David Rubín: "En 'El Héroe 2' hay alusiones a la falta de honradez de los poderosos"

• El dibujante ha tardado cuatro años en completar este cómic
• "Hércules ya es un héroe en toda regla y eso tiene sus consecuencias", asegura

Fragmento de una viñeta de 'El Héroe 2', de David Rubín

DAVID RUBÍN (Ourense,1977)

Estudia diseño gráfico y se lanza al mundo del cómic, la ilustración y la animación. Con su primera obra larga, 'El circo del desaliento' (Astiberri, 2006) es nominado como mejor autor revelación en el Salón del Cómic de Barcelona y gana el Primer Premio Castelao. Su segunda novela ráfica, 'La tetería del oso malayo' (Astiberri, 2006) es finalista del I Premio Nacional de Cómic, y recibe 4 nominaciones para el Salón del Cómic de Barcelona logrando el galardón al Autor revelación. Y 'Cuaderno de tormentas' (Planeta DeAgostini, 2008) también es nominado a mejor dibujo en Barcelona. Además ha codirigido Espíritu del bosque, un largometraje de animación en 3D, y ha adaptado al cómic Romeo y Julieta (SM, 2008), de Shakespeare y 'El monte de las ánimas' de Bécquer. Ha tardado casi 4 años en completar 'El Héroe'

Tras cuatro años de trabajo, David Rubín ha completado El héroe (Astiberri). Una obra monumental, de casi 600 páginas, que ha sido saludada por la crítica como una de las más importantes de la historia del cómic español y por el público como un cómic realmente espectacular, ya que combina una historia apasionante y que nos invita a la reflexión, con un dibujo y un color que alcanzan la categoría de Arte (con mayúsculas).

Una historia que tiene varios niveles de lectura, como nos comenta su autor: "Hay de todo un poco, por un lado está la historia del personaje, que es más luminosa en el primer tomo, ya que el personaje es más joven y está aún aprendiendo a ser un héroe y dicha historia en el segundo volumen se vuelve más oscura, ya que Heracles es adulto y por fin un héroe en toda regla, y eso trae sus consecuencias".

"A otro nivel -continúa Rubín - utilizo dicha historia para hablar de temas más personales como el paso del tiempo, el miedo al compromiso, el sacrificio que conlleva la madurez y la responsabilidad o la dualidad del ser humano, ya que Heracles, al igual que yo, al igual que cualquiera, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Y en un tercer nivel de lectura existen numerosas alusiones a la actualidad; a la crisis económica y de valores que sufre la sociedad de hoy en día, a la falta de honradez de los "poderosos", al sistema de clases y valores establecido....e incluso incluyo bastantes disertaciones que se podrían aplicar al propio medio del cómic y su actual situación".

"El Héroe lucha contra el destino"

"Lo que de verdad pretende Heracles es vivir su vida libremente -confiesa Rubín-, dejar atrás las cadenas de un destino impuesto, escribir él su propio destino. Creo que eso es el leiv motiv de toda la obra: La lucha contra el destino. Ese anhelo es el que creo que hace que Heracles sea creíble y humano, pese a sus fantásticas hazañas, lo hace cercano y consigue que el lector se identifique con él. El tomo uno se cierra con Heracles dándose cuenta por fin de que no es más que un juguete del destino, y el tomo dos profundiza en las consecuencias que le trae dicho conocimiento".

Además rubín, reivindica el cómic como medio de comunicación: "El cómic, del género que sea, ha de ser siempre un medio de comunicación, y su autor el emisor de ese mensaje. No concibo hacer cómics de otro modo que no signifique un diálogo autor-lector. Puedes hacer, como es el caso de "El Héroe", una obra de aventuras, divertida y dinámica pero al tiempo aportar más, ofrecerle más al lector, llenar de ideas esas secuencias de acción, hablar de cosas que nos interesan a todos/as y que, porque un tebeo sea de aventuras no tiene porque evitarlas necesariamente, sino que siempre serán un plus a la obra, la potenciarán aún más".

"Además -apostilla rubín- como autor necesito volcar lo que siento en mi trabajo, no me interesa realizar obras que solo sean un mero escapismo, me parece muy bien que otros las hagan pero yo, personalmente, necesito poner todo lo posible de mi parte en la obra, no solo en lo formal o argumental, sino a nivel emocional, y, creo, eso es algo que el lector termina viendo y agradece; nota ahí tu voz, a la persona que hay debajo de la obra y del propio autor".

"Critico la actual creación de ídolos con pies de barro"

"Tal y como está montado el tinglado a día de hoy, casi todo lo que sobresale, desde un actor de Hollywood a tal o cual grupo de música, políticos, o incluso tendencias y modas son, en su mayor parte, productos creados por terceros que deciden en determinados momentos a quién ensalzan o a quién no, muchas veces dejando el tema del talento a parte -comenta Rubín-.

