Enlaces accesibilidad

La confianza de los consumidores cae 26 puntos en un año por el paro y es muy pesimista

  • El indicador de confianza está en 44,3 puntos sobre 200
  • La percepción sobre la situación actual es muy pesimista, 26,7 puntos

Por

El ICC

El ICC y los indicadores de situación actual y de expectativas pueden tomar valores que oscilan entre 0 y 200. Por encima de 100 indica una percepción positiva de los consumidores y por debajo de 100 una percepción negativa.

El ICC recoge mensualmente la valoración de la evolución reciente y las expectativas de los consumidores españoles relacionadas con la economía familiar y el empleo, con el objetivo de anticipar sus decisiones de consumo.

La confianza de los consumidores se situó en el último mes del año en 44,3, siete décimas por debajo que  en noviembre, y ha perdido más de 26 puntos desde hace un año, lo que indica una percepción muy pesimista. Este índice se mide de 0 a 200, el equivalente en una escala de 1 a 10 sería un 2,2 (muy deficiente).

Según ha difundido el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el indicador de confianza cayó ligeramente en diciembre, rompiendo la racha de recuperación que  mantenía desde los mínimos históricos de julio, debido sobre todo  al pesimismo de la población sobre el paro y el mercado de trabajo,  si bien aumentaron algo sus expectativas de futuro.

En todo caso, muy por debajo de los 100 puntos que marcan el límite entre una percepción favorable y optimista de la economía (200) o una negativa y pesimista (0). Este indicador junto el de la confianza empresarial sirve para predecir el comportamiento de la economía porque cuando los consumidores ven negro el futuro tienden a posponer las decisiones de compra.

Este descenso se obtiene con un comportamiento dispar de sus dos componentes, ya que por un lado desciende con claridad la valoración de la situación actual (-2,1), mientras que aumentan ligeramente las expectativas de futuro (0,6).

Muy pesimistas sobre la situación actual

El índice de valoración de la situación actual se sitúa en 26,7 puntos, es decir, muy pesimista, lo que confirma la quiebra que se produjo en noviembre respecto a la recuperación de este indicador, que también tuvo ligeros repuntes desde los mínimos del pasado julio.

Esta evolución negativa se concentra especialmente en la valoración del mercado de trabajo, que desciende 4,6 puntos en relación a noviembre, el paro ha cerrado 2012 con 426.000 desempleados más, y afecta también a la valoración de la situación económica general, que retrocede 3 puntos.

La caída de la confianza respecto a diciembre de 2011, según el CIS, es consecuencia de una valoración del momento 16 puntos menor y unas expectativas que retroceden hasta 36 puntos respecto a hace un año.

En relación a los datos de diciembre de 2011, la valoración actual de la situación económica del país es hoy 14,6 puntos inferior, las opciones que ofrece el mercado de trabajo se valoran 16,4 puntos por debajo del valor de hace un año y la situación en los hogares se ha deteriorado hasta 17,3 puntos desde entonces.

No obstante, la situación de los hogares mejora un punto y medio este mes, después del fuerte descenso observado en el pasado noviembre.

En términos trimestrales, la evolución de este cuarto trimestre del año representa una tímida recuperación desde el mínimo anual del anterior trimestre: así, la valoración de la situación económica avanza 4 puntos y la situación del empleo y de los hogares recuperan alrededor de un punto.

Las expectativas siguen siendo negativas

Por último, el índice de expectativas alcanza los 61,9 puntos, lo que supone un avance de 0,6 puntos respecto al mes de noviembre, incremento que se acumula a los más de 10 puntos de subida registrados desde los mínimos del pasado mes de julio, aunque sigue siendo negativo.

Los resultados de este mes en este índice de expectativas vuelven a ser heterogéneos, ya que aumentan un punto las que se refieren a la situación económica general, crecen 3,6 puntos las expectativas respecto a la situación de los hogares y se vuelven a reducir en 2,8 puntos las expectativas en relación al empleo.

En términos interanuales, los datos de expectativas de diciembre continúan mostrando grandes diferencias: más de 43 puntos por debajo respecto a la situación económica del país, 46 puntos inferiores en las expectativas del empleo y un descenso de 21 puntos en las expectativas de los hogares.

Las expectativas de los ciudadanos respecto a su capacidad de ahorro o de compra de bienes duraderos se han venido deteriorando desde mediados de 2011, hasta alcanzar un mínimo absoluto en julio de 2012. Desde ese punto iniciaron una lenta recuperación que se ha visto interrumpida en este final de año.