Basescu encarga a su rival político Victor Ponta la formación del nuevo gobierno de Rumanía

• El socialdemócrata fue el vencedor de las pasadas elecciones legislativas
• Basescu afirmó que podría nombrar un candidato al margen de los comicios

El reelegido primer ministro, Victor Ponta (izquierda), y el presidente rumano, Traian Basescu (derecha), condenados a entenderse.

El presidente de Rumanía, el conservador Traian Basescu, ha encargado la formación del nuevo gobierno del país balcánico al socialdemócrata Victor Ponta, actual primer ministro y vencedor de las legislativas del pasado día 9, aliviando así la grave crisis política que vive el país desde hace meses.

Según ha informado la presidencia en un comunicado, Basescu firmó el decreto que designa primer ministro al líder socialdemócrata, quien aspira a continuar gobernando con la coalición de centroizquierda Unión Social Liberal (USL), en el poder desde junio de este año.

Ponta pretende presentar el nuevo Gabinete antes del día de Navidad y necesita aún el apoyo del Parlamento para ser investido.

"Se nombra a Victor Ponta en calidad de candidato a la función de  primer ministro para pedir el voto de confianza al Parlamento sobre el  programa y la lista del nuevo Gobierno", señala la nota del Palacio  Cotroceni.

"Debido a que ha existido una sola propuesta por parte de los representantes de los partidos políticos y de las minorías nacionales del Parlamento de Rumanía, el presidente Traian Basescu ha nombrado a Victor Ponta como legítimo candidato a la función de primer ministro", prosigue.

Fin a las especulaciones

Durante la campaña electoral, Basescu recordó que le corresponde a  él  designar el nombre del jefe del Ejecutivo, independientemente del   resultado electoral. En ningún momento el jefe del Estado habló de Ponta como primer ministro  y generó especulaciones sobre la presentación de otro candidato  socialdemócrata.

Pero la contundente victoria de la USL en los comicios dejó sin opciones a Basescu para esquivar el nombramiento del actual premier, que deberá cerrar un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para tranquilizar a los inversores.

Aunque el anuncio alivia las preocupaciones sobre la estabilidad política de Rumanía, Ponta y Basescu no se sienten cómodos trabajando juntos y no está claro cuánto tiempo durará su cooperación.

La Unión Europea criticó a Ponta, un abogado de 40 años, por socavar el imperio de la ley en un fallido intento de destituir a Basescu en julio. La disputa retrasó la formulación de políticas en el segundo país más pobre de la UE y dejó su moneda a un nivel de récord mínimo.

Después de que el Tribunal Constitucional invalidara el referéndum, Basescu retornó a su cargo y afirmó que nunca nombraría de nuevo a Ponta como primer ministro. Pero ahora el presidente ha decidido dejar atrás esa rivalidad.  Nadie sabe por cuánto tiempo.