José Manuel Ballester: "Me interesa mostrar al hombre a través de sus huellas"

• 'Bosques de luz' muestra últimos trabajos del Premio Nacional de Fotografía
• Desde este jueves hasta el 28 de abril en Madrid en Tabacalera
• RTVE.es ha visitado la exposición con el autor

José Manuel Ballester fotografiado junto a la última de sus fotos recogidas en la muestra. La tomó hace unos días en Barcelona.

Una fotografía de más de ocho metros de largo recibe al visitante nada más traspasar la puerta de entrada. El patio de Tabacalera acoge La Última Cena de José Manuel Ballester una imagen en la que el artista reproduce a tamaño natural la misma estancia que en su día pintara Leonardo da Vinci en su obra maestra, pero de la que Ballester ha extraído a Cristo y los apóstoles, dejando al espectador frente a frente ante la mesa vacía en el momento posterior a la celebración de la Cena.

Falta una hora para la inauguración de la muestra y a esta hora de la tarde un hermoso rayo de luz atraviesa la inquietante fotografía en la que con Fotoshop ("puede ser un tratado de pintura"), Ballester eliminó las figuras humanas. Y poco más. Reconstruyó el borriquete de la mesa en la parte baja del cuadro que en el convento dominico de Milán donde está el mural fue ocultado por una puerta.

Pero el proceso no es tan sencillo. Tuvo previamente que pagar los correspondientes derechos de reproducción en Italia. Algo que no le ha hecho falta cuando ha recurrido a pinturas del Prado, por gentileza del Museo Nacional. Un gesto que él agradece.

Paseamos con Ballester por algunas de las 50 fotografías expuestas y que dicen que fueron realizadas en los últimos ocho años del Premio Nacional de Fotografía 2010. El duda de los años exactos e incluso del año en que le dieron el Premio. "Todo va tan rápido", comenta.

Pero quizás por eso mismo, él se ha detenido no sólo en cuadros de grandes maestros sino también en paisajes industriales o edificios abandonados para de algún modo narrar sin filtros o iluminar -con pequeños cambios- lugares o temas normalmente ocultos.

De ahí lo inquietante de todas sus fotografías. Instantáneas que a veces parecen pinturas o creaciones digitales, por la composición pero también por los colores o los detalles.

"En el arte todos formamos parte de un flujo"

En “Espacios Ocultos”, serie en que hizo lo mismo que con el famoso "falso fresco" de Da Vinci con obras de pintores italianos del Renacimiento como Giotto, Fra Angelico o Botticelli, lo que el artista pretendió al eliminar a los hombres fue realmente "eliminar la acción" de esos cuadros.

En cuanto al hecho de fijarse en esos y no en otros pintores, la razón es su "interés" por la pintura de los clásicos que explica así: "Estoy en contra de pintar a Velázquez pero igualmente de desecharlo".

"No creo en el arte como fruto del individuo, sino que todos formamos parte de un flujo. Rubens vino a copiar a Tiziano. Copiar es un homenaje", añade.

De la serie 'Espacios ocultos', la exposición incluye "Anunciación" de Fra Angelico o "El 3 de Mayo" de Goya, reinterpretados por el fotógrafo madrileño. Todos ellos son muestras "neopictorialismo", movimiento en el que la fotografía digital se alía con la pintura

Seguimos recorriendo pasillos y recovecos de este bosque que forman los espacios (que conservan sus muchas pieles, retazos de pintura de un época, baldosas de otras, una laboratorio para medir la humedad) de esta Tabacalera en la que parece que el tiempo hubiera quedado congelado.

Por aquí pasaron los hombres

Ballester nos enseña algunos de esos paisajes contemporáneos retratados que también alberga la muestra. Las tripas escénicas de la Ópera Bastille de París, un paisaje nocturno de Brasilia o una estampa industrial de Barcelona, tomada hace tan sólo unos días.

La reconstrucción del museo Rijksmuseum de Amsterdam es retratado en una sucesión de imágenes que para Ballester son una "alegoría de la propia existencia", en la que todo está "en constante cambio". Y le queda espacio para dos fotografías de estancias de la propia Tabacalera.

Advertimos que en estas fotografías, como ocurría con 'Espacios ocultos' tampoco hay personas.

"Me interesa más mostrar la condición humana a partir de las huellas de las personas", explica, apuntando a una fotografía que muestra una sala cerrada al público de la propia Tabacalera, en la que parece que los trabajadores tuvieron que huir precipitadamente. En el suelo, cajas de cartón de "Fortuna". Las ventanas, todavía abiertas y el tiempo hacieno mella en las paredes.

La luz, el tiempo y el espacio son también protagonistas de casi todas los trabajos fotográficos de esta exposición que podrá verse hasta el 28 de abril y ha sido organizada por la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes, con María de Corral y Lorena Martínez de Corral, como comisarias.

Antes de marcharnos, una última pregunta. ¿Cuánto tarde José Manuel Ballester en realizar algunas de estas fotografías? "Muchos días en localizar, en encontrar el lugar, luego ya es cuestión de minutos porque no me gusta utilizar flash ni preparar demasiado lo que voy a captar", nos cuenta.