"'El libro rojo de Mongolia' es todo lo que una persona necesita para sobrevivir"

• Los autores de la revista 'Mongolia' publican un libro con material inédito
• "Rajoy es un boxeador noqueado que se resiste a caer a la lona", aseguran

Eduardo Bravo y Eduardo Galán, dos de los "responsables" de 'El libro rojo de Mongolia'

En menos de un año, la revista Mongolia se ha afianzado como la publicación de humor más polémica y comentada, gracias a su osadía y a la calidad de los humoristas que componen su redacción. Y arrastran masas, como demuestran sus 70.000 seguidores en Twitter. Ahora han creado un libro, con material inédito, en el que dan un repaso a la historia de la humanidad y a muchas otras cosas y personas: El libro rojo de Mongolia (Reservoir Books)

“Es todo lo que cualquier persona necesita para sobrevivir, en 320 páginas” -asegura Eduardo Galán-.

“Estábamos obsesionados -comenta Eduardo Bravo- porque el conocimiento estaba muy disperso y decidimos juntarlo en un solo volumen de 320 páginas donde se marquen los estándares definitivos de todo el saber de Occidente en un solo tomo perfecto para llevarse al baño. Desde la enciclopedia Diderot a la Británica, hasta llegar a la enciclopedia de nuestros días que es la revista Cuore. Y creo que lo hemos conseguido.”

“Es un libro rojo, que en realidad es de color naranja, y lo que tiene en común con ese otro libro rojo es que teníamos la intención de vender los mismos ejemplares que Miau Zedong o Miao Tse-Tung, que creo que son 900 millones, aunque si se lo leyesen solo un millón ya estaríamos contentos” -bromea Galán-.

"Una auténtica locura"

“El libro -comenta Bravo- se divide en diccionario, historia de la humanidad, de las religiones, entrevistas a personajes famosos (incluido Miao Tse-Tung, Einstein o Jim Morrison), juegos, pasatiempos, locuras y demás".

“El libro tiene todo lo que no tiene la revista y la revista todo lo  que no tiene el libro. Porque todo lo que tiene el libro es material  inédito. Queríamos que la gente no se  sintiera decepcionada al encontrarse algún refrito. Es todo nuevo –Comenta Galán-.

"Nos apetecía  hacer todo nuevo y con otros tonos porque la revista tiene mucha sátira  política, el libro tiene menos, que fuese más intemporal y que también  gustase a los lectores de la revista. Aún así hay un nexo y es que los  autores somos los mismos- afirma Bravo-.

“Mongolia somos seis personas de las cuales cuatro somos los autores de  la parte humorística y de este libro: Darío Adanti, Fernando Rapa,  Eduardo Bravo y yo, Eduardo Galán. Y luego hay otras dos personas, el  periodista Pere Rusiñol, que se encarga de coordinar la parte de las  noticias reales y un editor, Gonzalo Boye, que nos coordina, ordena y manda y también  es nuestro abogado, porque sin alguien que nos ponga un poco el freno y  nos avise de lo que es ilegal no se podría publicar ni la revista ni el  libro. Nos avisa de las multas, la cárcel y nos ayuda a mantenernos  fuera de las duchas de Alcalá Meco”.

Y debe funcionar porque todavía no han tenido ninguna demanda: “Todo  el mundo nos avisa, nos dice en este número os cierran, vais a acabar en  Alcalá Meco, y no, no ha llegado ninguna denuncia –comenta Galán-. Lo achacamos a  dos cosas: que no nos quieran dar demasiada publicidad, ya que una demanda de  este tipo nos catapultaría) y dos,  porque posiblemente todo lo que  contamos en la parte de las noticias sea verdad, especialmente en la  parte de reality news,  y nadie pueda denunciarnos porque tenemos las  cosas muy bien atadas y probadas”.

