Irlanda rebaja los salarios de los funcionarios que cobran más de 65.000 euros anuales
- Los que ganen menos verán su sueldo congelado un trimestre o dos
- Irlanda pretende ahorrar así 1.000 millones de euros hasta 2016
El Gobierno irlandés ha anunciado un nuevo marco salarial para los funcionarios con el que prevé ahorrar unos 1.000 millones de euros a través de la imposición de reducciones y congelaciones de sueldos hasta 2016.
El plan trienal de Irlanda, que entrará en vigor el 1 de julio, también obligará a los trabajadores del sector público a aumentar su jornada laboral, al tiempo que reducirá las pagas adicionales por horas extraordinarias trabajadas.
Las nuevas medidas son fruto de las intensas negociaciones de las últimas semanas entre el Ejecutivo de coalición de conservadores y laboristas con los principales sindicatos irlandeses, bajo los auspicios de la Comisión de Relaciones Laborales (LRC).
Aunque no todos los grandes sindicatos nacionales apoyan el plan, el ministro irlandés de Gasto Público y Reforma, el laborista Brendan Howlin, ha asegurado que, cuando se rubrique el acuerdo, será "vinculante" para "todos" los funcionarios.
Rebaja y congelación salarial
Según Howlin, desde el próximo julio, el Gobierno congelará durante tres años todos los salarios que superen los 65.000 euros anuales, después de reducirlos de "manera escalonada".
Así, para los salarios que oscilen entre los 65.000 y 80.000 euros anuales, la rebaja será del 5,5%, mientras que para los que se sitúen entre los 80.000 y 150.000 euros anuales será del 8%. Entre los 150.000 y los 185.000 euros anuales el recorte será del 9% y para los funcionarios que superen esa última cifra la rebaja será del 10%.
A los trabajadores que no superen los 35.000 euros anuales se les congelará su salario una sola vez durante tres meses hasta 2016, mientras que a aquellos que ganen entre 35.000 y 65.000 euros se les congelará dos veces durante tres meses.
Aumento de jornada
El Gobierno irlandés también obligará a los funcionarios que trabajen menos de 35 horas semanales a cumplir un mínimo de 37 horas, al tiempo que los empleados que trabajen entre 35 y 38 horas deberán ahora cubrir 39 horas semanales.
Howlin ha afirmado que estas propuestas forman parte de un plan "justo y equilibrado" encaminado a "reparar nuestras finanzas públicas", una idea compartida por el Congreso Irlandés de Sindicatos (Ictu). El portavoz de servicios públicos de Ictu, Bernard Harbor, considera que el nuevo marco salarial "quita más a aquellos que más ganan", por lo que "no afecta de manera desproporcionada" a un "grupo determinado de trabajadores".
La reducción de los salarios del funcionariado irlandés era una de las demandas efectuadas por la troika de inspectores que supervisan la marcha del rescate solicitado por este país en 2010 a la Unión Europea y el FMI, cuantificado en 85.000 millones de euros.
Este lunes el vicepresidente de la Comisión Europea (CE) y responsable de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, ha asegurado que Irlanda está lista para abandonar su programa de ayuda y regresar "plenamente" a los mercados de deuda en 2013, aunque ha pedido firmeza para continuar con las medidas de ajuste.