Argelia ataca la planta de gas asaltada por islamistas y mueren varios rehenes
- Japón pide a Argelia que detenga la operación, cuyo balance aún es impreciso
- Según un secuestrador, han muerto 15 de sus compañeros y 34 rehenes
- Fuentes locales rebajan la cifra de víctimas a seis trabajadores y ocho rebeldes
- Al parecer han sido liberados cientos de empleados locales y algún extranjero
Las fuerzas de seguridad de Argelia han llevado a cabo una operación en la planta de gas tomada por islamistas el miércoles que se ha saldado con la muerte de varios rehenes extranjeros, hasta 34 según los milicianos. "Numerosos" trabajadores locales y extranjeros han podido salir con vida, según el Ejecutivo del país, muy criticado por algunos gobiernos con ciudadanos atrapados, a pesar de que todavía no hay ningún balance oficial.
Los hechos se han precipitado este jueves a mediodía. Diez horas después, el ministro de Comunicación argelino ha dicho que la operación no había finalizado, lo que da a entender que alguinos milicianos siguen atrincherados. Según el portavoz del Gobierno, Mohamed Said, "numerosos" rehenes han sido liberados, "desafortunadamente, algunas personas han muerto", y "un número importante de terroristas ha sido neutralizado", pero no ha dado ningún balance concreto ni ha discriminado entre nacionales y extranjeros.
La agencia oficial argelina APS ha dicho al poco de comenzar la operación que el Ejército había liberado a unos 600 trabajadores locales de la planta de In Amenas, al este del país (muy cerca de las frontera de Libia), que está explotada por British Petroleum (BP) en alianza con la petrolera noruega Statoil y la local Sonatrach.
Poco antes, la misma fuente informó de que habían sido liberados cuatro extranjeros, de los cuales dos británicos, un francés y un keniano. El Gobierno de Irlanda ha confirmado la liberación del rehén que tenía esa nacionalidad, originario del Ulster (Irlanda del Norte), administrado por Reino Unido. Las personas de esa región pueden tener doble nacionalidad.
La cadena estadounidense Fox News, que cita fuentes oficiales, también ha informado de que entre los liberados hay norteamericanos.
Por su parte, los islamistas han relatado a la agencia mauritana privada ANI que en el ataque aéreo de las fuerzas argelinas han fallecido 15 de sus compañeros --entre ellos el jefe del comando, al que ha identificado como Abulbaraa-- así como 34 secuestrados, que se sumarían a los dos fallecidos la víspera, un británico y un argelino.
Cifras sin confirmar
Ese día indicaron que había 41 extranjeros secuestrados, y tras informar de estas muertes han dicho que seguían vivos siete, lo que supone que todos los secuestrados a los que se refieren son extranjeros. Una fuente local citada por Reuters rebaja el balance a seis rehenes muertos y ocho rebeldes.
"Vamos a retener el resto de los rehenes, y los mataremos si el ejército argelino se acerca", ha añadido un portavoz de los milicianos a ANI, con la que mantienen hilo directo.
El primer ministro del Reino Unido, David Cameron, ha dicho que el país debe prepararse para recibir "malas noticias", sin más precisiones.
En cuanto a los trabajadores argelinos, se supone que gozaban de más libertad de movimientos y que no estaban amenazados por los asaltantes, que reivindicaron la acción en represalia por la intervención extranjera en Mali, donde una rebelión islamista tomó el control del norte del país el año pasado.
El ministro argelino de Interior, Daho Ould Kablia, señaló a Mojtar Belmojtar, un combatiente islamista que luchó en los 80 en Afganistán, como el jefe del grupo asaltante, al que se supone ligado a Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI).
Kabila también se negó desde el principio a negociar con los islamistas, que pedían la retirada del Ejército de los alrededores de la planta como condición previa y que plantearon diversas exigencias, desde el fin de la intervención en Mali como la liberación de presos islamistas en Argelia.
Malestar en las cancillerías
Los principales gobiernos afectados por el secuestro de sus nacionales, Estados Unidos, Japón o Francia habían dicho que respaldaría los esfuerzos del Ejecutivo del presidente Abdelaziz Buteflika para liberar a los rehenes, dando a entender que correspondía a la inciativa al país magrebí.
Pero cuando han llegado noticias de un trágico desenlace, aunque sin confirmar, han empezado los distanciamientos. El primero, Reino Unido, que ha hecho saber que Cameron no fue informado de la operación hasta que estaba en curso, cuando le telefoneó su homólogo Abdelmalek Sellal a las 12.00 hora peninsular española.
Mucho más contundente ha sido Japón, cuyo primer ministro ha expresado su más "firme protesta" por la operación argelina y ha pedido su final. Yoshihide Suga, portavoz del primer ministro Shizo Abe, ha dicho que este ha hablado con su homólogo y que le ha pedido que priorice sobre cualquier cosa la vida de las personas.
Por su parte, el primer ministro noruego, Jens Stoltenberg, ha mostrado su "profundo pesar" por la falta de datos ciertos, por lo que desconoce la suerte de os nueve noruegos que estaban allí. El país nórdico es de los pocos que ha informado de sus nacionales atrapados, y de ellos es el grupo más numeroso.
“El ataque de Al Qaeda a la planta justifica más la decisión de ir en ayuda de Mali“
El presidente de Francia, François Hollande, ha dicho que la operación se está desarrollando "en condiciones dramáticas", aunque ha asegurado que no dispone todavía de elementos suficientes para valorar la situación. También ha aprovechado para decir que el ataque de AQMI a la planta de gas "justifica más la decisión de ir en ayuda de Mali".
En Argelia operan varios grupos armados y aquí tiene su germen AQMI, que opera en una amplia región y tiene sus guaridas en el gran desierto del Sáhara, que abarca numerosos países en las regiones denominadas del Magreb y el Sahel.
El martes, las autoridades argelinas anunciaron el cierre de la frontera con Mali, en el otro extremo del país donde se ha producido este ataque.
En los últimos años ha sido frecuente el secuesto de ciudadanos europeos por grupos ligados a AQMI, entre ellos varios españoles.
Argelia es uno de los principales productores de hidrocarburos del mundo y el principal suministrador de gas natural a España, cuyas multinacionales también tienen grandes intereses en el país mediterráneo. El Ministerio de Exteriores español ha dicho que no tiene constancia de que haya nacionales afectados por el ataque.