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Bruselas decide este viernes si da más tiempo a España para reducir el déficit

  • Supedita la flexibilización a haber realizado esfuerzos fiscales y reformas
  • Se concedería más tiempo a cambio de un plan de recortes a medio plazo
  • El Gobierno español espera una prórroga de al menos un año

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La Comisión Europea decidirá este viernes si da más tiempo a España para situar el déficit público de nuestro país por debajo del 3%, algo que ahora de marca debe suceder en 2014. La decisión será anunciada en rueda de prensa por el vicepresidente de la Comisión Europea, Olli Rehn, en la presentación en Bruselas de las previsiones económicas de invierno de la Unión Europea.

Rehn confirmó la pasada semana que “si el crecimiento se deteriora de forma inesperada, un país puede recibir más tiempo para corregir su déficit excesivo, siempre que haya cumplido el esfuerzo fiscal estructural acordado y haga las reformas estructurales necesarias para apuntalar su crecimiento y sostenibilidad a medio plazo". Unas condiciones que España, Francia y Holanda cumplen.

Bruselas ya ha asumido que España incumplirá el objetivo de déficit marcado para 2012, a pesar de que ha cumplido con las reformas de la UE. Por eso, el Gobierno espera una prórroga de al menos un año.  "No me arriesgaría a decir que no nos van a dar más tiempo", ha comentado el ministro de Economía, Luis de Guindos.

La condición: un plan de recortes a medio plazo

Al igual que ya ocurrió el año pasado, el Ejecutivo comunitario podría supeditar la concesión de esa nueva prórroga a reformas adicionales. El presidente del Banco Central Europeo (BCE),  Mario Draghi, ya pidió el 12 de febrero en Madrid un plan fiscal a medio plazo con información detallada sobre los recortes en materia de gasto y los posibles aumentos de impuestos.

Los compromisos españoles respecto al déficit eran terminar 2012 con un 6,3% del PIB, para reducirlo al 4,5% este año, y al 2,8% en 2014. Unos límites que ahora se muestran demasiado ambiciosos, si tenemos en cuenta que se prevé que la economía española retroceda un 1,4% este año en lugar del 0,3% estimado en el momento que se marcaron esos objetivos.