoudeh y Panahi sin condiciones y sin demora".
Tras los discursos, se han depositado los dos diplomas que acreditan el premio Sájarov sobre dos sillas vacías y, con el hemiciclo puesto en pie, ha sonado "la Oda a la alegría", el himno europeo, momento en que Ebadi no ha podido retener las lágrimas por la emoción.