Más de 300 heridos y al menos siete muertos en el segundo aniversario de la revuelta egipcia
- Los manifestantes consideran que el presidente Morsi traiciona la revuelta
- Los enfrentamientos se producen en diversas ciudades
Las manifestaciones con motivo del segundo aniversario de las revueltas en Egipcio se han desarrollado con mucha tensión y enfrentamientos en varias ciudades que han dejado un balance provisional de más de 300 heridos y al menos siete muertos, estos en la ciudad de Suez. Las fuentes han explicado que al menos cinco de las víctimas han fallecido por disparos de armas de fuego.
Según la agencia France Presse, que cita fuentes del Ministerio de sanidad, el tiroteo ha tenido lugar entre manifestantes y policías pero aún no está claro si los fallecidos son agentes o civiles.
La plaza Tahrir ha sido desalojada en varias ocasiones debido a que a veces era imposible respirar en ella por los gases, pero tras disiparse su efecto los manifestantes han recuperado sus posiciones, según ha podido constatar EFE. Además, en la zona de Maspero, donde tiene su sede la radiotelevisión estatal, la policía y los jóvenes se han enfrentado en otra batalla campal.
Este aniversario se ha convertido en una expresión del descontento que tienen sobre todo los impulsores de las protestas que hace dos años llevaron a la dimisión del dictador Hosni Mubarak. Ahora consideran que el presidente elegido el año pasado ha traicionado esa revuelta dotándose de amplios poderes, lo que también denuncian organizaciones internacional de derechos humanos.
Como en aquellos días de invierno de 2011, el epicentro de las manifestaciones es la plaza Tahrir de la capital, donde al caer la noche este viernes seguían concentradas miles de personas. También había una manifestación ante el palacio presidencial de Itihadiya. Entre los heridos en esta ciudad hay un estudiante español que ha recibido una pedrada en un ojo, según han informado a EFE fuentes diplomáticas.
Los islamistas no se manifiestan
Durante estos dos años se han sucedido los enfrentamientos, entonces entre militantes opositores, laicos e islamistas, contra los partidarios y fuerzas del régimen; y desde las elecciones, entre los opositores laicos y los islamistas y las fuerzas del régimen.
En esta ocasión, los Hermanos Musulmanes, la poderosa cofradía que apoya al presidente, no había convocado manifestaciones en un día que además coincide con la celebración del nacimiento del profeta Mahoma. Pero la tensión ha sido máxima durante toda la jornada.
Los incidentes comenzaron desde la madrugada anterior. Después del mediodía salió una de las marchas opositoras hacia la plaza Tahrir con la participación de los dirigentes del opositor Frente de Salvación Nacional, Mohamed el Baradei y Hamdin Sabahi.
Aunque en la plaza no se informó de enfrentamientos, en los alrededores, y sobre todo en la calle Sheij Rihan, sí había choque entre jóvenes y las fuerzas de seguridad.
Y desde otras partes del país llegaban noticias de hechos más graves. En Ismailiya (este), un grupo de desconocidos atacó con piedras y cócteles molotov la sede del Partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes, lo que causó un incendio en el local, según Efe. Y a última hora se conocía el tiroteo de Suez.
Hasta media tarde, el Ministerio del Interior señaló que 24 policías resultaron heridos en Alejandría y El Cairo, seis de ellos junto al Palacio Presidencial en esta última ciudad por disparos de perdigones realizados por desconocidos.