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La ONU estima que la economía española caerá 1,4% este año y subirá 0,8% en 2014

  • El organismo rebaja su previsión de crecimiento mundial para 2012 y 2013
  • Advierte de que "la crisis del empleo puede producir una recesión mundial"
  • Avisa: sin cambio de políticas, recuperar el empleo costará otros cinco años
  • Asegura que la austeridad no funciona y aboga por estímulos al crecimiento

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La economía española se contraerá un 1,4% en 2013 y crecerá un 0,8% en 2014, según prevé el informe de Naciones Unidas publicado este jueves Situación y Perspectivas de la Situación Económica Mundial 2013,  donde la organización internacional rebaja en tres décimas su anterior previsión de crecimiento para este año  (la deja en un 2,4%) y en siete décimas la del año que viene (queda en un 3,2%). Así, la ONU concluye que la economía  mundial seguirá “deprimida en los próximos dos años".

El informe sitúa en un 1,6% la contracción del PIB español en 2012 y enmarca la situación de España en "una crisis de deuda que sigue deprimiendo la zona euro".

"La deuda de crisis soberana en la zona euro y los programas de austeridad fiscal en vigor siguen siendo las fuerzas dominantes que deprimen el crecimiento en la región", afirman los autores del informe, que proyecta un crecimiento medio de los países que comparten la moneda única del 0,3% en 2013 y del 1,4% en 2014.

Estos elementos, sumados a la ralentización de la demanda externa y los altos precios del petróleo, "auguran unas perspectivas desalentadoras de futuro" para la eurozona, dice la ONU.

Además, Naciones Unidas no da por terminada la crisis soberana y cree que podría haber todavía fuertes presiones que impacten de manera negativa en la solvencia bancaria y en la confianza económica, dando lugar a nuevos reveses económicos y a la aplicación de más austeridad.

En el lado positivo, apunta que la demanda externa, particularmente la procedente de Asia y quizá también de Estados Unidos, podría incrementarse antes de lo previsto y con mayor vigor del esperado, dando oxígeno a las exportaciones y las inversiones.

Sin cambio de políticas, costará cinco años recuperar el empleo

Esas tasas de crecimiento -unidas a las actuales políticas económicas- pueden costar a Europa y EE.UU.  "otros cinco años hasta recuperar los empleos perdidos a causa de la gran recesión entre los años 2008 y 2009". Por eso, la ONU advierte del "grave riesgo de caer en una renovada recesión" si no se  toman medidas para frenar el incremento del paro en el mundo.

El fallo, según Naciones Unidas, se encuentra en los países europeos, que "están atrapados en un círculo vicioso de altas tasas de desempleo, fragilidad del sector financiero, riesgos soberanos crecientes, austeridad fiscal y bajo crecimiento".

A esto se suma la ralentización económica en EE.UU. y las condiciones deflacionarias en Japón, que "están afectando a los países emergentes a través de una demanda más débil de sus exportaciones y de una mayor volatilidad en los flujos de capital y en los precios de las materias primas".

Asimismo, la ONU advierte sobre la economía en China, que "afronta un debilitamiento de la demanda de inversión,  a causa de las limitaciones financieras en algunos sectores de la economía y de un exceso de capacidad de producción en otros".

Rob Vos, director del informe, afirma que "un empeoramiento de la crisis en la zona euro,  el abismo fiscal en Estados Unidos y un aterrizaje brusco de la economía China podrían causar una nueva recesión global", y señala que "cada uno de estos riesgos podría causar perdidas productivas globales de entre el 1% y el 3%".

La austeridad no funciona

En este contexto, la ONU considera que las actuales políticas económicas europeas basadas en la austeridad fiscal y los recortes presupuestarios "no alcanzan a ofrecer lo que es necesario para incentivar la recuperación económica y frenar la crisis del empleo".

"Aunque los esfuerzos han sido significativos -especialmente en la zona euro, intentado revertir el estrés de la deuda soberana- la combinación de austeridad fiscal y de políticas monetarias expansivas ha tenido un éxito desigual a la hora de calmar los mercados financieros", indican los autores del informe.

"Menor éxito incluso, se ha logrado a la hora de fortalecer el crecimiento económico y la creación de empleo", agregan.

Por lo tanto, abogan por cambiar de estrategia, en favor de políticas de consolidación fiscal a medio plazo que sustituyan a las actuales a corto plazo, en "un esfuerzo que ha de coordinarse internacionalmente y alinearse con políticas de creación de empleo y crecimiento sostenible".