'El poder de la sangre', la guía definitiva sobre los vampiros
- Pedro L. López repasa la historia de los vampiros en el cine, la literatura...
- "La salud de los vampiros es excelente, por algo son inmortales", asegura
Los vampiros son el mayor mito del terror en casi todas las culturas, y el que mejor ha soportado el paso del tiempo por su fascinante mezcla de terror y seducción, y porque "¿Quién no ha querido ser un vampiro alguna vez?" Al menos eso es lo que opina Pedro L. López, el autor de El poder de la sangre. La biblia negra de los vampiros (Dolmen), la guía definitiva sobre los "chupasangres"
"El poder de la sangre -asegura Pedro- es un profundo estudio de la figura del vampiro. He intentado "desnudar" el mito y contar todo, con mayúsculas, lo que se refiera a este personaje. En él os encontraréis sorpresas, muchas sorpresas. Se habla de su figura en el cine, en la mitología, en el cómic, en la televisión, en la gastronomía y por supuesto en la literatura, pero sin olvidarnos de esas curiosidades, de esa parcela desconocida del vampiro que más nos atrae, como pueden ser los asesinos en serie que se han inspirado en él, técnicas de erosión del cuerpo que se utilizan para parecerse al mito, festivales y performances alrededor del mundo dedicadas a Drácula, y un largo etcétera".
En cuanto a por qué nos resultan tan fascinantes, Pedro Opina que: "Son sin duda los gentleman del horror. O al menos esa es la imagen que nos ha comercializado el cine. Pero la realidad es otra mucho más cruda y horripilante. Supongo que lo que más atrae del personaje es la inmortalidad, el no morir siempre es atractivo y fascinante".
"Caín y Lilith fueron los primeros vampiros"
Pedro tiene claro quién fue el primer vampiro: "El bíblico Caín, sin lugar a dudas, que debido al magnicidio que cometió con Abel fue condenado a vivir de la sangre de los demás seres humanos, aunque algunos estudios colocan a Lilith como la madre de todos los vampiros. O sea que tenemos dos seres primigenios en el mito. Precisamente en el libro comento el nuevo proyecto en el que está embarcado Will Smith para este mismo año. Está decidido a dirigir y quizás a protagonizar una película sobre este primer vampiro encarnado en Caín titulada The Legend of Caín con guión del autor de la serie Carnivale el estupendo Daniel Knauf".
Pero ¿Cómo reconocemos a un vampiro? "Difícil y fácil a la vez -contesta Pedro-. Porque dependiendo de en qué ámbito nos movamos puede pasar más o menos desapercibido. Las características básicas son siempre las mismas: una extremada palidez, una mirada magnetizante, que se sientan molestos con el ajo y las rosas, aversión a los iconos religiosos (siempre que haya fe tras ellos) y pavor a la luz solar. De todas maneras hay muchas más formas de reconocerlos y todas y cada una de ellas están en el libro".
"Hay más de 120 tipos de vampiros"
Pedro ha recogido en el libro: "Más de 120 tipos de estos depredadores catalogados por países. Hay muchos casos que realmente son curiosísimos como el caso del Zmeu, vampiro Moldavo que toma la forma de fuego para entrar en las habitaciones de jóvenes muchachas o bellas viudas y una vez dentro se convierte en un apuesto galán que las seduce. Después de haberse saciado con sus cuerpos hace lo propio con la sangre de estas conquistas".
"O el del Nosferatu escocés llamado Fear Liath también conocido como el gran hombre gris. Mide más de cuatro metros y tiene aspecto cadavérico, vive en los pasos de Ben Macdui, uno de los picos más altos de Cairngorms. En ese emplazamiento espera a los montañeros para drenarles su sangre, pero no toda, le gusta ver como mueren lentamente. Solamente puedes escapar a su ataque si accedes a escuchar la triste historia de la muerte de su amada. Si te niegas estas muerto. La variedad es infinita".
Los vampiros reales
Pedro recoge también algunos casos de vampirismo supuestamente reales. "Si -asegura-, lamentablemente la mente del ser humano, a veces, rompe unas extrañas barreras que le hace comportarse de forma extraña convirtiéndolo en el peor depredador del género animal. Esos son los casos que narro en el libro. Personas que ha atravesado ese límite y oyen voces o se creen personajes que en realidad no son, pero actúan como tales".
