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Bachar al Asad acusa al Reino Unido de "incendiar" la crisis siria

  • El presidente de Siria reitera también su oferta de diálogo con los rebeldes
  • Ban Ki moon asegura que la ONU participaría en un diálogo entre las partes
  • El Ejército Libre Sirio (ELS) pide la intervención ante ofensiva de Hizbulá

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El presidente de SiriaBachar al Asad,  acusó al Reino Unido de "militarizar" e "incendiar" la crisis siria, al tiempo que reiteró su oferta de un diálogo con los rebeldes si dejan sus armas, pero "no con terroristas".

En una entrevista difundida este domingo por el dominical británico The Sunday Times, Asad dirigió duras acusaciones al Gobierno de Londres en su posición hacia Siria, que calificó de "inmadura, confusa y no realista", y avisó a Occidente de que no arme a los rebeldes.

Al Asad, que insistió en que no abandonará su país, aseveró que el Reino Unido ha desempeñado un papel "no constructivo" en Siria "desde hace décadas y algunos dicen que desde hace siglos" y está decidido a "militarizar" la crisis siria.

Al Asad insiste en que el Reino Unido ha desempeñado desde hace décadas un papel no constructivo

"No esperamos que un pirómano actúe de bombero", apuntó el presidente sirio, en su primera entrevista con un medio occidental en más de un año, según el "Times".

Más de 70.000 muertes en los dos años de conflicto

El conflicto sirio, que está a punto de cumplir de dos años, ha causado la muerte de más de 70.000 personas, el desplazamiento interno de casi dos millones y la huida a los países vecinos de casi un millón, según la ONU, y la crisis se ha recrudecido en los últimos meses.

Al Asad reiteró a The Sunday Times su oferta de negociaciones de paz con los insurgentes si dejan la lucha armada, pero no "con terroristas que están decididos a usar las armas para aterrorizar a la población, matar a civiles, atacar lugares públicos o privados y destruir el país".

Podemos dialogar con la oposición, pero no podemos dialogar con terroristas

"Tenemos una oposición que son instituciones políticas y tenemos terroristas armados. Podemos dialogar con la oposición, pero no podemos dialogar con terroristas. Luchamos contra el terrorismo", afirmó el líder sirio, cuya salida del poder ha pedido, entre otros, el Reino Unido.

El pasado jueves, durante una reunión de Amigos de Siria en Roma, Estados Unidos anunció la donación directa de 60 millones de dólares a la oposición siria, que especificó que no se tratará de armamento.

Al Asad aseguró que "la inteligencia, las comunicaciones y la asistencia financiera que se está suministrando es muy letal" e insistió en que el Reino Unido seguirá el mismo camino que EEUU y "enviará equipamiento militar a los terroristas".

Durante la entrevista, el presidente sirio rechazó, una vez más, que tenga previsto optar por el exilio y argumentó que en países vecinos como Libia o Egipto los enfrentamientos no han cedido pese a la salida del poder de sus líderes.

"Nadie que tenga sentimientos patrióticos pensará en vivir fuera de su país. Soy como cualquier sirio patriótico", manifestó Bachar al Asad.

Ban Ki moon, dispuesto a que ONU facilite diálogo entre gobierno y oposición

Coincidiendo con la publicación de esta entrevista, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki moon, se mostró este mismo día dispuesto a que la institución que dirige facilite el diálogo entre el gobierno y la oposición siria si las partes así lo acuerdan.

Tras una entrevista mantenida en la localidad suiza de Mt Pelerin con el enviado especial de la ONU y de la Liga Árabe para Siria, Ladjar Brahimi, el diplomático surcoreano reiteró su apoyo al diálogo entre las dos partes en conflicto y mostró su voluntad de ayudar.

"Naciones Unidas saluda la iniciativa del diálogo y estaría preparada para facilitar el diálogo entre una fuerte y representativa delegación de la oposición y una creíble y fuerte delegación del gobierno sirio", según el resumen de la reunión hecho por los servicios de información de la ONU.

El diálogo entre una fuerte representativa delegación de la oposición y una creíble y fuerte delegación del gobierno sirio

El viernes, el secretario general ya había instado al gobierno sirio y a los grupos de la oposición a no desaprovechar la oportunidad de reunirse para poder entablar un diálogo que conduzca a una solución política al conflicto.

Por su parte, el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, pidió el cese inmediato de la violencia y la injerencia exterior en Siria para abrir un diálogo entre el Gobierno y la oposición, en un encuentro con el ministro sirio de Exteriores, Walid al Mualem.

Los rebeldes piden el envío de fuerzas árabes para evitar ataques de Hizbulá

El rebelde Ejército Libre Sirio (ELS) pidió en esta jornada el despliegue de fuerzas árabes en la frontera entre Siria y el Líbano para evitar los ataques que supuestamente está dispuesto a lanzar el grupo chií libanés Hizbulá.

El ELS, en un comunicado, sostiene que Hizbulá ha preparado a miles de sus combatientes y armas pesadas en zonas fronterizas con Siria para llevar a cabo una "amplia" operación militar.

Según los rebeldes sirios, una futura ofensiva de Hizbulá será "como un anuncio de guerra abierta de unas milicias armadas contra el pueblo sirio en la que se utilizan los territorios de un país para agredir a otro y se violan los acuerdos y leyes internacionales".

Para garantizar la seguridad en la frontera, el ELS solicitó el envío de fuerzas árabes internacionales a la zona, así como una reunión urgente de la ONU y la Liga Árabe "para impedir que explote la situación".

Asimismo, solicitaron que el Líbano asuma su responsabilidad ante los ataques de Hizbulá, aliado del régimen del presidente sirio, Bachar al Asad.

El líder de Hizbulá, Hasan Nasrala, defendió el pasado miércoles el derecho de los habitantes de las zonas limítrofes con Siria a responder a los ataques de los rebeldes sirios, que recientemente han atacado posiciones en el este del Líbano.

Los insurgentes anunciaron el pasado 21 de febrero que habían perpetrado varios ataques contra las fuerzas de Hizbulá en territorio libanés y sirio después de que culminara el plazo dado al grupo chií para que cesara sus operaciones contra los sirios.

Los rebeldes denunciaron que decenas de personas, civiles entre ellas, han muerto recientemente por ataques de Hizbulá en zonas del territorio sirio fronterizas con el Líbano.