"Fíjate en lo de Penélope Cruz -apunta el dibujante-, a ver...dudo que se haya abierto camino en Hollywood gracias únicamente a sus dotes interpretativas, ni siquiera por el hecho de que sea una chica muy mona, que las hay a patadas, sino más bien a que los hermanos Weinstein decidieron apostar por ella y promocionarla dentro del sistema. Y lo mismo pasa en otras áreas. En El Héroe critico justamente eso, esa creación vácua de ídolos y héroes con pies de barro que a día de hoy existe, yo defiendo que el éxito, la fama, ha de ser merecido, trabajado, ha de obedecer al talento y al esfuerzo de la persona, no a que tal o cual por el interés que sea decida que ahora este o la otra ha de ser famoso, ha de convertirse en el nuevo ídolo de moda aunque carezca por completo de lo necesario para ejercer ese "papel".

"El Héroe es un canto a la gente que se labra su propio camino y que intenta conseguir el éxito a base de esfuerzo, sacrificio y trabajo, no por intervención "divina", que es el único camino que al parecer nos intentar vender ahora si quieres prosperar. Hace un tiempo, en una cafetería, le escuche a una chavala decirle a otra; "Yo paso de todo, estoy buena, así que cuando quiera me voy al "Mujeres, hombres y viceversa" y a vivir del cuento!" ..... Pues justo contra eso tiro yo, contra esos "ídolos" flor de un día y de pacotilla".

"Un homenaje a los tebeos que me gustan"

En cuanto a las influencias en El Héroe: "Lo único que he hecho -puntualiza Rubín- es mezclar las tres tradiciones de cómic de las que he bebido siempre; el cómic de superhéroes americano, la bd europea y el manga, sin que una pese más que otra, asimilarlas de tal manera que no sepas dónde comienza una y termina la otra, de ese modo el resultado siempre será nuevo. Con esta obra pretendo rendir tributo a muchos tebeos que me han gustado e influenciado a lo largo de mi vida, pero sin emular sus fórmulas, sin repetir sus esquemas, creo que el mejor homenaje que le puedes hacer a algo que te gusta es intentar que ese algo vaya más allá, aportarle cosas nuevas, no solo repetir aciertos que otros ya han llevado a cabo. En ese sentido no, no tuve sobre la mesa ninguna obra de cabecera ni seguí ninguna obra concreta mientras elaboraba El Héroe".

"Además -continúa Rubín- cuando comencé a trabajar en el guión una de las primeras preguntas que me planteé fue esta: "Si a nadie le parece raro que Heracles luche contra un jabalí gigante, o contra una hidra de 10 cabezas... ¿por que iba a parecérselo el que lleve un iPod, o vista unas deportivas o haya televisiones y ordenadores en la obra? Esos anacronismos si se usan adecuadamente, si poseen una función en la obra en vez de meramente estar colocados ahí porque si, serán asimilados por el lector de modo natural, como lo que son, elementos para contar una historia y potenciarla, no añadidos metidos a calzador".

"Es algo similar a lo que ya hice años atrás en La tetería del oso malayo (Astiberri) en dónde en una misma historia convivían seres humanos, animales antropomórficos o superhéroes y a todo el mundo, al leerla, le pareció de los más normal del mundo que esos elementos, y la atmósfera que crean, estaban plenamente justificados con el tono del relato que estaba contando, y por ello se asimilan con naturalidad".

"Fue un reto rediseñar a Heracles"

Un de las cosas más sorprendentes de la obra es el valiente rediseño de los personajes de la mitología griega: "Creo que el que más cambié y más quebraderos de cabeza me dió a la hora de buscar su morfología y el modo de presentarlo en el relato ha sido Átlas -confiesa Rubín. Por el tono que le dí a la obra, no pegaba para nada meter ahí a un tipo gigante que está sujetando la bóveda celeste, meter algo así, tal cual, creo que no pegaba ni con cola y extrañaría al lector, por muy "fiel" que fuera a la mitología clásica, además de que me daba muy poco juego como creador. Por ello le dí bastantes vueltas y al final salió mi Átlas, un tipo que es más una especie de "megaservidor informático de almas" que un titán al uso, y creo que el cambio, aunque es bastante radical, le sienta bien a la historia, potencia el personaje y, además, creo que esa metáfora funciona mucho mejor para lo que pretendía contar yo en esa secuencia que ver a un tipo sujetando, literalmente, la bóveda celeste".

Es también uno de los que me siento más orgulloso -continúa Rubín-, ya que aunque su diseño es muy sencillo, creo que funciona muy bien en la obra, que sorprende al lector y, como ya dije, a nivel de concepto fué uno de los que más quebraderos de cabeza me dio hasta que por fin dí con la clave de su función y diseño".

