La justicia holandesa condena a Shell por un vertido de petróleo en Nigeria
- Es la primera vez que se juzga en Holanda por un vertido ocurrido fuera
- La sentencia obliga a indemnizar a campesinos y pescadores afectados
Un juzgado holandés ha reconocido este miércoles la responsabilidad de la multinacional Shell por un vertido de petróleo registrado en Nigeria en 2005, pero la excluye de culpa en las cuatro denuncias restantes, han indicado a Efe fuentes judiciales.
La petrolera, que por primera vez fue llevada a los tribunales de Holanda por un caso de vertidos en el extranjero, tendrá que indemnizar al campesino afectado por el vertido, con una cantidad aún por determinar.
La denuncia se ha dirigido contra la matriz de Shell en Países Bajos y contra su filial en Nigeria, Shell Petroleum Development Co (SPDC). Shell es la compañía petrolera y gasística más poderosa en Nigeria, con una producción de más de un millón de barriles diarios.
Amnistía Internacional, que ha documentado la contaminación en el delta del río Níger, se ha felicitado por la sentencia pero ha recordado "los obstáculos que el denunciante ha tenido que superar para llegar a algo que se acerque a la justicia". AI lamenta también que el resto de demandas hayan sido rechazadas y pide a los gobiernos que eliminen las dificultades que impiden llevar ante los tribunales a las grandes empresas petroleras.
Demanda de los campesinos
La multinacional holandesa ha recibido la sentencia de una demanda civil conjunta presentada por un grupo de agricultores y pescadores nigerianos, respaldados por Milieudefensie (la rama holandesa de la ONG Friends of the Earth) y que la Justicia de Holanda aceptó a finales de 2009.
En su decisión, el juzgado argumenta la responsabilidad de Shell en el caso por considerar que la multinacional incurrió en "negligencia" al no tomar medidas para evitar el "fácil sabotaje" en uno de sus tanques petrolíferos en la localidad de Ikot Ada Udo.
Según la sentencia, Shell dejó "abandonado" ese tanque y los saboteadores pudieron simplemente "abrir con una llave inglesa" los cierres para acceder de forma ilegal al petróleo, lo que causó vertido en 2006 y 2007.
"Shell Nigeria habría podido prevenir fácilmente ese sabotaje cerrando con cemento los recipientes", dice la sentencia.
Los demandantes exigían a Shell la correcta limpieza de las zonas afectadas por el vertido de crudo, de manera que se asegure el mantenimiento apropiado de sus infraestructuras de cara a evitar nuevos casos y que compense a los agricultores y pescadores afectados por los daños.
La compañía petrolera ha sido acusada en numerosas ocasiones por contaminar el delta del río Níger, y en 2011 reconoció un vertido de unos 40.000 barriles de crudo.