“La conclusión -Sigue Galán- es que hay cantidad de cosas  que se nos han quedado en el tintero pensando que nos pueden meter una  denuncia. Desgraciadamente ese miedo o autocensura hace que no solo  nosotros, sino también otros medios de comunicación, enmudezcan ante  cosas que eran perfectamente narrables sin ningún tipo de problemas.  Quizá nosotros estamos rompiendo el hielo en ese aspecto y esperamos que  se siga el ejemplo y se pierda el miedo y se cuenten las cosas con  la libertad que se espera de una democracia, sin ataduras ni  servidumbres”.

"El humor y la política son igual de absurdos"

¿Es casualidad que la presentación del libro coincida con el debate sobre el estado de la nación?  “A lo mejor lo han hecho para despistar –comenta Galán-, han dicho, vamos a presentar el libro rojo para que no presten tanta atención a lo que está pasando en el congreso...”

“O a lo mejor ha sido al revés -añade Bravo-. Apostaría por la teoría de la conspiración, que el Presidente del Gobierno haya hecho coincidir el debate con la presentación de nuestro libro para intentar ocultar todas las noticias sobre El libro rojo (bromea). Lo único que puedes hacer para contrarrestar esa conspiración es comprar más libros rojos par luchar contra el presidente que nos ha contraprogramado mal”.

En cuanto a qué es más absurdo, si el humor o la política, Bravo asegura que: “Van a la par. Estamos en un momento histórico en el que determinadas instituciones tanto políticas como religiosas se están viniendo abajo. Por ejemplo, la transición se está poniendo en duda. También figuras esenciales como el Rey o los partidos políticos. Y frases que hemos oído toda la vida como “La familia real es un modelo para todos” o “La justicia es igual para todos”, “Los partidos políticos son incorruptibles” todas esas frases se vienen abajo y en esa distancia entre la vida real y la humanidad hay una cantidad de humor brutal".

"Por ejemplo -continúa Bravo- en la Catedral de Santiago. Creo que en Glee hay menos homosexualidad. Siempre hemos creído que es un sitio sacro, y luego leemos la declaración que hemos publicado del electricista (que supuestamente robó el Códice Calixtino) y de eso a la idea que nos vendía la iglesia hay un abismo. Hay momentos muy graciosos en la declaración del electricista (Me agarró por detrás… me tocó el culo pero yo no soy homosexual…). Si es verdad, que habría que verlo, es trágico que algunas instituciones pongan una cara y hagan justo lo contrario por detrás y ahí está el humor”.

"Hemos pensado que todos éramos ricos"

“El hombre es deudor de la sociedad en la que vive –asegura Galán- y nosotros hemos vivido una época de bonanza extrema hasta el punto de que hemos perdido la cabeza,  nos hemos desclasado y hemos pensado que todos éramos ricos. Y el que hacía crítica social era un aguafiestas Y reventaba la ilusión de todo el mundo”.

“¿Cómo me vas a decir que Cobi es feo? -pone de ejemplo Bravo- “O cómo me vas a decir que no me puedo comprar yo una casa en Pedralbes de seis millones de euros –añade Galán-

“Eso es lo que ha pasado –continúa Galán- el humor de los 90 era maravilloso pero muy atado a esa sociedad. Ahora ese humor queda fuera de lugar. Hay que satirizar a la gente que nos ha dirigido a este páramo. Y el humor tiene que ser otro”.

"Somos una revista de izquierdas y atea"

“Nosotros analizamos la situación desde una ideología –comenta Bravo-, lo que pone en la portada de “sin mensaje alguno es una ironía brutal. Somos una revista de izquierdas y atea y tratamos de actuar como tal. No engañamos a nadie. Y también somos no nacionalistas, pero ni de España ni de otras nacionalidades. De ahí que en nuestra portada ponga  una grande y puta… y Ramoneta”

“Al usar esta ideología, que no está identificada con ningún  partido político –continúa Bravo- puedes y debes, por honestidad, criticar a todos los partidos que no actúan como deben, desde tu ideología, o desde su propia ideología”.

“Si –apostilla Galán-, porque hay partidos que se confiesan de una ideología y luego actúan al servicio de gente que tiene los intereses contrarios. Si eres de derechas actúa como tal y si eres de izquierdas lo mismo... y si no, tienes mecanismos para dimitir, convocar elecciones o millones de cosas”.

