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Evo Morales expropia cuatro filiales de Iberdrola en Bolivia

  • Las firmas expropiadas son dos de las principales distribuidoras de electricidad
  • Morales achaca la expropiación a que Iberdrola no quiso igualar sus tarifas
  • La policía boliviana custodia las filiales nacionalizadas de Iberdrola en La Paz
  • La oposición denuncia que Morales trata de tapar un escándalo de corrupción

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Evo Morales firma la expropiación de cuatro filiales de Iberdrola

El presidente boliviano, Evo Morales, ha decretado este sábado la expropiación de las acciones de la española Iberdrola en cuatro de sus filiales. Dos de ellas son las principales distribuidoras de electricidad en las regiones de La Paz (Electropaz) y Oruro (Elfeo), las otras dos son la empresa de servicios Edeser y la gestora de inversiones Compañía Administradora de Empresas.

"Nos hemos visto obligados a tomar esta medida para que las tarifas de servicio eléctrico sean equitativas en el departamento de La Paz y Oruro y la calidad de servicio eléctrico sea uniforme en el área rural y urbana", ha afirmado Morales.

Morales justifica la expropiación de las filiales en la brecha existente entre las tarifas rurales y urbanas

A modo de ejemplo, Morales ha asegurado que el promedio de la tarifa eléctrica urbana en La Paz resulta ser de 0,63 bolivianos (0,09 dólares) por kilovatios/hora cuando en el área rural es de 1,59 bolivianos (0,23 dólares).

"Esta medida garantizará el derecho igualitario de los ciudadanos que viven en el área rural, precautelando su economía con tarifas equitativas y un servicio de calidad uniforme. Lamentablemente nos han dejado unas diferencias enormes entre el área urbana y rural", ha dicho el mandatario.

Los empresarios de Bolivia aseguran que la empresa no ha demostrado ningún fallo en el servicio

La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) ha calificado de "injusta" esta decisión porque "la empresa no ha demostrado en ningún momento fallo en el servicio" y "cuando la era de las nacionalizaciones supuestamente ya estaba concluida".

"Cuando estamos tratando de atraer al capital nacional y extranjero, cuando este año económicamente estaba por cerrar bien, tenemos que soportar nuevamente una arremetida sin razón alguna a una empresa que estaba cumpliendo con su trabajo", ha asegurado Daniel Sánchez como presidente de la CEPB.

Por otro lado, opositores y analistas consultados por Efe aseguran que la expropiación es una cortina de humo para desviar la atención del escándalo de corrupción de una red de funcionarios que extorsionaba a reos. Así coinciden políticos de la Conservadora Convergencia Nacional y el Movimiento Sin Miedo (MSM), aliado de Morales hasta 2010.

"Es clarísima la estrategia. [...] A este país, el tapar las situaciones políticas le está llevando un costo muy grande", ha denunciado la senadora Centa Rek, que asegura que esta expropiación aumentará la deuda externa del Estado.

Bolivia promete una "justa remuneración"

Al igual que en anteriores expropiaciones, se ha dispuesto que la  compensación a Iberdrola provenga de una tasación realizada por una  "empresa independiente (...) en el plazo de 180 días hábiles". No obstante,  el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, ha prometido una "justa remuneración" y un "trato respetuoso" a Iberdrola,  empresa que ha exigido a Bolivia el pago del "valor  real" de las cuatro compañías nacionalizadas.

Iberdrola, a través de su filial Iberbolivia, posee el 89,5% de las acciones en la Empresa de Electricidad de La Paz (Electropazy el 92,8% en la Empresa de Luz y Fuerza de Oruro (Elfeo).

Según el decreto leído por Morales en una comparecencia no anunciada,  la estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) asumirá el control de las cuatro empresas nacionalizadas en representación del Estado boliviano.

"En resguardo del interés público, el gerente general de ENDE contará con el apoyo de la fuerza pública para garantizar la continuidad de la distribución eléctrica" en La Paz y Oruro, agrega el decreto.

Esta actuación ha tenido carácter inmediato y unos 700 policías y militares custodian la dependencias de la distribuidora Electropaz y Elfeo, según ha informado el ministro de Gobierno. En las fachadas de las principales sedes, se han desplegado pancartas con los colores de la bandera boliviana en la que podía leerse la palabra "nacionalizado".

Según el analista Julio Alvarado, este despliegue policial y militar deja a las "empresas como simples delincuentes, y eso da una muy mala imagen del país a nivel internacional".

Otras expropiaciones

El mandatario ya expropió el pasado mes de mayo las acciones de Red Eléctrica Española (REE) en la Transportadora de Electricidad (TDE) sin que hasta el momento se haya llegado a un acuerdo de compensación económica.

En 2010, su política expropiatoria afectó a cuatro empresas generadoras de electricidad, incluidas dos filiales de la francesa GDF Suez y la británica Rurelec, que inició un arbitraje a Bolivia en la Corte de La Haya por esa medida.

Además de las eléctricas, el mandatario ha nacionalizado una quincena de empresas de hidrocarburos, cementos y minas, entre otras, desde que llegó al poder en 2006.