Más de 1.500 de personas exigen que no se cierre la planta de Roca en Alcalá, Sevilla
- Denuncian la estrategia de la empresa para "deslocalizar" la producción
- Confían en que la dirección de Roca "recapacite" y presente un plan industrial"
Más de 1.500 personas se han manifestado en Sevilla en contra del cierre de la planta de Roca en Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y para denunciar la estrategia de la empresa para "deslocalizar" la producción hacia otros países con mano de obra más barata.
En la manifestación han participado concejales de todos los partidos que integran la corporación municipal de Alcalá de Guadaíra, encabezados por el alcalde, el socialista Antonio Gutiérrez Limones, y representantes municipales también de todos los partidos del Ayuntamiento de Sevilla, así como dirigentes sindicales como el secretario general de CC.OO.-Andalucía, Francisco Carbonero.
En declaraciones a los periodistas, el presidente del comité de empresa de la planta alcalareña, Juan Miguel Cuevas, ha afirmado que "han ganado la primera batalla pero no la guerra" al conseguir que Roca haya retirado el ERE para ampliar un mes más el plazo de negociación.
Ha confiado en que la dirección de Roca "recapacite" y presente un plan industrial" porque ha advertido de que no están "dispuestos a que cierren ninguna planta y menos la de Alcalá de Guadaira", en la que trabajan 228 personas.
Los sindicatos demostrarán que la planta de Roca en la localidad sevillana es "viable", ha afirmado Cuevas, quien ha denunciado que se trata de una estrategia de la empresa para deslocalizar la producción a otros países como Portugal, Brasil o la India.
Ha censurado que la empresa se comprometió hace varios años cuando se cerró Cerámicas Bellavista, del grupo Roca, a traspasar la producción a Alcalá de Guadaira, pero eso ha sido "mentira porque no ha entrado ni una pieza y se lo han llevado a Portugal".
Además, ha recordado que en 2010 la empresa presentó un ERE para despedir a 600 trabajadores de toda España, de los que 111 eran de la planta sevillana, y ahora -ha incidido- "quieren terminar de deslocalizar la producción".
De hecho, en ese ERE Roca se comprometió a mantener abiertos los tres centros que tiene en España y eso "hay que hacerlo valer" en la negociación del nuevo ERE, ya que "no se puede consentir que compren fábricas en Marruecos, Brasil y la India y que deslocalicen la producción" fuera de España.
El próximo lunes los trabajadores de la fábrica de Alcalá decidirán en una asamblea las actuaciones en las próximas semanas. El pasado viernes, en la última jornada de negociación del ERE, la dirección de Roca trasladó a los representantes sindicales su intención de retirarlo y presentarlo de nuevo ante la administración para ampliar el periodo de negociaciones.
La previsión es que Roca plantee el nuevo ERE en los mismos términos que el presentado el 16 de diciembre, cuando la empresa comunicó sus planes de cierre de la sección de porcelanas de la planta madrileña, que emplea a 258 trabajadores, y la sevillana, que tiene una plantilla de 228 trabajadores.