"A todos nos suenan casos como el del vampiro de Hannover o el vampiro de Düsseldorff pero hay muchos más casos patológicamente sangrientos. Quizás uno de los más curiosos sea el del escocés Allan Mezies que tras ver más de 20 veces la película La reina de los condenados basada en la obra de Anne Rice se convenció de que Akasha, la vampiro del film, le había prometido la inmortalidad si cometía un asesinato".
"Tras encontrarse con un amigo y discutir sobre esa película en concreto le asestó 44 puñaladas, le abrió la cabeza se comió parte de su cerebro para después beberse su sangre. Tras de matarlo y de camino a su casa se cruzó, fortuitamente, con la madre del muerto a la que le preguntó con la mayor sangre fría del mundo, si sabía cómo quitar las manchas de sangre de la ropa. Creo que esta actitud nos dice bastante sobre la cuerda floja en la que se mueven estos sujetos".
"El vampiro español: El Súcubo"
"El típico vampiro español seria el Súcubo - asegura Pedro-. Su modus operandi es alimentarse de la energía sexual de sus víctimas hasta consumirla. Pueden hacerle varias visitas hasta conseguir su objetivo y cambiar de apariencia durante el proceso. El objetivo sufrirá el exceso como un sueño erótico y cuando quiera darse cuenta será un cascarón vacío sin energía ni vida".
El libro también hace un repaso de la figura del vampiro en la literatura, la música, los cómics y, por supuesto, el cine: "Mis películas preferidas -asegura Pedro- son El Baile de los Vampiros del gran Polansky, el Drácula de Coppola, Entrevista con el vampiro de Neil Jordan y la adaptación del cómic 30 días de oscuridad del acertado David Slade.
"Las que menos me han gustado son Blácula de William Crane, Capitán CRONOS cazador de vampiros de Brian Clemens y Guardianes de noche del ruso Timur Bekmambetov por poner tres ejemplos de películas poco, digamos, "habituales" y difíciles de apreciar por su manera de ver los vampiros".
"Después tenemos un buen montón de films de serie B o Z que toca el tema vampirismo muy olvidables. Aunque alguno de la Hammer haya conseguido situarse en la categoría de incunable como puede ser La Leyenda de los Siete Vampiros de oro del experto Roy Ward Baker por poner un ejemplo.
En cuanto a los mejores cómics del género: "Sin lugar a dudas Vampirella (especialmente la de Pepe González), Blade, Morbius, 30 días de Oscuridad y todos los dibujados por Gene Colan (Drácula) y Berni Wrightson".
"'Crepúsculo' es un fenómeno fan, al estilo de Justin Bieber"
En cuanto a productos como True Blood o Crepúsculo, Pedro asegura que: "Creo que son un producto enfocado descaradamente a captar a un público adolescente. Desvirtúan la imagen clásica del vampiro, sobre todo Crepúsculo. True Blood, al pasar las temporadas se ha endurecido un poco más, pero ambas son el estandarte de un tipo de vampiro que, creo, no es el vampiro real que todos esperamos. Es evidente que tienen su público, pero es más un fenómeno fan, al estilo de Justin Bieber, que pasión por el personaje".
En cuanto al futuro de los vampiros, Pedro comenta que: "Creo que el futuro es muy bueno, hay proyectos programados para hacer películas hasta el 2016 que tienen al vampiro, directamente o colateralmente, involucrado en ellas. Como puedes ver quedan Nosferatus para rato. Su salud es excelente, por algo son inmortales...".
Tras este estudio, Pedro confiesa que le gustaría ser un Vampiro: "Y por qué no, si lo piensas, con todos los avances tecnológicos de hoy en día la vida no sería tan incómoda. El único inconveniente real sería tener que "cazar" para sobrevivir. Matar para subsistir. Pero también eso se podría solucionar. ¿Verdad? Creo que ser inmortal sería una buena recompensa a cambio de unas pocas privaciones".
Por último, Pedro nos ha avanzado que, después de los vampiros , "Estoy acabando lo que será mi primera novela que lleva como título preliminar Fuegos Fatuos. La trama tiene como ingredientes mucha policía corrupta, zombis, experimentos muy peligrosos, tecnología punta, magia negra y comercio de órganos humanos con el gran colisionador de Hadrones (LHC) como telón de fondo. Toda la novela transcurre a caballo entre Ginebra y Barcelona. Creo que se puede definir como TecnoTerror, o así me gusta llamarlo a mí. Tiene todos los ingredientes para gustar a un amplio abanico de lectores, y no solo al fan del género de terror.