González Pons niega haber pagado "ni un euro público" a Nóos con su firma en un convenio
- Valencia pagó a 382.203 euros a Nóos con Pons como conseller
- El conde de Fontao declara que pidió a Urdangarin que dejara Nóos
- Un exdirectivo asegura que Urdangarín estaba "al tanto" de las actividades
- Según un correo, un bufete asesoró a Nóos para una nueva sociedad
- Castro ha citado a 19 testigos en Madrid y 16 en Barcelona
El exconseller valenciano y vicesecretario general del PP, Esteban González Pons, ha negado en su declaración como testigo ante el juez que investiga el caso Nóos, que con su firma en un convenio entre el Instituto Nóos y la Generalitat Valenciana se pagara "ni un euro público" a la entidad de Iñaki Urdangarin, ya que de lo contrario se habría "pensado mucho más" rubricarlo.
Pons ha reconocido que su firma está en un convenio, pero "porque hubo un acuerdo previo del Gobierno de la Generalitat Valenciana", ha explicado el diputado respecto al convenio por 382.203 euros para organizar los Juegos Europeos 2006. Además ha asegurado que con su firma "no se comprometió ni un euro público ni se pagó un euro público al instituto Nóos".
A su salida de los juzgados de Plaza de Castilla tras testificar ante el juez del caso Nóos, González Pons ha aclarado a los periodistas que no se ha acogido a su derecho como diputado a que se le interrogara en su despacho y ha acudido "como ciudadano" a declarar porque en este momento los políticos no deben hacer uso de sus derechos sino estar "a pie de calle".
Tras la declaración de González Pons se ha producido la del asesor jurídico de la Casa del Rey, José Manuel Romero, conde de Fontao, quien ha explicado ante el juez que en 2006 se dirigió a Iñaki Urdangarin para que dejara sus actividades en el Instituto Nóos con la finalidad de evitar que obtuviera rédito económico "por ser quien es", según fuentes jurídicas a las que cita Efe.
El asesor jurídico de la Casa Real, según las mismas fuentes, ha reconocido al juez que pidió a Urdangarin que abandonara Nóos tras enterarse en una revista y a través de una persona de sus actividades en el instituto, las cuales a su juicio no encajaban con la ética de la Casa Real.
No obstante, Romero ha puntualizado al juez que no dudaba de la licitud de las actividades de Urdangarin, pero que las mismas podían ser contrarias a las pautas institucionales de la Casa del Rey, ya que sus miembros no se pueden aprovechar de su situación de privilegio institucional para labores que serían aceptables en cualquier otra persona.
Convenio con Nóos
González Pons ha considerado que el hecho de que firmara no quiere decir que el Instituto Nóos no recibiera ni un solo euro de dinero público, porque "si con mi firma hubiera habido la posibilidad de que se hubiera pagado un euro público, a lo mejor me lo habría pensado mucho más", ha añadido.
El vicesecretario general del PP ha destacado que, "por respeto al juez Castro y su investigación", ha guardado silencio desde que salieron las primeras informaciones que le relacionaban con Nóos, pero ha aclarado que sus palabras este martes ante el juez responden a que debía explicar lo que tenía "ganas de decir" desde hace más de un año.
"He guardado silencio durante un año y voy a volver a guardar silencio por respeto al tribunal que está investigando", ha puntualizado, tras lo que ha afirmado: "Ya está bien de informaciones que relacionan mi firma con el pago a Iñaki Urdangarin".
El fiscal anticorrupción Pedro Horrach solicitó al juez la citación de González Pons, exconseller de Presidencia valenciano, en relación con el convenio firmado con el Instituto Nóos para la celebración de los Juegos Europeos 2006.
El juez ha citado al conde de Fontao porque Urdangarin, su exsocio Diego Torres y Raimon Bergós declararon en su día que realizó labores de mediación y asesoramiento al duque de Palma en Nóos y en la Fundación Cultura, Deporte e Integración Social, heredera del Instituto Nóos.
En su declaración, el asesor jurídico de la Casa del Rey ha considerado a su salida de los juzgados que "en ningún caso" su testimonio puede dañar a La Zarzuela ni afectará a su continuidad como asesor y que se encuentra "muy satisfecho" de su declaración judicial.
