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'Un asunto real', la inesperada lección magistral de historia danesa y cine de época

  • Nikolaj Arcel dirige un drama histórico sostenido por un gran trío protagonista
  • Ganó dos Osos de Plata en Berlín y fue candidata al Oscar en lengua no inglesa

Por
Tráiler de 'Un asunto real'

Título original: En kongelig affære

Año: 2012

Duración: 137 min.

País: Dinamarca / Suecia / República Checa / Francia

Director: Nikolaj Arcel

Guion: Nikolaj Arcel y Rasmus Heisterberg

Música: Cyrille Aufort, Gabriel Yared

Fotografía: Rasmus Videbaeck

Reparto: Alicia Vikander, Mads Mikkelsen, Mikkel Boe Folsgaard, Trine Dyrholm, David Dencik

“Me gusta hacer películas sobre personajes con los que me gustaría cenar”, dijo una vez el gran David Lean. Seguro que el director de Croydon estaría muy a gusto compartiendo mesa con el rey Cristián VII, la reina Carolina Matilde y el doctor Struensee. Un triángulo amoroso enmarcado en un tiempo de cambio con el que el director Nikolaj Arcel ofrece uno de los dramas de época más conmovedores de los últimos años.

Un asunto real acerca a Dinamarca al honroso puesto de país con la mayor renta per cápita cinematográfica del mundo. Con un estilo en las antípodas del Dogma, la película aborda un capítulo decisivo en la evolución del país y nos sitúa en el centro de una historia “más grande que la vida”.

Tres son una multitud con poder reformista

La cinta comienza con el matrimonio entre el rey Cristián VII (Mikkel Boe Folsgaard,  Oso de Plata en 2012) y una joven inglesa a la que no conoce. El choque será inmediato entre el desequilibrado y manipulable monarca y la culta reina Carolina Matilde (interpretada por la prometedora actriz sueca Alicia Vikander).

Tras una recaída del rey, el ilustrado doctor alemán Johann Struensee se convertirá en su médico personal y cómplice, entrando a formar parte de una corte reticente a las ideas que llegaban de Francia en la segunda mitad del siglo XVIII. El ascenso del recién llegado, su influencia sobre el infantiloide rey y su relación con la reina provocarán un movimiento de reacción contra los intentos de modernizar el reino.

Nominada al Oscar a mejor película en lengua no inglesa, Un asunto real tiene la virtud de tratar asuntos como la lucha contra el inmovilismo a través de las acciones de sus personajes y no mediante discursos grandilocuentes.

"Declaro la guerra a la mierda"

El guion, premiado en el festival de Berlín, hace que resulte difícil no compartir las motivaciones del trío protagonista tanto en lo pasional como en lo político.

Mads Mikkelsen, un actor en estado de gracia en un gran reparto

Ha derramado lágrimas de sangre en Casino Royale, fue Magnus en Torremolinos 73, tiene una Palma de Oro por la aún inédita en España La caza y será Hannibal Lecter en televisión. Mikkelsen se confirma con su Struensee como una de las presencias más poderosas del cine mundial. El actor de Después de la boda aporta a su personaje el equilibrio preciso entre el idealismo que le lleva a modernizar un país y el realismo para afrontar las intrigas de la nobleza y su relación con la reina.

"Nunca se quita la máscara ¿verdad?"

Completan el reparto dos habituales del cine escandinavo que se dejan ver en otras cinematografías. Trine Dyrholm (CelebraciónEn un mundo mejorAmor es todo lo que necesitas) y David Dencik (Millenium: Los hombre que no amaban a las mujeres,  El topo), que representan a los poderosos que harán lo necesario para volver al estado anterior a la llegada del "alemán".

Una película de época, un tema atemporal

El propio director reconoce que ha querido tratar de forma moderna la historia, muy conocida en Dinamarca pero que hasta ahora no había sido llevada al cine. Nikolaj Arcel asegura que su intención era llevar el drama histórico al siglo XXI. Y lo consigue, con un tratamiento que presta más atención a los pequeños gestos que a los grandes salones de baile. 

Un asunto real es la película que no parece ser a simple vista. Avanza fluidamente a lo largo de sus más de dos horas y nos permite asomarnos a un momento clave para un país y para las tres personas que lo cambiaron.