Las tropas francesas y malienses entran en la ciudad de Diabali, según fuentes de seguridad
- Los islamistas huyen más hacia el norte
- Egipto se pronuncia contra la operación y Reino Unido, a favor
Una columna de vehículos de transporte de tropas y material franceses y malienses ha entrado en la ciudad de Diabali este lunes, después de que los islamistas que la controlaban hayan huido.
"Fuerzas francesas y de Mali han avanzado hasta Diabali y continuarán su misión para asegurar la ciudad", ha declarado a Reuters el vicecomandante de las fuerzas del ejército nacional en la vecina Niono, que se ha identificado solo como capitán Samasa. Otra fuente de seguridad ha confirmado la información, según Reuters.
Un jefe local, citado por la agencia Efe, asegura que los milicianos de Ansar al Din (grupo islamista tuareg) han abandonado la ciudad y en dirección a Tombuctú.
El Ejército nacional y el contingente francés que le apoya parecen tomar así la iniciativa terrestre frente a los grupos armados que controlan el norte del país desde junio de 2012.
Diabali, 350km al norte de la capital, Bamako, albergaba el grupo más numeroso de combatientes islamistas al sur de las ciudades de Mopti y Sevare, consideradas la línea del frente, hasta que los bombardeos franceses les obligaron a huir.
El enviado especial de TVE a Mali, Óscar Mijallo, informa de que los portavoces franceses y malienses aseguran ya que su objetivo es expulsar a todos los islamistas del norte del país y de las ciudades que controlan.
Los combatientes que huyen se estarían refugiando en las zonas fronterizas con Mauritania y Argelia, donde se concentran los bombardeos de la aviación gala.
Opiniones enfrentadas en el Cairo y Londres
En el plano diplomático, el presidente egipcio, Mohamed Mursi, ha mostrado su rechazo a esta operación. "Estamos en contra de la intervención militar en Mali porque va a ampliar el conflicto sangriento en el centro de África", ha dicho el líder islamista, citado por Efe.
Mursi ha advertido además de que se corre el peligro de que el centro de África quede aislado del norte por este conflicto.
Asimismo, el mandatario ha animado a los árabes a "ayudar a Argelia con su problema actual para evitar cualquier conflicto y amenaza contra su soberanía", en un discurso pronunciado durante la inauguración de la Cumbre árabe de Desarrollo Económico y Social en Riad .
Por su parte, el ministro británico de Asuntos Exteriores, William Hague, ha asegurado este lunes que la intervención militar en Libia ha "mitigado" la crisis en Mali pues se ha evitado que salieran más armas de ese país hacia otras naciones vecinas.
En unas declaraciones al programa Today, de Radio 4 de la BBC, Hague ha insistido en que, además de armas desde Libia, la extensión del extremismo hubiera sido mayor si varios países, entre ellos Reino Unido, no hubieran ayudado a la oposición al régimen de Muamar al Gadafi, derrocado en 2011.
"Si Usted recuerda, nos implicamos para salvar vidas en Libia. Creo sinceramente que si no lo hubiéramos hecho, estos problemas hubieran sido mucho mayores. Porque lo que hicimos acortó el conflicto libio", ha agregado el titular del Foreign Office.
En su opinión, si el conflicto libio se hubiera prolongado, "hubiera habido un mayor flujo de armas y los extremistas hubieran tenido una oportunidad mayor para tomar Libia".
"Si bien la situación libia bien pudo haber contribuido a lo que ha pasado en Mali, creo que la acción que tomó el mundo occidental en Libia, lo ha mitigado de algún modo", ha insistido.
Varios analistas consultados por RTVE.es en las últimas semanas han insistido en que la guerra en Libia contribuyó a que muchos combatientes y armas acabaran en el Sahel.