Rubalcaba declina desvelar si se presentará a las primarias: "Dios dirá"
- Dice sentirse avalado por los barones en cuanto a su liderazgo
- No se pronuncia sobre las declaraciones de Tomás Gómez
- El líder del PSM ha instado a Rubalcaba a "ceder el testigo"
El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha dicho sentirse avalado por los "barones" de su partido en cuanto a su liderazgo y a su hoja de ruta para 2013, ha dejado claro que las primarias no son lo primero para los socialistas y, sobre si se presentará, ha respondido: "Dios dirá".
Rubalcaba ha presidido este sábado en la madrileña sede de Ferraz la reunión del Consejo Territorial del PSOE, en un encuentro que ha servido para perfilar la agenda del partido para 2013, que incluye una gran conferencia en octubre y cinco miniconferencias.
En rueda de prensa posterior, Rubalcaba ha insistido en que las primarias para elegir al cartel electoral a la Moncloa deberían celebrarse entre las europeas de 2014 y las municipales y autonómica de 2015, aunque la fecha concreta la fijará un Comité Federal cuando corresponda.
No será en la reunión del 12 de enero, ha matizado, porque "no sería bueno" que de ese encuentro saliese una fecha concreta teniendo en cuenta que faltan casi tres años para las elecciones generales.
La fecha, "cuando proceda"
El partido tiene que tener libertad para poner fecha "cuando proceda", ha subrayado, cuando más interese a las necesidades electorales del partido y de los ciudadanos.
Hoy por hoy, las primarias no son "lo primero para el PSOE", preocupado por los ciudadanos y sus "enormes" problemas, ha agregado. "No conozco un partido del mundo que haya fijado la fecha de sus primarias con dos años de antelación", ha zanjado.
Al ser preguntado sobre si tiene intención de repetir como cartel electoral del PSOE para las generales de 2015, ha contestado: "Dios dirá", para después aclarar que hasta el final de su vida política hará lo que crea que es útil para su partido.
En cualquier caso, Rubalcaba ha hecho hincapié en que la urgencia del PSOE es ofrecer a la ciudadanía cuanto antes un proyecto alternativo al Gobierno del PP, para lo cual se ha perfilado una agenda de trabajo que abarca todo 2013.
Según su criterio, el PSOE tiene que ofrecer un conjunto de reformas, que no sean "la contrarreforma" del PP, y que intente recuperar los consensos constitucionales que se están rompiendo: el social, el institucional y el político, que han derivado en otras tantas grandes crisis, junto con la económica.
Reforma Constitucional
Ha llegado el momento, ha proclamado, "de abordar seriamente" la reforma parcial de la Constitución, no como mera retórica, sino para poner freno a esas crisis y mejorar y hacer más fuerte la Carta Magna.
Para ilustrar sus palabras, ha señalado que la sanidad pública debe ser recogida como un derecho fundamental en la Constitución para que no sea atacada por ningún Gobierno, y también ha apostado por fortalecer el Estado autonómico y mejorarlo en un sentido federal y social y por modificar el funcionamiento de los partidos y el régimen electoral.
Una especie de "Santillana 2", como la conferencia celebrada por el PSOE en el año 2003 que redefinió el proyecto autonómico del partido, con la idea de ofrecer "una España unida, fuerte, que garantice la diversidad de los territorios y la igualdad de derechos de todos los españoles".
No pretende, sin embargo, "poner patas arriba la Constitución ni revisarla de arriba a abajo", sino adecuarla a los tiempos.
Todo ello se tratará en las cinco "miniconferencias" que celebrará el PSOE a lo largo del próximo año y que confluirá en una gran conferencia en octubre.
Después de invitar a participar en este proceso a todos los sectores progresistas de la sociedad, ha explicado que los socialistas necesitan poner en pie una alternativa de Gobierno para salir de la crisis con más cohesión social y sin romper la solidaridad.
Los cinco encuentros afrontarán temas como Europa, un nuevo modelo fiscal, el crecimiento y el empleo o el Estado social.
En el seno del Consejo Territorial se ha creado una comisión, liderada por el presidente andaluz, José Antonio Griñán, encargada de elaborar una propuesta de modelo territorial.
Rubalcaba no ha querido pronunciarse sobre la reflexión del líder del PSM, Tomás Gómez, quien ha considerado que el secretario general del PSOE y su Ejecutiva deberían hacer un acto de generosidad y ceder el testigo a nuevas personas con nuevas ideas, lo que ha sido interpretado como una petición de congreso federal extraordinario.