Matesanz reconoce que los trasplantes no son ajenos a los recortes sanitarios
- Rafael Matesanz aclara que el sistema de trasplantes "no está en peligro"
- La ONT informa a los hospitales privados para que contribuyan a las donaciones
- Ante un aumento de las privatizaciones en sanidad en algunas comunidades
El director de la ONT, Rafael Matesanz, ha afirmado este martes que la sostenibilidad del sistema español de donación y trasplante de órganos no está en peligro, si bien añadió, a renglón seguido, que el modelo tampoco es ajeno a los recortes que afectan a la sanidad pública, porque forma parte de ella.
En un encuentro informativo con Servimedia, Matesanz explicó que la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) "es una parte de la asistencia sanitaria" y que, como tal, acusa lo que pasa en ella, es decir, la disminución en el número de camas o el cierre de plazas en las unidades de cuidados intensivos, por ejemplo.
"Todo este tipo de cosas va a repercutir en la asistencia sanitaria y desde luego la donación y trasplantes es una parte de esa asistencia sanitaria", indicó Matesanz.
"Nosotros (la ONT) no estamos en una burbuja, afortunadamente, y somos lo que somos precisamente por eso y estamos muy implicados en el SNS y todo lo que afecta al sistema, naturalmente, nos afecta a nosotros", insistió el creador del sistema español de trasplantes, quien, no obstante, quiso dejar claro que este sistema "no está en peligro".
Vigilancia de la Organización Nacional de Trasplantes
Pero si no lo está es, en parte, debido al trabajo previo y a la vigilancia de la propia ONT, que tal y como explicó su máximo dirigente lleva ya tiempo previniendo a las comunidades autónomas de la posible disminución en el número de trasplantes que podría conllevar la privatización de hospitales si no se hacen las cosas bien.
Esta labor informativa, reconoció, tuvo sus frutos, porque hay comunidades, como la de Baleares o la Valenciana, "con un peso de la sanidad privada realmente importante", en las que sus hospitales privados sí están contribuyendo a la donación de órganos.
No obstante, añadió, hay otras autonomías que pueden seguir mejorando, puesto que su contribución mediante los hospitales públicos de gestión privada a la donación total del país podría ser más alta.
"Hay formas de que realmente un mayor peso de la sanidad privada no repercuta negativamente en la donación, pero hay que hacerlas y no es fácil", apuntó Rafael Matesanz, quien atribuyó a ese grado de dificultad el hecho de que haya CCAA "donde la aportación de la sanidad privada al conjunto de la donación no sea todo lo alta que debería".