Montoro anuncia que el impuesto a la banca por sus depósitos estará entre el 0,1% y el 0,2%

• El tributo no lo pagarán los ahorradores, sino las entidades financieras
• El impuesto estatal, en vigor desde el 1 de enero, tributa ahora al 0%
• Con la recaudación se compensará a Cataluña, Extremadura y Andalucía

El tipo impositivo que el Gobierno establecerá para gravar a las entidades bancarias por su volumen de depósitos se moverá entre el 0,1% y el 0,2%, según ha explicado este miércoles el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en el Congreso, donde ha defendido la decisión del Ejecutivo de imponer un tipo "muy moderado" para este tributo que no pagarán los ahorradores, sino los bancos.

Montoro ha recordado que este tributo está en vigor en España desde el 1 de enero de 2013 y que en estos momentos tributa al 0% con el fin de compensar a las CC.AA. que vieron anulado su impuesto autonómico al establecer uno nacional el Gobierno central: Cataluña, Extremadura y Andalucía.

El ministro se ha esforzado en diferenciar este tributo de uno sobre los ahorradores, como el que se ha pensado imponer en Chipre y que forma parte del rescate del país mediterráneo. "En España no existe, ni ha existido, ni va a existir un impuesto sobre los depositantes, sobre los ahorradores", ha explicado Montoro.

"No hay un impuesto sobre depositantes ni va a haberlo, hablamos de otro impuesto sobre las entidades bancarias, es un impuesto modesto, no recaudatorio y que el Gobierno tenía la intención de introducir un tipo muy moderado que servirá para compensar a las comunidades autónomas que lo han tenido vigente y cuya vigencia queda anulada", ha señalado Montoro en el Congreso.

La banca lo ve como un "mal menor"

Según Hacienda, es preferible para las entidades bancarias un impuesto estatal que tener impuestos dispersos y diferentes en cada una de las CC.AA. La banca española ha acogido como un "mal menor" el anuncio del Gobierno, según han informado a Europa Press en fuentes del sector.

La sensación de las entidades financieras, según las citadas fuentes, es que el propósito del Ejecutivo pasa por evitar una "proliferación" de un impuesto que ya intentaron establecer Canarias, Extremadura y Andalucía. Ahora, el Gobierno está obligado por ley a compensar a estas regiones.

Además, han minimizado el posible impacto sobre las rentabilidades que estos ofrecen a los clientes para captar depósitos. "Las remuneraciones dependen de muchos factores, y no se cree que el de una tasa tan pequeña prevalezca sobre otros más importantes", han explicado las fuentes del sector.