El beneficio de las empresas cayó un 62,3% en 2012, según el Banco de España
- Esta caída dobla la registrada en 2011
- Las causas: las pérdidas en las ventas de acciones y el deterioro de activos
El beneficio neto de las empresas no financieras españolas disminuyó un 62,3% en 2012, con lo que se intensificó la caída de 2011 -cuando se redujo un 34,7%-, según los datos de la Central de Balances Trimestral (CBT) del Banco de España.
Ello se ha debido, principalmente, a las "cuantiosas" minusvalías generadas en operaciones de venta de acciones, así como por los "fuertes" deterioros por pérdida de valor en activos financieros. Un efecto negativo que se vio compensado "parcialmente" por los menores costes por las indemnizaciones pagadas en los despidos.
El "notable" retroceso registrado por las empresas no financieras afectó a casi todas las ramas productivas, en un contexto de debilidad de la demanda interna y de menor dinamismo de las exportaciones, indica el Banco de España.
De hecho, el valor añadido bruto (VAB) de estas empresas se redujo un 3,9% el pasado año, lo que prolonga la pauta contractiva del año anterior, cuando descendió un 1,3%.
Las exportaciones perdieron fuerza
Este comportamiento se debió, en gran medida, a la debilidad de la demanda nacional, en un contexto en el que la actividad exterior mostró una evolución más positiva, aunque fue perdiendo fuerza progresivamente a medida que avanzaba el ejercicio, señala el Banco de España.
Todos los subsectores industriales sin excepción experimentaron disminuciones del VAB, si bien las caídas más intensas se produjeron en la fabricación de productos minerales y metálicos, y la fabricación de material de transporte (-13,2% y -11,9%, respectivamente).
El menor dinamismo de la actividad exterior repercutió en el sector industrial, que se contrajo un 10%, mientras que el sector comercio y hostelería y el de información y comunicaciones disminuyeron también con fuerza, más que en 2011, ya que se vieron afectados directamente por la caída del consumo privado.
La única excepción fue la energía, en la que el VAB mostró un leve crecimiento, del 0,8%.
En consonancia con la "atonía" mostrada por la actividad productiva, el Banco de España constata que las empresas siguieron reduciendo sus plantillas, aumentaron la intensidad de los ajustes y recortaron las remuneraciones medias.
Las plantillas solo aumentaron en comercio y hostelería
Por lo que respecta a los ingresos financieros, se redujeron como consecuencia de los menores dividendos recibidos, en tanto que los gastos de esta naturaleza aumentaron un 1,5% como resultado del incremento del endeudamiento, que creció un 1,3%.
Todo ello desembocó en un deterioro de los beneficios ordinarios de las sociedades.
Por su parte, los gastos de personal se redujeron un 2,4%. Al analizar por el tipo de contrato, se comprueba que el empleo de carácter temporal concentró el principal ajuste, con una reducción del 15,3%, mientras que en el colectivo de trabajadores con contrato fijo el descenso fue más moderado, del 0,7%.
Por ramas de actividad, se observaron reducciones en casi todos los sectores analizados. La única excepción fue el de comercio y hostelería, que en 2012 presentó una variación ligeramente positiva de sus plantillas medias.
Las remuneraciones medias crecieron un 0,3%, lo que supone un descenso respecto al aumento del 1% que registraron en 2011.