“En ese sentido –continúa Bravo- la derecha siempre ha sido más honesta que la izquierda”. “Por la Santa desvergüenza, que se llama –apostilla Galán”.

“Eso es de admirar hasta cierto punto –comenta Galán- porque no estoy de acuerdo contigo, en nada,  pero por lo menos no me has engañado en ningún momento, salvo para escabullirte o mentir”.

“Yo recuerdo una campaña de Whisky DYC que define muy bien a la derecha española – comenta Galán, que era "Gente sin complejos" y que define a la derecha española, de Whisky DYC y sin complejos”. “Y de Ducados” –añade Bravo entre risas-.

"Rajoy ha muerto"

“Rajoy está muerto” –asegura Bravo en relación a la esquela que es la portada de la revista Mongolia de este mes- Nos acordábamos de Anatomía de un instante, de Cercas, que hablaba de Suárez, en otras circunstancias, pero la imagen que usaba era la de un boxeador noqueado que no se va a la lona. Los que lo vivimos sería un poco Poli Díaz en aquel combate, contra Whitaker, en el que recibió tortas y tortas y el tío aguantaba y aguantaba. Nuestro presidente esta así y lo que le queda. Lo mejor que podía hacer es irse a la lona y dimitir".

"Y también -continúa Bravo- determinados ministros o ministras como Ana Mato. Y se le da la Presidencia a otra persona del PP o se adelantan las elecciones. Rajoy no está en posición de pedir austeridad al resto de los españoles con los escándalos que tiene encima. Es una persona que se ha llevado los problemas a Alemania por no afrontarlos en una rueda de prensa en España”.

“No solo eso –añade Galán- Una persona que reconoce abiertamente que ha incumplido sus promesas pero ha cumplido con su deber, tiene un problema de contradicción un poco grave. Si no has cumplido tus promesas ¡vete!. Y si tus obligaciones ahora son otras, sométete a la decisión popular a ver si te refrendan”.

“El verbo deber es transitivo –comenta Bravo- y yo le preguntaría a Rajoy:  ¿A quién debe? Porque obviamente ha prometido al pueblo español y a sus votantes cosas que no ha cumplido. Si se debe a otros que no son sus votantes debe dimitir. Y de ahí sale nuestra portada de Rajoy ha muerto”.

“Pero lo más curioso –añade Galán- es que, una semana después de estar la revista en el kiosko, la Moncloa lanzó un mail donde daba el pésame por la muerte de Rajoy. Una curiosa errata, con el fallecimiento del filósofo Eugenio Trías y tuvieron que salir a desmentirlo, asegurando que Rajoy no había muerto”.

"En el humor todo está permitido"

“En el  humor está todo permitido, como demuestra la serie Padre de familia –comenta Bravo- pero siempre tienes que hacerte las preguntas periodísticas: ¿Quién? ¿Dónde? ¿Cuándo?... Hay variables que preguntarnos antes de hacer algún chiste y la última es preguntarnos: ¿Esto es legal? (risas) Que es la que más nos hacemos nosotros y puede anular todas las anteriores”.

“Os avanzamos que en el próximo número –asegura Bravo-, que sale el uno de marzo, aparece una página con tachones y anotaciones de nuestro abogado y hemos buscado una forma (legal) para que podáis ver todo eso que está tachado. Para que podáis leer esa página. Va a ser divertido”.

“Es una página -continúa Galán- tachada en un 25 por ciento y nos ha parecido lo suficientemente significativo para mostrarlo y decir, fijaos en la cantidad de restricciones que tiene la ley española sobre este tema, y que no se puede publicar”.

“Nuestra intención es que las generaciones futuras puedan conocer un poco mejor su realidad gracias a El libro rojo de Mongolia” –asegura Galán-.

“Y que cuando Charlton Heston vaya a una cueva en El planeta de los simios, se encuentre el libro rojo de Mongolia y diga: “Malditos” –bromea Bravo-.