Las monarquías del Golfo instan a "actuar rápidamente" para poner fin a la guerra en Siria

• El Consejo de Cooperación del Golfo pide "acelerar" la transición 
• El enviado especial para Siria se reúne con la oposición 

Foto de familia de los representantes del Consejo de Cooperación del Golfo en Manama.

Los dirigentes de las monarquías petroleras del Golfo Pérsico han instado a la "comunidad internacional" a "actuar  rápidamente para poner fin a las masacres" en Siria y dar ayuda humanitaria a  los civiles".

Al término de la reunión anual del Consejo de Cooperación del Golfo  (CCG), los países miembros han pedido "acelerar" el proceso de transición. "El proceso de transición política debe ser acelerado", dice el comunicado del CCG, para evitar más derramamiento de sangre y la destrucción del país.

Las monarquías del CCG (Arabia Saudí, Baréin, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Omán y Catar) se dicen "profundamente entristecidos por el derramamiento de sangres de inocentes, de la destrucción de pueblos e infraestructuras", que atribuyen al régimen de Bachar al Asad.

Según el comunicado, el próximo 30 de enero tendrá lugar una conferencia de donantes en Kuwait para movilizar fondos para los civiles afectados por un conflicto que dura 21 muertos y ha causado decenas de miles de muertos.

El CCG espera que la visita del enviado internacional para Siria, Lajdar Brahimi, quien se entrevistó con Asad, contribuya a a forjar un entendimiento en el Consejo de Seguridad de la ONU, en alusión al bloqueo de Rusia y China a cualquier resolución que pueda abrir la puerta a una intervención extranjera.

Brahimi se entrevista con la oposición

Precisamente este martes, Brahimi se ha reunido con los líderes de la oposición interna, a los que ha prometido que continuará trabajando para lograr un consenso internacional para una transición en Siria.

El presidente del principal grupo opositor dentro del país, el Consejo de Coordinación Nacional, Hasan Abdelazim, ha asegurado a Efe por teléfono que se han quedado "más tranquilos" tras salir de la reunión con Brahimi.

"La crisis es muy complicada porque la solución no está solo en manos de los sirios, hay mucha partes involucradas y es un asunto internacional", ha apuntado Abdelazim.

El mediador ha comunicado a los opositores que tan pronto como regrese a Ginebra continuará con sus esfuerzos tanto con Rusia como con EE.UU. en este sentido.