Cinco características a destacar del Nokia Lumia 920

• Se trata del más reciente y sofisticado móvil de Nokia con Windows Phone
• Es potente, fácil de manejar y tiene una de las mejores cámaras móviles
• El conjunto resulta en uno de los teléfonos más interesantes de este año

Imagen del Nokia Lumia 920.

El Nokia Lumia 920 es uno de los smartphones más sofisticados y completos que hay. Es potente y está muy bien construido, y tiene una de las mejores cámaras de móvil que he probado.

El sistema operativo Windows Phone 8 es rápido, fácil de utilizar y funciona muy bien,  aunque tiene algunos problemas de usabilidad. Pero éste es un mal menor en comparación con el verdadero problema de Windows Phone: que no lo utiliza nadie. Lo que significa que hasta ahora los desarrolladores le han prestado poca o ninguna atención. La justa, en el mejor de los casos.

Esto parece estar cambiando. La llegada de Windows 8 ha beneficiado a Windows Phone, que en los últimos meses ha visto crecer su catálogo de aplicaciones notablemente, hasta duplicarse. Pero la realidad es que, todavía hoy, la atención de los desarrolladores, y por extensión sus aplicaciones, están orientadas en primer lugar hacia iOS y Android.

Pero la falta de aplicaciones y de usuarios no cambia el hecho de que Windows Phone, sin ser perfecto como no lo es ninguno de sus competidores, es un buen sistema operativo.

Y tampoco cambia el hecho de que el Nokia Lumia 920 es una teléfono magnífico. Destacaría cinco razones por los que creo que es así.

1. Diseño y funcionamiento

Viendo las especificaciones podría parecer que el Nokia Lumia 920 es un mazacote: pesa 185 gr. Esto son unos 50 gramos más que el peso típico de un smartphone actual (135 gramos), y 70 gramos más de lo que pesa un iPhone 5 (112 gr).

Sin embargo el Lumia 920 es cómodo y fácil de coger. Tal vez resulta un poco ancho, pero no se siente tan pesado como podría anticiparse.

Está construido en plástico de buena calidad y de mejor tacto. Y es sólido como un ladrillo. El Lumia 920 sigue el diseño visto en modelos anteriores, como los Lumia 800 y 900, pero resuelve aspectos de éstos que no me gustaron, como la tapa de plástico del puerto USB (que desaparece) y de la ranura para la tarjeta micro SIM que ahora es prácticamente invisible.

En su funcionamiento no hay esperas innecesarias ni pausas ni reacciones extrañas, funciona deliciosamente bien y el teléfono mueve con sobrada soltura el sistema operativo y las aplicaciones.

2. Cámara

Nokia cometió un error al querer destacar la calidad de las imágenes que capturaban las cámaras de sus teléfonos móviles utilizando en las grabaciones de ejemplo cámaras "de verdad".

¿Lo peor de aquello? Que no tenía ninguna necesidad de hacerlo: la cámara del Nokia Lumia 920, con estabilizador óptico, apertura f/2, 8'7 megapíxles, óptica Carls Zeiss y tecnología PureView, fácilmente supera a la mayoría de las cámaras que puedes encontrar hoy en un móvil.

Incluso en condiciones de poca luz y en fotografías con flash los resultados son sorprendente buenos. Teniendo en cuenta que se trata de la cámara diminuta de un teléfono móvil.

La cámara principal es accesible mediante un botón dedicado, situado en el lateral del teléfono. Basta mantenerlo pulsado para que, aún con el teléfono bloqueado o en reposo, se inicie la aplicación Cámara y se dispare la foto.

La grabación de vídeo es HD a 720p y 1080p (Full HD) y la cámara frontal es de 1,2 megapixeles.

3. Aplicaciones de Nokia

Respecto a otros teléfonos Windows Phone los móviles de Nokia tienen a su favor un amplio catálogo de aplicaciones exclusivas. Y algunas de ellas son por sí solas motivo suficiente para elegir un Nokia.

Es el caso de las aplicaciones de Nokia Mapas, Conducir, Transportes y Vista Urbana. Este grupo de aplicaciones es todo lo que necesitas para saber dónde estás, a dónde tienes que ir y cómo llegar (andando, conduciendo guiado por GPS que no depende de la conexión móvil o en transporte público) y para encontrar casi cualquier cosa que puedas necesitar: restaurantes, hoteles, destinos turísticos, lugares de ocio, tiendas,… indicando hacia dónde están mediante realidad aumentada a través de la cámara del móvil.

Pero además Nokia dispone de otras aplicaciones para hacer fotos panorámicas, disparo inteligente —que usa varias fotos para generar una foto de grupo perfecta—, fotos animadas y retoque fotográfico; o para proyectar las imágenes del teléfono en cualquier pantalla con navegador web y que funciona de la forma más sencilla que he probado. También tiene aplicaciones para lectura de libros electrónicos y de música.

Nokia Música no sólo es un amplio catálogo de música disponible para comprar. Ofrece también música en streaming, que funciona incluso sin conexión a Internet tras una descarga previa de las canciones y canales música que se desean escuchar.

4. Pantalla

La pantalla del Nokia Lumia 920 es un excelente LCD de 4,5 pulgadas con resolución de 768 x 1280 pídeles (HD) y una densidad de píxeles de 332 ppi que proporcionan una gran nitidez.

Los colores, el contraste y el brillo son muy buenos, y es una delicia ver en ella vídeos y películas. El ajuste automático del brillo junto a su gran luminosidad hacen que la pantalla se vea razonablemente bien también a plena luz del sol.

Sin embargo el ángulo de visualización efectiva es algo reducido y los colores y el brillo se atenúan cuando el teléfono se gira demasiado respecto al plano de los ojos.

La pantalla táctil del Lumia 920 es muy precisa y sensible. De hecho es tan sensible que puede utilizarse incluso aunque se lleven puestos guantes. Este modo de "alta sensibilidad" probablemente incrementa ligeramente el consumo de batería, por lo que si no es necesario se puede desactivar desde la configuración del teléfono.

5. Carga inalámbrica

El Nokia Lumia 920 incorpora carga por inducción, o carga sin necesidad de cables: basta colocarlo sobre una base o superficie inductora para que se cargue la batería, de la misma forma en la que se recargan los cepillos de dientes eléctricos.

Podría parecer que no hay mucha diferencia entre dejar el teléfono sobre una superficie de carga y colocarlo en una base convencional o conectando un cable.

Y no la hay. Pero la carga por inducción es un plus de comodidad y de modalidad de carga —y en un móvil actual toda posibilidad de carga es poca— gracias una tecnología que existe y que sin embargo aún se utiliza poco, pero que cada vez va a ser más habitual encontrar instalada en vehículos, locales públicos o aviones.

Y su adopción masiva acabaría con la necesidad de disponer del cable o del "cable adecuado", ya que los principales fabricantes de electrónica trabajan con el estándar de carga inalámbrica Qi definido por el Wireless Power Consortium.

También su aplicación se puede emparejar a funciones como la de la transmisión de datos y música (emparejamiento por NFC y transmisión Bluetooth), de modo que baste colocar el teléfono sobre un equipo de sonido como el JBL Power Up para que se inicie la carga y la reproducción de música.

El desarrollo de la carga por inducción es el anticipo a la transmisión de electricidad sin cables ni contacto físico, la gran asignatura pendiente de la tecnología moderna. A pesar de que Nikola Tesla ya la concibió y comenzó a desarrollar en 1890. Es momento de empezar a ver avances mayores, pero para eso hay que conocerla y demandarla.