La limitación a los superdepósitos bancarios que planea el Banco de España afectará al crédito
- Las entidades se verán forzadas a ofrecer productos de mayor riesgo
- Sin embargo, repercutirá positivamente en su cuenta de resultados
- Los inversores se desplazarán a la deuda pública o corporativa
El freno que ha puesto el Banco de España a los depósitos de alta rentabilidad provocará una fuga del ahorro hacia productos de mayor riesgo, según los expertos, que temen además un efecto indeseado: el estrangulamiento del crédito.
La "sugerencia" con la que el Banco de España pretende frenar la "guerra del pasivo" consiste, de momento, en recomendar a las entidades que no ofrezcan más del 1,75 % en los depósitos de menos de un año. En el caso de los depósitos de uno a dos años, la rentabilidad podría alcanzar el 2,25 %, y en los de más de dos años, el 2,75 %, en tanto que las cuentas corrientes tendrán una remuneración máxima del 1,25 %.
Para los expertos, esta limitación desviará una parte del ahorro a productos con más riesgo como los fondos de inversión o la bolsa, que ofrecen mayores rendimientos.
Además, podría ser negativo para el maltrecho negocio del crédito, tan necesario para la recuperación económica.
Según los expertos consultados por Efe, si el Banco de España empieza a sancionar con nuevas exigencias de capital a las entidades que no limiten las remuneraciones de sus pasivos, éstas dispondrán de menos capital para prestar, con lo que se estrangulará aún más el crédito.
Los consumidores creen que beneficia a los bancos
Para las asociaciones de consumidores la visión es diferente. Los propios bancos son los grandes beneficiarios de esta recomendación, aún no recogida en una circular, puesto que lo que se ahorren en remuneraciones engordará directamente sus cuentas de resultados, bastante mermadas por la crisis, la morosidad y las nuevas normas sobre capital.
“Las remuneraciones elevadas son una práctica muy destructiva para las cuentas de resultados“
Para Nuria Álvarez, analista de Renta 4, no está tan claro que los inversores se vayan a sentir atraídos por otros productos de inversión, al menos aquellos que buscan seguridad antes que rentabilidad.
Sin embargo, los que tienen menos miedo al riesgo sí podrían decantarse por la renta variable, en busca de unos rendimientos que los depósitos ya no les pueden dar.
Los pagarés pueden ser una opción o cualquier tipo de deuda corporativa que ofrezca cupones más altos, pero a plazos más largos, dice esta experta, que insiste en recordar que "hay que tener en cuenta que todo lo que sea salir de depósitos -al margen de la deuda del Estado- conlleva el riesgo de pérdida de una parte del capital.
Una medida positiva para el sistema
Para Irma Garrido, directora de Análisis de Ahorro Corporación, reducir la remuneración de los pasivos es "claramente" una medida "positiva para el sistema financiero", pues puede fomentar la inversión en otros productos como la deuda estatal e incluso la renta variable.
Esta experta está de acuerdo con la medida, ya que las remuneraciones elevadas son una práctica muy destructiva para las cuentas de resultados de las entidades, especialmente las que han sido rescatadas con dinero público.
Por todo eso, habrá que esperar para ver si finalmente la recomendación se convierte en regulación y cuáles son los limites que se ponen.
Para el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez, si realmente es una recomendación no vinculante y las entidades hacen caso, esta bajada de los intereses será mala para las familias pero buena para el conjunto del sistema.
Si al final la recomendación se convierte en normativa y eleva las exigencias de capital, entonces habrá menos crédito, ya que "si un banco no tiene capital no da crédito", dijo.
La intención del Banco de España de parar la guerra del pasivo es buena pero aún hay que ver "cómo se va a articular", insistió.
Exigirán la eliminación de cláusulas hipotecarias
Mientras, las asociaciones de consumidores han anunciado que demandarán a las entidades que limiten las remuneraciones de los depósitos y no eliminen las cláusulas "suelo" que incluyen algunas hipotecas y que impiden a sus titulares beneficiarse de bajadas de tipos de interés superiores al mínimo que firmaron.
La Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) considera que la reducción de los intereses que se pagan por los depósitos protege al sector bancario, pero perjudica a los consumidores y penaliza la competencia y el ahorro.
Esta limitación, alerta Adicae, puede llevar a las entidades a comercializar productos con mayor remuneración pero con riesgos altos, como ha ocurrido en el pasado con "productos tóxicos".