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Shinzo Abe se convierte en primer ministro de Japón con la economía como prioridad

  • El Parlamento le nombra tras ganar las elecciones generales 
  • Abe promete una política monetaria expansiva y más gasto público 
  • Durante la campaña aseguró que sería más firme frente a China 

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Shinzo Abe, en el centro, es aplaudido por el Congreso tras ser elegido primer ministro de Japón
Shinzo Abe, en el centro, es aplaudido por el Congreso tras ser elegido primer ministro de Japón.

Las dos cámaras del Parlamento japonés han elegido este miércoles a Shinzo Abe como nuevo primer ministro del país. 

Abe, líder del Partido Liberal Demócrata (PLD), que venció en las elecciones de 16 de diciembre, es el séptimo en los últimos seis años, y sustituye a Yoshihiko Noda, del Partido Democrático (PD).

Abe nombrará este mismo miércoles a los miembros de su gabinete antes de oficializar su investudura en un acto solemne en el Palacio Imperial.

Sus retos: China e inflación

Abe, de 58 años, toma las riendas de un Japón lastrado por el estancamiento de su economía en proceso de recesión, la lenta recuperación del noreste del país tras el terremoto y el desastre nuclear en Fukushima de 2011 y una creciente tensión con China por disputas territoriales.

Durante la campaña, Abe ha prometido adoptar una postura más firme en los litigios territoriales que enfrentan a Japón con China y con Corea del Sur, y reforzar la alianza con los Estados Unidos. Sin embargo, es probable que el nuevo gobierno nipón ponga sordina a su política exterior para centrarse en la economía.

El nuevo primer ministro aboga por una política monetaria expansiva del Banco de Japón y un mayor gasto fiscal (a pesar de la deuda pública) para combatir la deflación, devaluar el yen y hacer las exportaciones más competitivas. La deuda de Japón es la más mayor del mundo industrializado (197% en 2010).

Abe ya fue primer ministro pero en 2007 dimitió tras un año en el poder por los escándalos de corrupción que plagaban su partido. En julio, el PLD afrontará otras elecciones, esta vez, al Senado.