Enlaces accesibilidad

El Gobierno de Egipto niega la "quiebra" del país pese a los problemas económicos

  • Uno de los principales problemas es el alto déficit presupuestario
  • "Las revueltas han influido negativamente", dice el primer ministro

Por

El primer ministro egipcio, Hisham Qandil, ha negado este domingo que el país esté "en quiebra" pese a los graves problemas que atraviesa su economía, en particular el alto déficit presupuestario.

En una rueda de prensa, Qandil ha subrayado la necesidad de tomar medidas para minimizar ese déficit, incluida la aprobación aún pendiente de un préstamo de 4.800 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI), la lucha contra la corrupción y la mejor aplicación de los subsidios.

"Los subsidios deben llegar a los necesitados, y los más afortunados no se niegan a que se adopten medidas para lograrlo", ha asegurado Qandil.

Además, ha reconocido que los últimos "problemas en el terreno político han influido de manera negativa en la economía", lo que ha motivado la suspensión de las conversaciones con el FMI y una caída del turismo.

Qandil no ha descartado que los precios aumenten pero ha asegurado que no afectarán a los pobres sino que lograrán que los "ricos ayuden a los necesitados".

Al mismo tiempo, ha intentado calmar al pueblo egipcio al insistir en que los precios de los productos básicos como el pan y la gasolina no aumentarán.

En la rueda de prensa, Qandil ha anunciado la llamada "Iniciativa nacional para el avance económico", cuyo objetivo es abrir un diálogo entre el Gobierno y los distintos sectores sobre los planes económicos necesarios para que el país salga de su crisis.

"El objetivo de la iniciativa es llegar a un plan nacional, porque estamos en una etapa excepcional y transitoria en la que debe haber un consenso", ha agregado.

La iniciativa entrará en vigor hoy

Según Qandil, la iniciativa, que entrará en vigor este domingo, comenzará con foros organizados por distintos centros de estudios especializados, en los que el Gobierno presentará sus planes y los expertos en economía los discutirán.

A continuación, se abrirá un diálogo entre los distintos sectores de la sociedad, que incluyen a representantes de los partidos políticos y de las ONG, sobre estos planes para que realicen recomendaciones para el Ejecutivo.

Esta iniciativa tratará distintos ámbitos como la justicia social, el turismo, las inversiones y la energía.

"Hay una luz fuerte al final del túnel. Hay un plan y una visión para salir de este túnel, cuya longitud depende de nuestro trabajo, producción y estabilidad política", insistió Qandil, que no quiso dar detalles sobre una esperada remodelación ministerial en su Gobierno.