"Otro que me gusta mucho es Hades, el señor del Inframundo, ya que lo he presentado físicamente de un modo que es prácticamente lo opuesto a como suele ser representado en otras obras y medios en dónde se ha usado. Y mi tercer favorito quizá sea el propio Heracles, ya que fue todo un reto diseñar a un personaje que va evolucionando y creciendo, tanto en edad como en modo de ser y actuar, a lo largo de la obra, y que todo ello posea coherencia, que sean creíbles y compatibles entre si esas diferentes edades, aspectos e incluso indumentarias de dicho personaje, que cuando el lector termine de leer el tomo dos y eche la vista atrás vea que el niño del principio y el hombre de 60 y pico años del final son el mismo personaje, no dos versiones de él, sino que se aprecie el crecimiento y la madurez paulatinamente".

El color es otro de los protagonistas de la obra

"Intento utilizar el color de un modo 100% narrativo y atmosférico, más  que meramente decorativo -comenta Rubín-. De hecho no dibujo o entinto del mismo modo si  la obra va a ser publicada a color o en ByN, ya tengo en cuanta el uso  del color desde la concepción del lápiz. El color ha de potenciar lo que se cuenta, formar un todo con el resto de los elementos que se usan para realizar un cómic".

"Por otro lado, he intentado usar el color en esta obra de un modo que  sea un tipo de color que sólo pueda funcionar bien al 100% en un medio  como el cómic, pensado para este medio. A día de hoy ves muchos tebeos  en dónde el color busca más que la página final recuerde a un fotograma  de una película,

a un anime o a una pintura que al propio cómic, llegando a tapar incluso  al dibujo y a la narrativa, en vez de potenciar esas facetas, y yo no  quiero eso, creo que el cómic es un medio de por si lo suficientemente  rico como para tener que emular en él cosas de otros medios para hacerlo  más atractivo, una cosa es beber de otros medios, y lo que saques de  ello mezclarlo y volcarlo en tu trabajo en cómic, lo que hará que este  se enriquezca, y, otra muy diferente, intentar emular el acabado o el  aspecto de otros medios que no son cómic".

Publicado en varios países

El Héroe se está publicando en países como Francia o Italia, con estupendas críticas: "Pues me alegra mucho que tanto en España como en otros países en dónde ha salido ya publicado se esté recibiendo tan bien tanto en las críticas como en las ventas -comenta Rubín-. Después del tremendo trabajo y sacrificio que me ha dado parir esta obra es toda una alegría ver que se recibe bien, que se aprecia y que se entiende lo que pretendes contar con ella".

"En cuanto a si he logrado lo que pretendía con ella... si, sinceramente creo que está todo ahí, por suerte no puedo decir eso de "si hubiera tenido un par de meses más hubiera cambiado o hubiera hecho esto así o asá...", no, he hecho el cómic que quería hacer y del modo en el que lo quería llevar a cabo dentro de la evolución actual de mi talento, y el resultado creo que es incluso mejor del que me había propuesto o soñado en un principio, ya que, como autor, he evolucionado y aprendido mucho a lo largo de los cuatro años que me llevó sacar adelante este proyecto".

"Creo que he dejado el listón alto respecto a mi mismo como artista -confiesa Rubín-, y ahora me toca trabajar aún más en la siguiente obra; superar ese listón, pero sin miedos ni presiones, haré lo que siempre he hecho, hacer la obra que me da la real gana y como me de la real gana, y trabajando así solo puedes hacerlo de un modo; emocionado y con ganas de ir a más siempre, de ponerte las cosas aún más difíciles, y en ese planteamiento el miedo "a lo siguiente" no tiene cabida".

Los próximos trabajos de Rubín

Tras este trabajo, digno de Hércules, Rubín planea relajarse, pero no demasiado: "Será una novela gráfica de menos páginas que El Héroe, no creo que pase de 200. Pero ahí termina la sencillez del asunto, como dije en la respuesta anterior, con cada nueva obra he de intentar ir a más, buscar cosas nuevas que hagan que tanto para mi como para los lectores hacer tebeos siga siendo atractivo, además, esta nueva obra, en la que ya estoy trabajando, la estoy realizando en colaboración con un guionista, ya que después de El Héroe me apetecía sentirme "acompañado" mientras trabajo".

"Y trabajar con guionista requiere un esfuerzo mayor, al menos para mi, que hacerlo en solitario como autor completo, ya que ha de ser una apuesta en común creativa, no un guión de zutanito dibujado por menganito, sino una obra única en dónde el talento y la visión de dos autores de funde para conseguir llevar a cabo algo nuevo en la carrera de ambos, algo que por separado no serían capaces de hacer o lo harían de otro modo, y eso implica mucho trabajo en común, tanto previo como a lo largo de todo el proceso de elaboración de la obra".

"Por lo demás, solo puedo adelantar por ahora que esta nueva obra la editará en España Astiberri, que podría -a simple vista- incluirse dentro del género de "Espada y Brujería" pese a que lo que estamos haciendo lo transgrede bastante, que será algo muy salvaje y duro, a la par que lírico y profundo, y que saldrá a la venta a finales de 2013".

Mientras esperamos, impacientes, ese trabajo, podemos disfrutar con su espectacular visión de este Heracles cuya máxima aspiración es ser... "un buen hombre"