La policía arresta a los dueños de la discoteca incendiada en Brasil y a dos de los músicos
- El uso de artefactos pirotécnicos fue la causa de la tragedia
- El último saldo es de 231 muertos y 79 personas en estado grave
La policía brasileña ha arrestado a los propietarios de la discoteca que se incendió el domingo en la ciudad de Santa María y en la que murieron 231 jóvenes, así como a dos de los músicos que actuaban en el momento de la tragedia, según fuentes oficiales citadas por medios locales.
Los arrestos, con carácter provisional, fueron solicitados por el comisario responsable de investigar el incendio más trágico de Brasil en los últimos cincuenta años.
El comisario Marcelo Arigony, titular de la Tercera Comisaría de Policía Civil de Santa María, ha informado en declaraciones a la agencia local Estado que también fue ordenado el arresto del otro dueño de la discoteca, pero que la detención no se practicó debido a que el empresario es uno de los 112 heridos aún hospitalizados.
"Desde la madrugada estábamos vigilando la residencia de los dueños de la discoteca", ha admitido al portal G1 el comisario Sandro Meinerz, titular de la primera Comisaría de Policía Civil de Santa María y responsable por la investigación.
Discoteca sin licencia
Uno de los detenidos ha sido el empresario Elissandro Spohr, conocido como Kiko y propietario de la discoteca Kiss, cuya licencia de funcionamiento estaba vencida desde agosto del año pasado.
El empresario ha sido arrestado en la vecina ciudad de Cruz Alta, a donde, según su abogado, había viajado para ser atendido en un hospital con síntomas de intoxicación respiratoria por temor a permanecer en Santa María, ciudad en el interior de Río Grande do Sul, estado del sur de Brasil fronterizo con Argentina y Uruguay.
Más tarde, se ha entregado a la Policía el otro dueño, el empresario brasileño Mauro Hoffmann.Hoffmann, quien se ha personado en la primera comisaría de Policía Civil de Santa María, en el estado de Río Grande do Sul, tal y como había anunciado su abogado y como ha podido constatar la agencia Efe.
También han sido arrestados dos integrantes del grupo musical Gurizada Fandangueira, la banda que tocaba en el momento en que comenzó el fuego y a la que se atribuye el origen del incendio. El acordeonista de la banda, Danilo Jaques, pereció en el incendio, según informaron sus compañeros.
Según los relatos de los supervivientes, el incendio se desató hacia las 2.30 hora local (05.30 hora peninsular española), en la discoteca Kiss cuando un integrante de la banda Gurizada Fandangueira encendió un artefacto pirotécnico conocido como "Lluvia de plata", cuyas chispas alcanzaron la espuma utilizada como aislante acústico en el techo del establecimiento.
Combinación mortal
Además del uso de un artefacto no permitido dentro de un establecimiento cerrado, para la tragedia contribuyeron el pánico y el caos provocado por la rápida expansión de la humareda y la supuesta decisión de los vigilantes de cerrar las puertas para evitar que el público saliese sin pagar, según los bomberos.
"Los vigilantes trancaron la salida de las personas que estaban en el local y no permitieron que salieran rápidamente y eso generó pánico, un tumulto", dijo el comandante del Cuerpo de Bomberos de Río Grande do Sul, coronel Guido de Melo.
Las llamas, la caída del fluido eléctrico y la humareda generaron pánico entre las personas que estaban en la discoteca y una estampida hacia las puertas, en donde muchos murieron pisoteados. La difícil evacuación y la avalancha de personas corriendo hacia la única salida causaron numerosas muertes por asfixia.
Homicidio imprudente
La banda de música Gurizada Fandangueira podría ser acusada de homicidio imprudente, según uno de los responsables de la investigación, el comisario Sandro Meinerz.
En una entrevista a la agencia de noticias Estado, Meinerz explicó que, aunque el crimen no es doloso, "es culpa de quien usó la pirotecnia".
"La banda sí (puede ser acusada), porque su actuación es la que produjo el incendio y es necesario comprobar si ellos podían hacer aquello o no", explicó Meinerz, quien no precisó si los integrantes de la banda ya fueron interrogados por la policía.
En un comunicado divulgado en la noche del domingo por sus abogados, los propietarios de la discoteca alegaron que el incendio fue una fatalidad, que su situación es "regular" ante las autoridades y que estaban gestionando la renovación de la licencia para funcionar ante los bomberos.
En medio de un ambiente de conmoción, los habitantes de Santa María han comenzado este lunes a enterrar a las víctimas del incendio. Todavía hay 80 personas hospitalizadas en cuidados intensivos.