Fallece sor María, la religiosa imputada en dos casos de niños robados, a los 87 años
- El pasado 18 de enero no declaró alegando "motivos de salud"
- El juez la citó por un supuesto robo de hermanas gemelas en 1981
- En abril de 2012 acudió ante el juez por el robo de otra niña en 1982
- Su muerte supondría el archivo de las dos causas que tiene abiertas
Sor María, la monja imputada en dos casos de supuestos bebés robados, falleció el pasado martes en Madrid a los 87 años, según han confirmado a Efe y Europa Press fuentes del convento de las Hijas de la Caridad de San Vicente Paúl donde vivía.
La religiosa María Gómez Valbuena estaba "muy enferma", según las mismas fuentes. De hecho, el pasado viernes no acudió a declarar ante el Juzgado de Instrucción número 50 de Madrid por "motivos de salud".
Su muerte supondría el archivo provisional de las dos causas sobre denuncias de niños robados en las que ella figuraba como única imputada, según han confirmado a RTVE.es fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, aunque los causas podrían reactivarse si existen indicios criminales contra otras personas.
Sor María había sido citada a declarar como imputada el pasado 18 de enero por la presunta desaparición de dos mellizas que Purificación Betegón alumbró en la Clínica de Santa Cristian en 1981. La declaración tuvo que ser aplazada después de que el abogado de la monja presentase dos informes médicos alegando problemas coronarios.
Sor María sí que se presentó el pasado 12 de abril ante el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid imputada por delitos de detención ilegal y falsedad de documento público por otro caso de niños robados.
María Luisa Torres le acusó de haberle quitado a su hija en 1982 en la misma clínica madrileña. En aquella ocasión la religiosa se acogió a su derecho a no declarar, aunque en una carta abierta a los medios de comunicación rechazó las acusaciones y dijo que le "repugnaba" separar a un recién nacido de su madre.
María Luisa consiguió encontrar a su hija Pilar después de 29 años en 2011 después de confirmarse su relación biológica por unas pruebas de ADN.
Según declaró ante el juez como testigo el 3 de abril de 2012, Sor María le dijo primero que la niña había nacido muerta en el parto, pero después cambió y le dijo que le había quitado al bebé por "adúltera" y que la había dado en adopción a una familia francesa.
Torres presentó la denuncia ante la Fiscalía, que apreció indicios de delito en la actuación de la religiosa, y trasladó la denuncia a los Juzgados, donde fue admitida a trámite, en marzo de 2012, por el titular del Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid, Adolfo Carretero.
Los médicos decían que sor María era la única responsable
En los meses de septiembre y octubre de 2012, el juez Carretero citó a declarar a veinticuatro testigos, en su mayoría médicos, además de requerir pruebas documentales, como las partidas de nacimiento y la escritura de adopción de la supuesta "niña robada" y la historia clínica de la madre biológica.
Varios médicos confirmaron en sus declaraciones que la religiosa era la única responsable de las adopciones y que tenía un poder omnímodo para entrar y salir en la zona de los nidos y las incubadoras, informa Efe.
Se investiga su relación en otro caso de otra mujer que dio a luz a un varón en la Casa de la Maternidad en 1966 y que ha identificado a Sor María en su declaración ante el juez.