Holanda nacionaliza el cuarto banco del país, al que inyecta 3.700 millones de fondos públicos

• Su quiebra habría puesto en peligro todo el sistema, según el Gobierno
• La filial inmobiliaria, origen de los problemas del grupo nacionalizado

Holanda ha anunciado este viernes la nacionalización del cuarto banco del país, el grupo SNS Reaal, tras inyectarle 3.700 millones de euros de fondos públicos, según ha explicado el ministro de Finanzas del país, Jeroen Dijsselbloem.

"Hoy, SNS Reaal ha pasado a ser propiedad del Estado holandés", ha declarado Dijsselbloem en una rueda de prensa convocada después de que la noche del jueves terminara el plazo marcado al banco por el banco central del país para que encontrara una salida a sus problemas financieros.

El ministro holandés -el nuevo presidente del Eurogrupo- ha destacado que "había que reaccionar inmediatamente: la situación era peligrosa para la estabilidad financiera", ya que esta entidad es considerada sistémica por el banco central de Holanda, es decir, que su quiebra puede poner en peligro al resto del sistema financiero del país.

La entidad ahora nacionalizada gestiona 130.000 millones de euros en activos, según los especialistas, que también apuntan a que, a finales del tercer trimestre de 2012, su división financiera concedió créditos inmobiliarios a pequeñas y medianas empresas por unos 9.800 millones de euros. De esa cantidad, en torno a 2.300 millones de euros serían préstamos con dificultades.

Pérdidas acumuladas en la filial inmobiliaria

En los últimos años, el grupo bancario y de seguros ahora nacionalizado ha acumulado pérdidas en su filial inmobiliaria Property Finance, comprada en 2006 a ABN Amro. Eso ha lastrado a todo el grupo, que desde 2009 se habría anotado unas pérdidas de 1.900 millones de dólares.

La nacionalización de la entidad "era inevitable", según Dijsselbloem, quien ha subrayado que los ahorros depositados en el SNS Reaal no corren peligro. Además, ha informado de la dimisión de la directiva del banco.

El presidente y consejero delegado de SNS Reaal, el responsable financiero y el presidente del consejo supervisor de la entidad "han dimitido de sus respectivas posiciones", ha explicado el banco en un comunicado. La razón, apunta la nota, es que "no quieren y no pueden asumir la responsabilidad por la nacionalización".

El comunicado añade que en los últimos años todos los directivos "han trabajado mucho para resolver la situación de la división financiera inmobiliaria del grupo", para lo que veían "una solución privada, porque creen que es la vía apropiada. Hicieron todo lo posible por lograrlo". "El Ministerio de Finanzas ha decidido otra cosa. No cuestionan la decisión elegida por respeto al Ministerio", subraya el comunicado, que también indica que la firma lamenta la salida de los directivos, que no recibirán indemnización.

De los 3.700 millones de euros de ayudas públicas destinadas al banco, 2.200 millones servirán como inyección de capital directa, 700 millones se dedicarán a "aislar" la cartera inmobiliaria y otros 800 millones servirán para liquidar un plan de ayuda anterior, concedido en 2008, para ayudarle a combatir los primeros efectos de la crisis financiera.

Dijsselbloem ha asegurado que comprende "la reticencia de la gente" a destinar una cantidad de dinero tan grande a salvar un banco, sobre todo, "cuando se atraviesa un período financiero tan difícil".

Holanda es uno de los cuatro países del euro que mantiene la triple A, la máxima nota otorgada por las agencias de calificación de riesgos, aunque -al igual que Alemania y Luxemburgo-, está bajo la amenaza de rebaja de esas agencias.

Otro gran banco holandés, ING, recibió más de 10.000 millones de euros de ayudas públicas en 2009, de las que aún le quedan por devolver al Estado 2.250 milllones.