Romero ha explicado que con ello pretendía evitar que Urdangarin "enseñara la tarjeta" como garantía de su fiabilidad en vistas a obtener contratos públicos y privados. En concreto, dudó de la fórmula jurídica de Nóos (asociación sin ánimo de lucro) y de su labor de consultoría, ya que consideraba que podía acarrear actividades mercantiles en las que no debía participar.
Ronda de declaraciones
Castro ha citado a declarar esta semana en Madrid a 19 testigos y a otros 16 en Barcelona en esta causa en la que se investiga el presunto desvío de fondos públicos al Instituto Nóos que presidió Iñaki Urdangarin y a la Fundación Cultura, Deporte e Integración Social (Fcdis), heredera de dicha entidad.
La nueva ronda de declaraciones ha comenzado este martes a las 10.00 horas en los juzgados de Madrid con el empresario José María Treviño, de quien se investiga si efectuó labores como testaferro para derivar fondos a paraísos fiscales para el duque de Palma. Treviño se ha limitado a indicar a los periodistas que había contestado a las preguntas y que él no tenía "nada que ver" y ha destacado que venía como testigo y "salgo igual".
Mientras, Robert Cockx, presunto testaferro de Iñaki Urdangarin, que había sido citado por el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, no comparecerá finalmente entre la veintena de testigos que el juez Castro ha llamado a declarar este lunes en Madrid.
Un exdirectivo asegura que Urdangarin siguió "al tanto"
Uno de los principales testimonios recabados esta mañana por el juez del caso es el del exdirectivo del Instituto Nóos Antonio Ballabriga, quien este martes ha sostenido que Iñaki Urdangarin siguió "al tanto" de las actividades en esa entidad, entre ellas la celebración de unos juegos europeos en Valencia, que nunca se celebraron, después de que supuestamente las abandonara en 2006, según fuentes jurídicas.
Durante la mañana han comparecido cuatro testigos: Antonio Ballabriga, el empresario José María Treviño y su supuesto asesor fiscal Javier Jiménez Andrade, y el también empresario y expresidente de la liga Asobal Domingo Díaz de Mera.
En su declaración, que se ha prolongado una hora y media, Ballabriga ha explicado que, después de que Urdangarin supuestamente dejara el Instituto Nóos, se reunió unas tres o cuatro veces con él, ya que "seguía al tanto" de las actividades que se desarrollaban.
La abogada de Manos Limpias Virginia López Negrete ha señalado por su parte que Ballabriga es el actual director del departamento de responsabilidad social corporativa del BBVA y que en su declaración ha admitido que él era el director de los juegos europeos y que por ello tenía contacto con el duque de Palma.
Manos Limpias pretende que Ballabriga vuelva a estar imputado en la causa, al considerar que está "acreditada" su implicación según se desprende de correos aportados por el exsocio de Urdangarin Diego Torres.
Nóos solicitó asesoramiento para crear una sociedad sucesora
El Instituto Nóos solicitó el asesoramiento, a mediados de 2006, del bufete catalán Cuatrecasas para la puesta en marcha de una nueva sociedad que correspondería con la Fundación Deporte y Cultura (FDCIS), sucesora de dicho instituto, según un correo remitido por uno de los socios del despacho, al que ha tenido acceso Europa Press. En la instrucción del caso Nóos dicha fundación aparece vinculada a una supuesta estructura para el desvío de fondos públicos.
El asesoramiento se refiere, según esa misma fuente, a recomendaciones para los estatutos fundacionales y a la normativa vigente que se corresponderían con la puesta en marcha de la Fundación Cultura, Deporte e Integración Social, tal y como consta en el mencionado correo. Entre otros asuntos abordaba cuestiones normativas relacionadas con la capacidad para fundar, requisitos y formalidades para ello, la documentación necesaria, todo ello en línea con el papel representado hasta entonces por Nóos.
En concreto, la FDCIS fue impulsada en diciembre de 2006 tras ser neutralizada la sociedad Areté en cumplimiento de las recomendaciones cursadas días antes por el asesor externo de la Casa Real, José Manuel Romero, al percatarse de que Areté era una "reproducción" del esquema de Noos.
Según el propio Romero, Conde de Fontao -citado a declarar este martes como testigo en el marco del caso Nóos-, sostiene que su intervención en este sentido se limitó básicamente a aconsejar al Duque que hiciera una separación "entre las actividades mercantiles y las relativas al fomento social del deporte", disolviera la Fundación Areté que creó con su exsocio Diego Torres y se limitara a figurar como miembro del consejo asesor en la FDCIS.